011.-Los chicos

16 2 0
                                    

Zoe Russell

Entro en la habitación y cierro con cuidado. Me acerco al armario y busco algo de ropa que pueda abrigarme. Me visto, cojo el peine y me hago cualquier cosa. Solo quiero entrar en calor.

-Joder, que frío

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-Joder, que frío. -froto mis manos intentando entrar en calor.

-Parece que alguien tiene frío. -escucho una voz detrás de mí.

-Imbécil. -me alejo de él acercándome a la ventana.

-Mi nombre es Kody, no imbécil. -informa. Nos quedamos en un silencio incómodo por unos instantes. -Me gustaría saber cuál es tu nombre.

-No te lo voy a decir.

-Pues tendré que llamarte enana. -escucho su dulce risa.

-Me llamo Zoe, contento? -salgo de la habitación dando un portazo. Estoy harta, quiero irme!

-A dónde vas? -escucho la voz de Kody a mi lado.

-Lejos de ti. -digo seca. Eso parece molestarle.

-Escucha, no quiero que te enfades conmigo, pero ahora que te he encontrado no te voy a dejar marchar. -antes de que pueda decirle algo Kody desaparece.

-Qué cojones?

Iris Balley

Me pongo mi ropa y dejo mi pelo suelto.

Tenemos que encontrar una forma de escapar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Tenemos que encontrar una forma de escapar. Y pensar que ese fue mi último partido con papá, la última vez que acaricié a mi gata, o la última vez que vacilé a mi hermana.

Echo de menos a las de equipo de fútbol, la comida de mamá y hacer tontería con las chicas cuando quedamos.

-No te va a pasar nada, no te pongas así. -dice el chico de ayer entrando por la puerta. -Jackson Clark, encantado. -me extiende la mano, yo le ignoro y me tumbo en la cama dándole la espalda. -Vaya, normalmente suelen caer rendidas a mis pies.

-Vete a la mierda. -eso me... Enfada? Es una sensación rara. Salgo de la habitación, antes de llegar a la cocina me encuentro a Zoe por el camino. -Hay que salir de aquí cuanto antes. -escuchamos un portazo en el último piso. 

-Vaya, parece que no contaremos con Alli esta tarde. -entramos en la cocina y vemos a Luna y a Madyson sentadas en la isla ayudando a Avani.

Luna Porter

Después de vestirme y ponerme unas cuantas sudaderas para no congelarme intento encontrar mi teléfono entre las cosas que trajeron. Al parecer enviaron unos mensajes a nuestros padres diciendo que íbamos a estar unas semanas en una isla o algo así. No sé que es lo que vayan a hacernos, pero no creo que sea bueno. -Dónde está? -susurro para mí misma después de buscar entre la ropa, los cajones, el baño y todos los lugares posibles para esconderlo. 

-Buscas esto? -me giro y veo al cabrón que me secuestró con mi teléfono en la mano. 

-Dámelo! -intento cogerlo pero el es más alto que yo y no llego, ya que tiene el brazos estirado. 

-Cómo se dice? 

-Cómo se dice? -me burlo de él intentando imitar su voz. 

-Creo que subiré alguna foto mía a Instagram. -enciende el móvil, pero lo que no sabe es que tiene contraseña.

-Inténtalo, no vas a poder. -me tranquilizo, falla unas tres veces bloqueando así el teléfono por una hora. -No la vas a adivinar nunca. 

-Pero cómo lo haces? -salgo de la habitación ignorando le por completo. 

-Vuelve aquí. -ordena desde la puerta aún con mi móvil en la mano. Al ver que no le hago caso se enfada, parece un poco dolorido? Serán imaginaciones mías.

-Avani? -pregunto asomándome a la cocina. 

-Aquí mi niña. -dice apareciendo por la puerta de atrás con unas bolsas de harina en las manos. -Voy a hacer galletas, quieres ayudarme?

-Claro. -me siento en la isla a su lado.

-Puedo unirme? -pregunta Madyson apareciendo con su preciosa melena rizada.

Madyson Lee

-A dónde vas? -pregunta uno de los secuestradores, según él prefiere que le llame Luke. 

-A donde no te importa. -antes de poder abrir la puerta el se mete en medio. -Qué? 

-A dónde vas? -vuelve a preguntar.

-Sal de en medio. -intento esquivar le pero él me agarra por las muñecas, me acerca más a él poniéndome nerviosa.

-Parece que ricitos está nerviosa. -sonríe mostrando su perfecta dentadura.

-No me llames así.

-Pues dime tu nombre y dejaré de hacer lo. -intenta cruzar nuestras miradas. 

-Madyson. -me suelto de su agarre y salgo de la habitación con los nervios a flor de piel. -Puedo unirme? -pregunto al entrar en la cocina y ver a Luna ayudando a Avani.

-Claro, siéntate aquí. -responde Avani.

Melody Fletcher  

Me acabo de vestir en el baño, ya que el secuestrador sigue en la habitación, desde que entré está tumbado en le cama leyendo, no me ha mirado, ni hablado, y eso es algo que agradezco. Me peino un poco y me miro al espejo. En qué momento pasó todo esto? Agacho la cabeza por unos instantes, al volver a mirar mi reflejo veo detrás de mí a ese chico. Me giro pero no está. Suspiro cerrando los ojos, de repente noto unas manos frías en mis hombros. Un escalofrío recorre mi espalda de arriba a abajo. El miedo se hace presente en mí. 

-La princesa tiene miedo? -escucho su voz grave en mi oreja, su aliento hace me cosquillas. Me giro y le veo de pie, rápidamente me alejo.

Intento salir del baño pero la puerta está cerrada con llave. -Por qué no bajaste ayer a cenar? -pregunta poniéndose detrás de mí. 

-No... Tenía hambre... -mi voz tiembla, tengo miedo. Aparto la mirada. 

-No mientas. No te voy a hacer nada, deja de temblar, pareces un ratón. -le vuelvo a mirar pero ya ya no está, en su sitio solo hay aire. 

-Quiero irme de aquí. -mis ojos se cristalizan, dejo que mi espalda se deslice por la puerta hasta llegar al suelo, me siento y me desahogo en silencio.

...

Abro los ojos poco a poco. Sigo en el baño, con la única diferencia de que ahora hay alguien a mi lado, ese chico, tengo la cabeza apoyada en su hombro, él sigue leyendo el mismo libro de antes. Me quedé dormida. Intento que él no se de cuenta que desperté, cuánto tiempo llevo dormida? Me habrá hecho algo? Y si... Mi corazón empieza a latir a toda prisa ante las preguntas que yo misma formulo.

-Deja de ponerte nerviosa, entre tus pensamientos y el latido de tu corazón no puedo concentrarme ratón. -me sorprendo ante sus palabras, cómo que mis pensamientos?

Me aparto de él sin llegar a levantarme, noto las lágrimas secas en mis mejillas. -Tienes hambre? -pregunta mirándome. Yo asiento levemente, veo como se levanta cerrando el libro, me extiende la mano, con temor la cojo, me levanto con su ayuda.

Salimos de la habitación hacia la cocina.

{ DEMONS } ºSaga ThronesºDonde viven las historias. Descúbrelo ahora