35. Domingo

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Gracias al cansancio del día de ayer, Jung Kook ha podido dormir mejor de lo que creía. Le suena la alarma del móvil a las 10:00 a.m. y se levanta casi saltando de la cama. Sin desayunar ni nada, corre a la ducha. Se lava bien la cabeza para quitarse los productos que le echó Ji Woo en el pelo. Sale de la ducha, se seca rápido, se pone una toalla en el pelo y se va a su habitación con la toalla puesta. Abre el armario para buscar qué ponerse, tampoco hay mucho donde elegir. Saca unos vaqueros normales y una camiseta negra. Se viste corriendo y empieza a recoger el traje de ayer en el portatrajes y guarda los zapatos en una bolsa de tela porque no sabe qué hacer con ellos. Realmente le gustó mucho la ropa que le dejó Ji Woo. Cuando lo tiene todo guardado, se va al baño y se seca el pelo con el secador y la ayuda de un cepillo para apañarlo un poco.

Cuando está listo va a la cocina a prepararse algo que desayunar. Pasando por el salón avisa a su madre de que se va a ir, le dice que ha quedado con Ho Seok poniendo la excusa de que le va a devolver el traje y los zapatos y, que lo más seguro, es que se quede a comer con él. Desayuna rápido, cuando vuelve a la habitación mira en el teléfono y aún quedan 15 minutos para que llegue Ho Seok. ¿Qué se supone que va a hacer en ese tiempo? Los minutos parecen eternizarse en horas. Jung Kook intenta ser paciente, pero es superior a él.

Aun así, el tiempo acaba pasando y, un poquito pasadas las 11:30 a.m., Ho Seok escribe al chico diciéndole que ya está esperándole. Jung Kook coge todas sus cosas como si fuese un rayo. Intenta no ir corriendo al coche con el fin de no parecer más desesperado de lo que está ya por verle. Cuando Ho Seok se baja del coche para abrirle el maletero, Jung Kook ve que lleva gafas de sol, le quedan muy bien. No se puede cree que este ahí ya con él.

—Déjame eso que lo guardo, —le pide el portatrajes al chico, Jung Kook como puede, intenta funcionar. Le da la funda y la bolsa con los zapatos, el chico lo guarda todo—. Sube anda. —Jung Kook se sube al coche. El corazón vuelve a irle demasiado rápido.

Ho Seok se sube al coche también y se queda esperando a que Jung Kook le diga algo pero lo único que hace es mirarle. A Ho Seok le empieza a entrar la risa.

—Vale que me he retrasado 7 minutos, —rompe el silencio Ho Seok—, pero no creo que sea necesario que me castigues de esta manera.

Para variar a Jung Kook le dan igual las palabras del mayor y se abalanza sobre él agarrándole del pelo para besarle, Ho Seok le corresponde el beso. Ambos necesitaban la suavidad de los labios del otro. Jung Kook acaba soltando a Ho Seok.

—Perdón, no podía aguantarme las ganas. —Ho Seok sonríe por lo estúpido de la disculpa—. Y las gafas de sol te quedan muy bien, eso ha influido en que no haya podido resistirme.

Ho Seok no puede evitar reírse pero le da las gracias por el cumplido.

—Me las he tenido que poner porque hoy un niño me ha hecho madrugar y el sol me molesta, —Comenta Ho Seok, ahora el que se ríe es Jung Kook.

—¿Crees que se me puedan quitar las ganas en algún momento? —pregunta Jung Kook sin dejar de mirarle.

—¿Las ganas de qué? —pregunta Ho Seok sin entenderle.

—De besarte. —Jung Kook se muere con la sonrisa que se dibuja en el rostro de Ho Seok.

—A ver, igual esto es un poco egocéntrico, o egoísta, o no sé, —responde Ho Seok sin encontrar las palabras correctas—, pero me gustaría que no se te quitaran nunca.

—Me quedo más tranquilo, —continúa Jung Kook mirando la calle por primera vez desde que se sentó en el coche.

—No sé por dónde voy a empezar a hablar, —comenta Ho Seok llamando la atención del chico.

🖤DANCE WITH ME🖤 -HOPEKOOK-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora