🐉Verdades dolorosas🐉
Skyler
Mi cabeza duele y mis parpados pesan, haciendo que sea imposible que pueda abrir mis ojos. Lentamente logro hacerlo, haciéndome quedar confundida unos momentos, no es aquel lugar donde al parecer estuve hace unos minutos. Sonrió de lado cuando logro reconocer el lugar, el ruido del mis signos vitales lo delata, un hospital. Mi mente trabaja tratando de descubrir como llegue aquí precisamente, puede que sea una mala jugada de mi mente nuevamente o todo lo que sucedió hace tan solo unos momentos y esto, sea en verdad real.
No es algo nuevo para mi, estar en el hospital por alguna extraña razón me hace sentir en casa. Estoy muy acostumbrada a terminar en cualquier tipo de situaciones aquí, y haciendo lo que hago, termino siempre aquí. Con diecisiete años me acostumbre a estar de orfanato en orfanato, o en mejores situaciones: casa en casa. Si, hubo gente maravillosa que entro a mi vida, que realizo un gran cambio en ella, pero por vueltas de la vida, acabo todo mal.
Se lo que soy, y un angelito, precisamente no. Fui criada de una forma que tuve que ser despiadada, cruel, malvada , un demonio para poder sobrevivir. En el lugar donde le llamaban orfanato, cuando comienzas a ser mayor, tus oportunidades de poder ser adoptadas van disminuyendo, ¿Por qué adoptar a alguien que no podrás moldear a ser cómo tu?, ¿Por que querer a personas que pronto serán mayores?.
Recuerdo cuando llegue al orfanato, solo era una niña de diez años. No sabia como sobrevivir a este horrible mundo, pero no era estúpida, sabia que la vida no era arcoíris y felicidad. Pero aquel lugar lleno de oscuridad, miedo y explotación, era un paraíso comparado con mi propia casa, la casa donde vivía una tortura. Golpes, lagrimas, gritos eran comunes, y tuvimos que ver con nuestros propios ojos, un asesinato.
Luche, luche mucho para que no nos alejaran, el no lo permitió. Fuimos testigos del crimen perfecto y necesitaba callarnos, para siempre. Nos separo, ella era especial según decía, única como el, y yo era una completa basura a su lado. Y lo sabia. Nadie realizo preguntas, normalmente eran testigos de las marcas en el cuerpo, pero no nos ayudaron y decidieron callar.
Siete años de pesadillas, dolor y culpa por no cumplir mi deber y protegerla. Pero el maldito bastardo realizo todo lo necesario para no poder vernos nunca mas.
Huir del orfanato fue la mejor decisión, para poder encontrarla. Utilice lo único bueno que me había regalado, el amor y pasión por la adrenalina, las carreras ilegales era lo único que me ayudaba en cuerpo y mente. No fue fácil, nadie quería a la niña inexperta tratando de encajar en un lugar como ese, pero logre ganarme mi fama como, "Black Ángel", el nombre lo decía, soy un ángel muy oscuro.
Logre conseguir poder, reconocimiento y dinero. Con un simple revolcón las personas hacían lo que quería y soltaban información demás.
—Hola—una mujer pelirroja se coloca a mi lado y empieza a revisar mis signos vitales.—Ire ya mismo por el doctor, señorita Gambrell. Es asombro que haya despertado.
Y sin mas se marcha dejándome malditamente confundida, ya que ese no era mi apellido.
La puerta se abre y frente a mi aparece una mujer de cabello rubio brillante, ojos marrones y perfecta dentadura. Alzo una ceja al verla parece una muñeca , vieja, pero una muñeca. Su porte y vestuario parece de una.
—Hola cariño. Se que tienes demasiadas preguntas y prometo responderlas una por una , pero necesito que me digas , ¿Qué es lo ultimo que recuerdas?
—¿Quién mierda eres?—escupo sin mas y ella me mira con una sonrisa divertida.
Nadie, absolutamente nadie a tratado de ser amable conmigo en años.
—Ellos me dijeron que tenias una boca demasiado sucia. Me recuerdas a mi hija—Toma asiento en la silla a un lado de la camilla sin siquiera preguntar. —Y respondiendo tu pregunta, mi nombre es Margarita, Margarita Gambrell.
Y otra ves ese maldito apellido. Trato de recordar si en algún momento de mi vida la vi, pero nada. Es una completa desconocida.
—¿Por qué estoy aquí?, ¿Qué me paso?— trato de sentarme en la camilla pero el dolor en la espalda me lo impide, es el mismo dolor que tenia en el que parecía ser un sueño.
El temor de instalar en mi pecho. Si el dolor es real, el sueño también lo es.
—Moriste—suelta sin mas y yo quedo pasmada, definitivamente esto tenia que ser otro estúpido sueño. Pero se sentía tan real.
—Cariño, siempre te eh dicho de que no debes soltarlo así como así.—el hombre en la puerta me sonríe, se parce bastante a la mujer pero este es castaño con ojos claros—Disculpa a mi esposa querida, perdió la sensibilidad hace mucho.
—Si, cuando me casé contigo.
Sonrió divertida por la mirada que le da Margarita al hombre, que ahora se que es el esposo.
—Skyler, el es James, como ya dijo es mi insoportable esposo. Y como verás perdió el sentido del humor hace mucho.
—¿Esto es otro juego?, ya le dije a esa mujer pelirroja que ese no es mi maldito nombre—contesto furiosa.
—Diablos, se parece demasiado a Ryler. Es como su gemelita, pero más pequeña—James me sonríe divertido.
¿Qué acaso no se cansaban de sonreír?
—Es lo mismo que le dije yo. La mujer pelirroja de la que hablas se llama Clarie.— habla margarita.
—¿Clarie?, ¿Entonces no fue un sueño?.—alzo mi ceja, y james niega con la cabeza.
Las lágrimas caen por mis ojos. Estaba tan cerca de estar nuevamente juntas, de recuperarla. James me tiene un pequeño pañuelo dorado para limpiar mis lagrimas.
—Tienes que escuchar atentamente lo que te diremos, y cumplir con tu misión. Te ayudaremos, no estarás sola nunca más
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El primer capitulo de esta increíble aventura. Skyler les dará muchos dólares de cabeza.
¿Preparados?
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Almas Conectadas [Pausada]
RandomUn Angel queriendo destruir todo a su paso, dejando los temores y sentimientos. El infierno se desatara cuando sus alas se transforman en oscuras. Lo perdió todo, que más da arristagar el amor por conseguir, lo que siempre debió estar a su lado. La...