D.O.N

PRIMERA PARTE

Cada luna llena siempre tenía el mismo sueño, aquel pájaro negro me arrebataba a lo más preciado que tenía, mi hermana. Me senté al borde de la cama y respiré hondo, intentaba que el dolor que tenía en el pecho se apaciguara, aun con el pulso tembloroso abrí el cajón de la mesita de noche y cogí la pistola que tenía guardada, no podía permitir que la pesadilla me nublara la vista en la misión.

El click del arma al ser cargada retumbó por mi cuarto en aquella oscura y silenciosa noche, era la hora y no podía seguir sumida en mis pensamientos..

Entré en el cuarto de baño, iba a tomar una ducha fría para despejar lamente, no estaba dispuesta a tirarlo todo por la borda a estas alturas. Después de 15 minutos me encontraba vestida y terminando de añadir armas a mi equipo, pantalones de cuero, top, unas botas altas y a mis chicas, no necesitaba nada más para esta noche.

-¿Lista?.-miré a la pelirroja que me esperaba en la puerta y le sonreí,nuestro tatuaje se iluminó, era la señal que necesitábamos para ponernos en marcha, Dani nos estaba esperando.

Bajamos por las grandes escaleras de madera y mármol, en la planta baja se encontraba una de las tantas salas que usábamos mi equipo y yo y por supuesto donde los mayordomos nos aguardaban para darnos los últimos retoques.

-Carlos,necesito el informe del último caso.- el mayordomo indicado dio un paso al frente mientras nos terminaba de entregar nuevas armas y municiones. La fila de trabajadores que estaba en cerca de la mesa también se pusieron a hacer la parte que les tocaba, cada uno forma parte de nuestro preciado plan, eran imprescindibles.

-Se trata de un médico ejemplar, aparentemente sin rastro de antecedentes, trabaja en uno de los hospitales más importantes de la zona 0. Lo dicho todo parece normal hasta que vimos a una chica salir despavorida por la puerta trasera, 4 tiros y no le hicieron nada ni una gota de sangre como si no le afectaran las balas.

Lo miré fijamente, la zona 0 era popular por casos de corrupción,normalmente nos llamaban para ello, nunca tuvimos contacto directo del cliente de eso se encargaban nuestros equipos, pero Daniela averiguo que se trataba de la secreta....No había escuchado nada igual en ningún país en el que nos habían contratado, no todos los días se encuentra a una chica que se resiste a las balas. Me fijé en como entraba gato a la sala, maulló y se acercó directamente a Rose ,se se agachó y tras varios minutos en los que se encontraban casi en trance los dos, ella habló.

-Por lo visto Gato acaba de encontrar a la chica, al parecer se encuentra en una de las fábricas del norte cerca de la zona 0, está muy asustada.- alargó el brazo a la mesa común para agarrar unos frascos de tranquilizante, obviamente íbamos a salvarla. Los tranquilizantes van directos a los atacantes, una de nuestras reglases no matar a menos de que sea estrictamente necesario, siempre nos encargábamos de que las autoridades vayan a buscarlos.

Gato se acercó y me sacó de la ensoñación, tenía perfectamente calculado los movimientos necesarios y el plan "a", "b", "c"y "d" de escape. La situación era más delicada de lo que imaginábamos, estas cosas no siempre pasan por pura coincidencia yeso me tenía un poco nerviosa, más de lo que estaba de por sí.

-Gato cree que vamos a encontrar algo valioso hoy.

Miré a Rose pero ella no me miraba a mi, no perdía de vista a su gran compañero. Tenían una conexión tan especial que se podían llegara comunicar, creo en ellos y también en su vínculo no es algo raro para mí, me acostumbré a ello hace mucho tiempo.