Tú serás mi princesa

Capítulo 3 Pase lo que pasé te encontraré

Se quedó petrificado después de escuchar los gritos de Marinette, a pesar de haber convivido juntos por poco tiempo se llegó a encariñar bastante con ambos y verla destruida de esa manera logró que algo dentro de el se rompiera, si bien ella era su amor platónico nunca imagino que verla así pudiera dolerle tanto,

Espero paciente todo el día pero Marinette no volvió, pasaron 3 días y su cama seguía vacía pero sus objetos personales aún permanecían en el cuarto, fue hasta la noche del tercer día que el ruido una bolsa de plástico lo desperto, allí estaba ella, se veía completamente apagada, el brillo de sus ojos había desparecido, en cambió las ojeras le robaban la atención a sus ojos azules.

-Perdón te desperté

-Marinette... cómo?... a donde?

-Ya me voy a casa Adrien,

Él notó la intención de la oración, había dicho me voy, ella sola...

-Marinette... Luka esta?

Marinette no dijo nada, tampoco sollozo, simplemente se limitó a guardar las cosas en la bolsa negra de manera monótona,

-Mari... si te prometo que me voy a curar y me voy a convertir en el Príncipe que deseas me esperaras? Me darás una oportunidad?

En el rostro de Marinette se pudo ver una chispa de su habitual brillo al recordar las palabras de Luka "¿le vas a negar un último deseo a un moribundo?", entonces una sutil sonrisa se dibujó en su rostro mientras se acercaba a Adrien, tomó sus mejillas entre sus manos y lo besó, fue un beso lleno de ternura y compacion para ella, pero para el fue la razón que necesitaba para vivir

-Entonces conviértete en un príncipe azul y ve a rescatarme Adrien Agreste

-Marinette, prometo que pasé lo que pasé te voy a encontrar!

Gritó mientras ella se alejaba en medio de la noche y sentía que su corazón se le oprimia ante la sola idea de no volverla a ver.

8 años después...

-Hugo! Estoy en casa!

El pequeño salió corriendo de la cocina con una galleta en la boca directo al encuentro con su madre, de inmediato tomó su bolso y lo colocó en el Buró de la entrada mientras Marinette se quitaba los zapatos para remplazarlos por unas pantuflas

-Estoy muerta de cansancio!

-No tienes que decirlo se ve en tu cara

-Que cenaste anoche?

-Pizza

-Otra vez Hugo? Quedamos en no más de una vez por semana!

-Quería preparar arroz con pollo pero se acabó el gas

-Tan pronto! Pero si lo acabó de meter!

-Ma, lo metiste hace 6 meses, he estado ahorrando con los baños de agua fría para que durará tanto

El pequeño le extendió la última factura del gas a su madre para que la revisara, mientras ella echaba un vistazo le dio la del teléfono también, en el rostro de Marinette un semblante cada vez más preocupado se fue dibujando

-Rayos! Es mucho...

-Es que subieron el costo del Internet... Ma, sabes, ya estoy lo suficientemente mayor para qudarme sólo en casa de día... y revisé las ofertas laborales, hay varias con las que cumples todos los campos!

-Hugo revisaste la edad que piden?

El pequeño bajo la mirada sintiéndose culpable

-Menores de 27... pero ma! Yo se que tu podrías con todo eso! Tienes mucho talento y no es justo que te descarten sólo por tu edad!