Elizabeth

Capítulo 4 "Los sospechosos"

Nos alejamos de aquel tumulto de gente, me sentía enojada y asustada por lo que sucedía.

- ¿No podemos hacer algo?¿Lo que sea?- Le pregunte esperanzada.

- Lo lamento pero no, es algo que esta fuera de nuestras manos, y aunque lo intentemos y encontremos al asesino... ¿Qué haríamos?

- Por Dios, esto me pone de los pelos ¡Necesito poder hacer algo!- Mi instinto, gracias a mis padres, me decía que si buscábamos alguna pista quizás podamos descubrir quién estaba detrás de esto. Iba tan enojada que al darme vuelta rápido no me di cuenta y golpee mi cabeza contra un poste, cayendo de culo al piso. Luke empezó a reírse tan fuerte que la gente a nuestro lado nos miraba raro, se sostenía la panza con las manos que le dolía de tanto reir. Hasta que se decidió ayudar a levantarme. Yo en el piso lo fulminé con la mirada y me hice la ofendida. Una vez arriba comencé a patear el poste gritándole...

- ¡Estúpido poste! ¡Estúpido poste!- Comencé a mirar hacia arriba y se instaló una sonrisa en mi cara, y empecé a abrazar al poste- ¡Hermoso poste!- Luke me miro un poco asustado con cara rara, por lo que le sonreí, levante una ceja, señalando con un dedo hacia arriba. Él vio lo que le mostraba, entendió a lo que me refería y también mostró una hermosa sonrisa.

Nos dirigimos al edificio general donde me inscribí hace unas horas. Allí Luke, que conocía a todos, le pidió a la recepcionista, una chica rubia platinado con flequillo recto, voz chillona, y mucho maquillaje, que si podía llamar a Bob de mantenimiento. Ella accedió y en unos pocos minutos, durante los cuales Luke seguía riendo por mi papelón y yo le hacía caras, llego el queridísimo Bob. Se saludaron hablaron tan bajo que no alcancé a escuchar lo que decían. Luke sacó de su bolsillo una barra de chocolate, se la dio a Bob, este nos miro y dijo..

- Vengan por aquí, síganme- Al terminar de decirlo lo seguimos.

Fuimos por un pequeño pasillo que estaba algo oscuro, Luke tomó mi mano y me hizo ir detrás de él. Se sintió tan bien, su mano estaba calentita, era suave y muy grande, en comparación con la mía. Al llegar al final del pasillo, Bob sacó un manojo de llaves, y buscaba una en particular. Cuando al fin encontró esa pequeña llave dorada, abrió la puerta que tenía un cartel que decía "Prohibido pasar. Solo personal autorizado. Seguridad".

Una vez dentro prendimos las luces. Luke se sentó en una silla que había frente a numerosas pantallas de televisión. Prendió una computadora y comenzó a buscar algunos archivos.

- Tiene que ser entre las 6 y las 9 de la mañana de hoy. Cuando llegue yo no vi a esa pobre chica- Le dije haciendo una mueca.

- Sí, estoy buscando eso, y... Aquí.... Esta!- Dijo apretando fuertemente la tecla enter.

Al hacerlo se abrió una pantalla en la que apareció un video. Se veía el parque donde estuvimos hoy y mas atrás el gran bosque, que por cierto aún no había ido para aquel lado.

- ¿Qué hay por allí en el bosque? Parece tenebroso.

- Hay a lo lejos un pequeño lago, algunos fogones para cocinar un asado, y mesas. No creo que venga de aquel lado. ¡Espera! Se ve... Una sombra, es una persona, ¡Que viene cargando otra en los hombros!

- Es Tanya, ¿Se puede hacer zoom?

- A ver, déjame intentarlo. Sí, ahí esta, no es lo mejor pero algo es algo. Está vestido como con un...

- ¡Overol!- Dijimos los dos a la vez entuciasmados.

- Bob ¿Quiénes usan overol para sus tareas en la universidad?- Le pregunté mirándolo mientras comía su barra de chocolate.

- Ehmm... Los de mantenimiento, las de limpieza, y mmm... Los jardineros.

- Bueno el asesino debe estar entre esas personas. Necesitamos hablar con ellos.

Salimos del cuarto de vigilancia, luego de agradecerle a Bob. Él quedaría descartado de nuestra lista ya que solo usa ese vestuario cuando lo llaman de la caldera, para que la repare. Aunque quedaba con unos puntos suspensivos, quien sabe, por si acaso.

- Muy bien cerebrito, si no te hubieras topado con ese poste nunca hubiéramos visto esa cámara de vigilancia, ni llegado a saber que se trataba de algún trabajador de la universidad.

- Ja Ja. Muy gracioso- Le conteste con un tono sarcástico- Estuve pensando que cualquier persona del campus podría haber robado un overol y haberlo usado para asesinar a Tanya.

- Bueno primero averigüemos si el personal de aquí tiene algo que ver, luego iremos por los demás.

- De acuerdo.

Luego de esto caminamos recorriendo el campus en busca de los trabajadores, hablamos con ellos, les hicimos preguntas, y todos parecían personas normales, ninguno nos hizo pensar en que sería un terrible asesino. Me sentía frustrada, no sabía como podríamos averiguar información sobre ellos ni sobre las demás personas.

- Vamos al buffet ya es hora de comer, podemos descansar un poco antes de seguir.

- De acuerdo, pero esta vez debes dejarme pagar.

- Lis, vamos déjame invitarte, no sabemos si luego el asesino quiera matarte a ti, y si lo hace no podré invitarte- Su estúpido comentario hizo que me riera soltando unas grandes carcajadas, el también se rió, y nos dirigimos al buffet.

Decidimos comer una deliciosa pizza, acompañado de una gaseosa. Al tener nuestro plato caminamos hacia el patio interno donde Luke me contó que pasaban el rato con sus amigos, ahí había mesas como me contó, donde podríamos comer disfrutando el lindo día. Cuando salimos vimos a una chica tirada en el piso con un disparo en la frente, Luke me agarro de la mano, lo que hizo que suelte el plato que llevaba y se rompa en mil pedazos. Pudimos ver una sombra que se escapaba por la puerta accesoria al patio. Luke no lo dudó y comenzó a perseguirlo. Y yo claro iba detrás de él.

Esa puerta iba por un pasillo medio escondido, en el que no había demasiadas luces. Luke corría desesperadamente, sabía que si lo alcanzaba se le tiraría encima y lo molería a golpes. Seguro que podría hacerlo, con ese cuerpo trabajado que tenía. ¡Por Dios Liz mira en que piensas en estas situaciones! Bueno. Llegamos a un lugar donde el pasillo se dividía.

- Luke ya déjalo, no podrás alcanzarlo, encima lleva un arma y no dudaría en dispararte.- Al decir esas palabras del camino de la derecha se escucho un ruido y se vio una luz. Cuando me di cuenta que era un disparo me abalancé sobre Luke lo que hizo que cayéramos al piso y quedemos a unos pocos centímetros. Nos quedamos unos segundos mirándonos hasta que reaccionó.

- Ehm creo que deberíamos...

- Sí, debemos volver- Le dije al levantarme y ayudarlo a que se levante también. Volvimos por el camino oscuro y cuando llegamos ya estaba la policía haciendo el perímetro de la zona. El cuerpo se encontraba en una bolsa negra que estaban cargando en una camilla.

Decidimos ir nuevamente por comida. Y esta vez nos sentamos al fondo de buffet. Comimos muy callados sobre lo que había pasado. Claro que después de tener que hablar con la policía para contarle lo sucedido y que no nos creyeran asesinos ninguno tenía muchas ganas de hablar. Hasta que se me ocurrió esa perfecta idea.

- ¡Claro! ¿¡Cómo no se me ocurrió antes!?- Grité pegando un salto de la silla.