Dónde Sonic y Tails hacen una vida mundana terrícola en Green Hills luego de haber derrotado una vez más a Robotnik.
#HailSontails #SontailsWeStand #SontailsLaResistance (?)
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ーTranquilo, Tails, tranquilo...
ーEs que... ¡No entienden! ¡Ellos no me entienden!
ーShh, shh, tranquilo... Aquí estoy, contigo. Llora, está bien.
Quizás había sido un poco predecible, pero es que no tenía a dónde más ir. Terminó en casa de los Whipple otra vez. Pina lo consolaba en el sofá de la sala, mientras afuera llovía y la noche ya había caído.
Había entendido un tanto de lo que Tails quiso decirle. De hecho, ya tenía días que se desahogaba con ella, diciéndole todo lo que le molestaba de vivir con los Wachowski. Jamás se refería a ellos como malas personas, más bien como gente que simplemente no lo entendía a él.
A Pina le extrañaba. Pensó que de todos en el pueblo, por experiencia; los Wachowski eran los más aptos para cuidar de otro niño alienígena. Pero suponía que no todas las situaciones podían ser igual. Tails no era igual a Sonic, y Sonic no era igual a Tails.
No todo podía resultar igual. La vida era complicada.
ー¡Ya no quiero volver nunca más ahí! ーse aferraba el zorrito a la cintura de la mujer, llorando a moco tendido.
Pina acarició su cabeza.
ーPero Tails... Vives con ellos...
ー¡N-no me importa! ¡Prefiero vivir en una madriguera que en un lugar donde no me entienden y me tratan de huésped!
Pina sabía que el pequeño hablaba desde el impulso, como sería normal a su edad. Pero no por eso iba a minimizar sus sentimientos, nunca se debe hacer eso con un niño solo por la edad.
ーOye, Tails...
La mujer hizo una pausa, seguía acariciando el pelaje de su cabecita mientras su vista permanecía en la ventana ahora mojada por la lluvia. Estaba pensando seriamente lo que iba a decir.
El menor sorbió su nariz y subió la vista, para mirarla.
ー¿Si?
ーHe estado pensando en esto ya por un tiempo, pero... No, no lo sé. Olvídalo.
Sonrió nerviosa y negó con la cabeza. ¿Realmente estuvo a punto de decirlo?
Tails torció las cejas primero en molestia y luego con curiosidad y confusión. ¡Ahora necesitaba saberlo! ¡No podía dejarlo así!
ー¿Qué? ¿Qué cosa? ¡Dímelo!
El zorro la sacudió levemente de la chaqueta y la mujer rió un poco por eso.
ーEs que no sé, Tails... Es como si traicionara a mis amigos los Wachowski ーfrunció el ceño con ligereza, ni ella entendía muy bien su propio sentir.
ー¿Qué? ¡No pienses en ellos ahora! ¡Dime lo que me ibas a decir!
Tails estaba triste y desesperado. Actuando inmaduro quizá, pero es que era inmaduro.
