Tres

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🐉Libros y listones🐉

Skyler

Cuando las voces, se apagaron y todos estaban en sus habitaciones descansado, es hora de que la diversión empiece.

Suspiro y lentamente quito la sabana sobre mi cuerpo. No comparto habitación con nadie pero, mi hermana falsa esta entrenada para detectar cualquier movimiento. Nadie se puede enterar de mi salida, menos Ryler.

Camino hacia mi armario, tomo una pequeño bolso bajo este. Cuando me transformo en ella, tanto como mi apariencia y actitud cambia. Tenia mucha ventaja, mis enemigos no me reconocerían, ahora miso soy todo lo contrario a lo que fui.

Una jeans demasiado ajustados de cuero, un pequeño brelette negro a juego con la situación y para terminar unos tacones cerrados. Ajusto mi cabello rubio para poder colocar mi peluca negra, cabello corto y lacio al igual que antes.

Coloco una fuerte capa de labial negro en mis labios. Y con mi desmaquillante dejo a la vista mis tatuajes.

Lo de ser mitad ángel me ayudara demasiado con mis planes. Necesito entrar a la mafia y convertirme en alguien con medios necesarios para poder encontrarla. Mis nuevas habilidades son agilidad, y lo mas sorprendente, entre otras, son las increíbles alas. Pero llegaran cuando logre salvarle la vida, o proteger con excelencia a mi misión. Pero primero debo descubrir quien es ese protegido.

Bajo las escaleras con sumo cuidado, un movimiento en falso y descubrirán mi doble vida. Cuando estoy cerca de la puerta un leve careaspeo hace que me voltee.

Draco. Draco esta acostado en el sofá con su pijama de Slytherin y puedo reconocer el libro en sus manos "Romeo y Julieta".

—Nunca seas espía. No tienes talento en el sigilo. —El sonríe.

—¿Que haces a esta hora leyendo u libro? —Avanzo hacia el con el seño fruncido.

—Todo momento es excelente para leer un buen libro. Si es un clásico mucho mejor.

Asiento y mi mente trabaja rápidamente para lograr argumentar una buena excusa para estar vestida así. Mi primer día aquí y ya lo arruine.

—No te preocupes, nadie sabrá de tu salida. No soy un soplón.

Respiro aliviada. —Gracias.

Le quita importancia con su mano sin dejar de sonreír.

—No es nada, Skyler. Pero no olvides que mañana comienzas la universidad y debes estar muy atenta. Soy muy exitrictos.

—Copito de nieve, eres el mejor. Te debo una.

—Me debes un libro.—larqueo una ceja y el me sonríe con inocencia— Hay que aprovechar las oportunidades.

—Todos lo que quieras.

Dejo un beso en su mejilla y camino rápidamente hacia la salida.

Camino hacia mi motocicleta, la cual me costo bastante conseguir. Lo único que recuerdo es que le había dejando a manos de un amigo y no fue nada fácil volver a recuperarla. En ella había todo tiempo de dibujos que realice a lo largo de mis años, había fechas, metas, pistas y sobre todo recuerdos

Mi vida contada en unos dibujos.

Coloco mi casco para asegurarme que mi peluca no se despegue de mi cabeza y arranco a todas la velocidad que la motocicleta pueda permitir. La carrera de hoy era en un desierto un tanto alejado para que los policías no se involucren.

Acelero cuando observo los autos amontonados y la gente eufórica ante la adrenalina. Las carreras ilegales eran un gran espectáculo, y una gran fuente de dinero.

Acelero haciendo que la gente se aparte y comienze a murmurar. "Black Angel" estaba de vuelta y iba por todo.

Estacionó frente a una gran camper negro, un musculoso hombre esta frente a esta con dos chicas a su lado. Largos cabellos rubios con mechones negros, ojos verdes y una cicatriz en la mejilla izquierda, el es Eco.

Que su apariencia no te engañe puede parecer un horrible hombre con pasado oscuros, pero en realidad es un hombre sumamente adorable. Es mi patrocinador y encargado de cada vez me respeten más.

—¿¡Como esta mi motociclista favorita!?, ¿¡Virnes a herir egos de machos frágiles!?— comienza a gritar en mi dirección.

Freno de golpe frente a este y subo mi bizera para que me pueda observar mejor, le doy una sonrisa ladeada.

—Claro que si Eco. ¿No crees que necesitan que les bajen el ego tan alto que tienen?

Quito mi casco y acomodo mis cabellos pea asegurarme que ningún machon rubio salga de su zona.

—Hay angelito, hoy no te salvas de la furia de Nate. Lo abandonaron a mitad del acto y sabes como se pone nuestro drama queen—Bromea.

Nate State es el encargado de mis apuestas, el es la cara bonita del equipo, una de sus miraditas y ya tenemos a varios apostando a mi favor.

Pero su único defecto es una gran cualidad de Drama Queen, ese chico enserio es un verdadero fastidio.

El aparece frente a nosotros aplaudiendo con una sonrisa sarcástica. Ruedo los ojos cuando veo su traje rosa chillón, y algunos mechones rosas en su cabello castaño.

Alguien debería decirle que el rosa no va en los trajes, ni en el.

—¿Joder Queen, te peleaste con tu armario? —Eco mira su atuendo con verdadera sorpresa— El morado resultaría más tus ojos.

—No me llames "Queen", ¿entiendes? —gruñe.

—Con ese humor de perros, entiendo porque no tuviste un buen polvo. — recalco la palabra "Tuviste".

Me mira completamente furioso.— Nuestro pequeño Ángel de la muerte a decidido visitarnos. Me siento honrado.

Es común estarlo, perdimos varias sumas de dinero ante mi ausencia en las carreras.

—No comienzes con tus patéticos juegos, State. No estoy de humor para ellos.—amenazó.

Solo quería sentir la adrenalina, era el único momento en donde todos mis recuerdos se borraban.

—No me digas que hacer, Ángel. Esto No es un juego, sabias en lo que te metias. Perdemos dinero.

Ruego los ojos.

—¿De cuanto es la apuesta?

Tenia un objetivo en mente y haría todo lo que sea posible para conseguirlo. Su rescate.

—Un millón si logras sobrevivir y ganarle a "The King". El 20% es completamente mío.

—No dudes que le pateare el trasero. Necesito aumentar mi reputación

—Poder femenino, me gusta.

Eco empuja suavemente a Nate y sin dejar de sonreír se acerca a mi. Deja un suave beso en mi frente.

Eco me cuida desde que soy una niña. Desde que escapé del orfanato, el me liberó de la jaula en donde me tenían encerrada. Libero al angel oscuro.

—Buena suerte angelito—coloca el listón morado en mi brazo.

Nuestra pequeña tradición era aquel listón, simboliza la suerte. En cada carrera el lo colocaba en mi brazo izquierdo, justo por encima de mi cicatriz.

Me coloco el casco y arranco hacia la liña de meta. El juego comienza.

🐉

Espero que les guste mucho este capítulo. La hisotria tiene más drama que mi vida, osea, mucho.

Besos: Estrella.

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⏰ Última actualización: May 01, 2021 ⏰

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