75. 08/01/19. El Maestro y el Jardín

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Nia y Romi están en una parcela un jardín, de rosas  

Nia: Maestro en mi jardín han crecido hierbajos, no dejo nunca de cuidar y regar las rosas 

El maestro es un hombre que con una azada que remueve la tierra, viste una chilaba roida se le ve viejo y cansado

Maestro: Tienes que estar muy atenta las esporas, llegan por aire como la envidia

Nia: Ha noche, no  habían hierbajos 

Maestro: Cualquiera puede poner hierbajos en tu jardín, estáis preparados para cuidarlo  

Nia miro ha romi, que negó con la cabeza 

Nia: No, no estamos preparados, volvió donde romi 

Romi: Te fijaste en los ojos del maestro 

Nia: En sus ojos se puede, ver el mundo 

Pasado mucho tiempo no sabemos por que oh como, ambos volvimos al jardín del maestro 

Ambos : Maestro hola

El maestro seguía, con el azadón removiendo la tierra se irguió y le miramos, ni era tan viejo ni sus ropas eran girones 

Maestro: Venir os quiero enseñar una cosa

Ambos le seguimos nos llevo ha otra parcela, entramos el no entro los dos nos asombramos hierbas y hierbajos subían por las rosas asta el punto de ahogarlas superándolas en altura

Voz: No hay árbol que no tenga fruto no hay fruto que no tenga árbol, no todos los consejos son buenos, volvimos donde el maestros 

Maestro: Estáis preparados para cuidar el jardín

Nia miro ha romi, el asintió con la cabeza

Nia: Maestro estamos preparados si tu eres con nosotros

Maestro: Pues cuidar, buestro jardín 

Romi: Oh señor Jesus,  si tu eres con nosotros cuidaremos lo que nos mandes, si tu manos son nuestra ayuda que importa lo que culmine si nos guardas para ti, somos tus hijos directos 

Bendito Jesus, el Dios viviente que nos guarda con sus manos, por su amor inhumano y misericordia

Sueños de Nia 9Donde viven las historias. Descúbrelo ahora