Me bajé del coche pegando un portazo,la situación no me gustaba, esos chicos me parecían muy sospechoso sobretodo el tal Heith. No me hace ni pizca de gracia.
Busqué en mi bolso las llaves, mientras las chicas charlaban de la noche,estaba segura de que Rose le diría que no iba a ir pero al parecer decía todo lo contrario y me cabreaba aún más, ¿no entienden que esos chicos tienen algo raro?. Abrí la puerta por fin y dejé las llaves en la entrada junto con mis cosas.
-Anne¿vas a ir a la fiesta?.- me giré hacia las chicas y notaron mi fastidio, ha llegado a ese momento del enfado en el que no puedo ocultar mi expresión.
-No me pienso poner en riesgo, no se nada del chico ese y si no os disteis cuenta por alguna razón llamarla "x" no podía comunicarme con vosotras. La crema comunicadora de Rose, nunca ha fallado.- me eché un vaso de agua y lo bebí de un trago, necesitaba relajarme o iba a explotar. Estos días he tenido mucho estrés acumulado...
-Puede que la crema comunicadora se haya caducado.- giré y la miré¿really bitch?. Ella sin embargo pasó de mí y se acercó ala nevera a por un zumo.
Sé que se ha dado cuenta de la situación,pero estoy jodidamente cabreada, no tengo tiempo de los berrinches amorosos de mi amiga.Sabe perfectamente que el amor por ahora no está en los planes de ninguna de nosotras,nuestro trabajo no nos lo permite.
-Daniela,acabas de conocer a ese chico, no le ha dado tiempo a regalarte la luna si es lo que quieres.-pude ver a Rose suspirar coger a gato e irse, no quería estar en el medio de lo que iba a pasar.
Escuché reír amargamente a Daniela.
-Eres una capulla con todas las letras.- cerró de un golpe la nevera y agarró el vaso de zumo dispuesta a irse pero no iba a ser ella quien llevara la última palabra.
-Soy todo lo que quieras pero mantengo la mente fría con un claro sospechoso.- se giró y me encaró, la estaba cabreando aun más, yo y mi boca no nos podíamos quedar calladas en este punto de la conversación.
-Tú y tu frialdad os podéis ir a la mierda, si no quieres venir a la fiesta no vengas y menos con esa cara de vieja estreñida.- la había cabreado de verdad, a Dani le duraban los enfados unos días y esta vez no iba a ceder tan rápido.
Me echó una última mirada, dejó el zumo en la encimera y se fue a su cuarto, yo sin embargo, me senté en una de las sillas de la barra americana. Desde la última misión estoy en constante alerta y no me puedo llegar a relajar aunque sea un poco.
Si tan solo tuviera una vida normal sería todo más fácil. Desde que era pequeña mi día a día ha sido muy "especial". La historia familiar no es la de un bisabuelo que tenía una churrería y sus nietos y bisnietos llevaron su legado.
En realidad la historia comienza cuando mi tatarabuelo se metió en el mundo de la investigación, pero no le salió del todo bien, tuvo que escapar por miles de problemas que tenían al saber su identidad. "El anonimato no es una opción, en nuestro trabajo es una obligación".Recuerdo esa frase como un vago flashback de mi infancia..
-Niñas,necesito que me prestéis mucha atención, "el anonimato no es una opción, en nuestro trabajo es una obligación".- la voz de la que se hacía llamar mi madre siempre fue firme, nunca mostró ese amor maternal más de lo que fuese necesario. La habitación en la que nos encontrábamos era preciosa pintada con colores pasteles, rosa y celeste y estaba decorada con juguetes y peluches dando a entender que era una habitación de juegos pero la realidad era muy distinta..."viste al lobo de cordero para que parezca tierno", en aquella sala nos preparaban mentalmente para nuestras futuras misiones. Normalmente la familia preparaba a los niños a partir de una edad mayor a la que teníamos en ese entonces pero en mi casa eso no pasó
Mi hermana se encontraba sentada en una de las sillas de colores, tenía dos coletas en su pelo castaño y sus grandes ojos prestaban atención a todo lo que mi madre decía. Como la mayor debía potegerla pero no lo logré...
Según la historia que me contó mi abuelo, el tatarabuelo tuvo que separara su familia, dejó a sus hijos con unos parientes lejanos pero él y su mujer desaparecieron, se cree que lo hicieron para que sus hijos pudieran pasar desapercibidos de la gente que los buscaba. Cuando crecieron esos niños quisieron conmemorar la memoria de sus padres siguiendo el negocio familiar, pero esta vez sin aquel fallo que tuvieron, debían mantenerse en el anonimato.
Esa era la historia genérica de la familia, después de eso el abuelo me explico que normalmente los que llevamos el negocio familiar somos nietos o primos, pero hay casos en el que lo lleva la mano derecha de alguno de mis tíos o incluso de mi abuelo, ya que antes no había problemas en el personal porque las familias solían ser aún mayor,en estos tiempos no es el caso.
Perola historia de mis amigas fue diferente. Rose y Daniela son chicas que por circunstancias que ocurrieron en su pasado acabaron "mal"y en cierta manera encerradas, mi abuelo se enteró de estas chicas y por alguna razón me pasó el cargo... más tardes se convirtieron en mis hermanas y empezamos a trabajar juntas en este negocio.
-Señorita.-mis pensamientos se dispersaron al escuchar a Carlos.-debería arreglarlas cosas con su amiga.
Me giré hacia él y sonrió, su sonrisa era comprensiva incluso de pena. Tanto Carlos como yo sabíamos las condiciones de aquel dichoso contrato, en ningún momento se le podía arrebatar la opción de una nueva vida a uno de nuestros trabajadores, siempre y cuando se cumpla los años de trabajo.
-No quiero perderla.-Carlos me abrazó y yo le devolví el abrazo. Hacia tiempo que no tenía contacto fraternal, en estos momentos necesitaba un apoyo familiar, "anhelar algo que nunca has tenido es una falsa, porque nunca lo has sentido ".La voz de mi madre no desaparecía de mi cabeza, una de las razones de la separación de mis padres fue que ella era, es y será una mujer sin corazón.
Mi vista de nuevo se centró en Carlos que después de aquel agradable abrazo me preparó un té, entre él y yo no hacía falta una conversación de por medio para estar agusto. Me acerqué y le volvía abrazar y me dirigí a mi habitación a descansar, iba a ser una noche muy larga.
NARRADOR OMNISCIENTE.
Detrás de aquellas cristaleras de la cocina, se encontraba alguien escuchando la conversación. Me atrevería a decir que si Carlos yAnne parasen de hablar el corazón de aquella persona oculta se escucharía a miles de kilómetros y es que aquellos sentimientos seguían vivos. Algo se estrujó en su pecho cuando los vio abrazarse, ojalá todo hubiera sido más fácil.
Aquel sujeto miró al cielo y suspiró, estaba anocheciendo y debía darse prisa en salir de allí antes de que le descubran pero..
-Hacía tiempo que no veía a esta planta tan bonita, ¿no te parece?.- paró en seco y se giró para mirar hacia la cocina, estaba sorprendido de escuchar a Carlos aunque estaba desilusionado, no le miraba.- Al principio me desesperaba, no crecía por mucha agua, abono o vitaminas que le echase, pero ¿sabes qué?. Me di cuenta de que lo único que ella necesitaba era tiempo y mucho cariño. ¿Que haces de nuevo aquí ?
Entre aquellas personas se encontraba una planta, tan querida por los dos que por ahora como a las chicas no se les permitía amar ni ser amados.
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D.O.N
RandomAnne, Rose y Daniela junto a gato, forman una familia un tanto particular, unidas por un contrato, un tatuaje y una serie de misiones que harán que sus vidas den un vuelco en cada sitio que visiten. "El anonimato no es una opción, en nuestro traba...