Capitulo II

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Dura y grande

Se acomodo mejor entré su asiento, acercando sus manos a ese erecto pene, tomándolo desde la basé, pasando su mojada lengua por el glande. Escuchó un gruñido escapar de los labios del rubio quién apretaba el volante entré sus manos.

Tony sonrío para después adentrar el falo a su boca. Chupaba con fervor, encajando sus dientes ligeramente, lamiendo provocativamente toda la longitud, con su lengua delineaba las venas que saltaban a la vista.

Steve miraba desde arriba, poniéndose cada vez más duró al ver cómo Tony devoraba su pene, subiendo y bajando la cabeza, dejando su saliva esparcida mientras que con la otra mano moldeaba sus testículos.

A Tony le encantaba sentir el pene ahogadandolo, el como este presionaba su garganta, jodiendose el interior de su boca.

Rogers miro de reojo por la ventanilla, notando que un auto se estacionaba de su lado solo que algo lejos de donde se encontraban. Por un momento creyó ver cómo este bajaba la ventana y miraba curioso los alrededores. Steve se removió inquieto, alejando rápidamente la mirada, queria decirle a Tony que parase pues los podían descubrir, pero al admirar un sonrojado Stark, con sus mejillas abultadas, disfrutando su dura y grande polla, con los ojos cerrados, devorando cada centímetro con una insasiable sed de placer.

Se estremeció aún más, causando que su pene aumentará de tamaño y fuese más dura, Tony jadeó por el repentino ensanchamiento, causando que su mandíbula comenzará a doler por obligar a su pequeña boca abrirse aun más.

Steve ya no podía aguantar las ganas de correrse en la caliente boca de su novio. Agarró con firmeza la cabeza de Tony y lo empujó rudamente hasta abajo, logrando que se metiera de lleno su pene. Comenzó a embestirlo tratando de no dejar escapar sus gemidos de placer puro. Tony se aferró a los muslos del rubio, sintiendo como golpeaban su garganta y como poco perdía el aire, se sofocaba, pero se sentía tan malditamente bien.

Steve ya no pudo contenerse más y dejo salir su semen a chorros, llenando toda su boca, el rubió no permitió que Tony se zafara hasta que tragase hasta la última gota.

El castaño no se rehusó, disfrutó cómo el semen se deslizaba por su garganta, si era un sabor un poco peculiar, pero no dudaría pará volversela a chupar a su novio. Retiro sus labios lentamente, se acomodo en el asiento del copiloto mientras que con su mano limpiaba los residuos y se metía los dedos a la boca para chuparlos.

Rogers se acomodo su miembro en su lugar de siempre, suspirando, pasando su mano por sus cabellos rubios y un poco agitado.

—Joder, eso estuvo...

—¿Bien?—. Pregunto un poco inseguro puesto que era su primera vez haciendo una felación y no sabía si lo había hecho correctamente.

—Mas que bien, fue grandioso, maravilloso, tu eres maravilloso—. Acercó su mano a la mejilla de Tony quién se frotó en está. Unio sus labios con los contrarios, besándolo lentamente.

—Creo que deberíamos ir a otro lugar más privado—. Tony susurró sobre sus labios.

Steve notó que el castaño se había puesto duro y eso hizo que se estremeciera.

—Quisiera probar otra vez tu pene, pero por otro lugar—. Pronunció sensualmente mientras una de sus manos viajaba al pecho del rubio.

Steve tragó en seco.

—¿y-y la película?—. Tartamudeo un poco nervioso, por la propuesta más que indecorosa, sentía que se iba a derretir por el intenso calor que le estaba recorriendo en todo su cuerpo.

—¡A la mierda con la película, Steve!—. Rodó los ojos. —Quiero que me folles está noche—

Y eso bastó para que Steve prendiera rápidamente el automóvil y dar marcha. Tony era consiente que Steve era muy precavido al conducir, pero ahora esa ida fue desechada al ver al rubio como loco en el volante, pisando el acelerador a fondo.

Tony para ese momento no sabe si fue buena idea provocar a Steve o ¿Tal vez si?.

🍯Honey

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