Disclairme: estos personajes no me pertenecen, son propiedad de Kōhei Horikoshi creador de Boku no hero academia.
Pareja: Dabishiga
Advertencia: Lenguaje inapropiado.
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Un joven de unos dieciséis años corría a todo lo que le daban sus piernas por los pasillos de la gran preparatoria de Yuyei.
¡No iba a llegar! ¡No iba a llegar! ¡Maldición!.
Con el corazón y respiración acelerada trataba de llegar a tiempo a su primera clase, ya llevaba varios días acumulados en los que llegó tarde y no había presentado un justificante para todas sus faltas, sin embargo el maestro Toshinori era el profesor más accesible de todos, por lo menos más que el profesor Aizawa y le dijo que una inasistencia más y podía darse como reprobado en su materia sin derecho a exámen final. Aay, odiaba al docente con cara de mapache. Para rematar esa clase era la de física ¡él nunca entendió física!, ni sumas, ni restas, ni descomponer ¡malditos vectores!.
Cuando llegó al salón de clases y vió como varios alumnos se encontraban platicando unos con otros y no estaba el profesor rubio, el alma le volvió al cuerpo. Busco con la mirada a su loca amiga rubia, cuando la encontro se dirigió hacía ella y cuando llegó vio que la chica decoraba sus hojas de la libreta con sus muchos marcadores y plumones de colores, y de olor a frutas claramente.
—Oh Tomura-kun, llegas tarde de nuevo—menciono la rubia mientras el de cabellos color azul pastel tomaba asiento a lado de ella—Él profesor Toshinori tuvo que ir a la dirección y dejo a cargo a Dabi—señalo al pelirrojo de lentes que ahora se encontraba en el escritorio con la lista.
A Tomura se le salió el alma otra vez.
—Toga, vas a ir con el idiota de Todoroki y le vas a decir a ese puto nerd que me pongo el punto de asistencia—dijo con una vena resaltando en su frente y rascando con desesperación y ansiedad su pálido cuello.
—¡Eeeeeh! no puedo hacer eso, Tomura-kun—dijo nerviosa por la orden de él de ojos carmesí.
—¿Cómo qué no?—con voz siseante susurro. Había notado en alguna ocasión que la rubia se llevaba un poco con el pelirrojo cuatro ojos.
—No, no, no—se trataba de excusar—Quiero decir, Dabi es del tipo de persona que no mezcla las amistades con ese tipo de favores—explico conociendo la personalidad del Todoroki—Es decir, es una persona muy correcta.
—hummm—Era claro que Toga no iba a ir.
Tenía que pensar en algo rápido, algo con que convencer al chico. Era obvio que el pelirrojo era casi tan antisocial como él, pero un antisocial muy inteligente, seguramente era de esos que se la pasaban leyendo y leyendo libros para memorizar, estudiar, estudiar, bla, bla, bla... Bueno eso era lo pensaba el peliazul.
Tal vez lo invitaría comida y esperaría a qué lo olvidará o lo amenazaria con golpearlo, no eso no, el nerd era físicamente más alto que él, podía ser un puto loco por el conocimiento pero era claro que no era un debilucho. ¿Entonces, qué? Podría ser...
¿espantarlo?, si.
Pero qué es lo que a un chico como él le podía espantar. ¡Ya lo tenía!, empezó a reír de forma bastante tonta siendo ignorado completamente por todos excepto por su amiga.
Las ideas de Tomura nunca iban a su favor.
Desde su asiento volvió a dirigir su mirada hacía él chico de lentes, estaba sentado ahí en el escritorio leyendo quien sabe que cosa, esperando que regresará el profesor para volver a su lugar y reanudar la clase. Era su oportunidad.
