I'm a Demond

#2

La clase había transcurrido rápidamente y esta chica me llevo sin mi voluntad hasta unas mesas en el jardín, llegamos a una de las mesas donde se encontraban una chica y dos chicos. La chica llamo mucho mi atención ya que usaba un parche en su ojo derecho.

-Hola chicos, ella es Alisson, es su primer día aquí y se me hizo muy agradable, ademas es bonita ¿no lo creen?- Me sonroje, oh no, oh no, piensa cosas tristes Alisson, imagine como seria si mi padre fuera atrapado por los cazadores de Dems, mi corazón se estrujo- Alisson ellos son Cassey, Kateh y la extravagante Leyla-

-¿Porque extravagante?- Pregunto la chica a Duran.

-Porque siempre que te veo encuentro una nueva cicatriz en tu cuerpo- No lo había notado, era cierto, la chica estaba llena de cicatrices por todo su cuerpo, pero a pesar de la cicatrices era muy hermosa, su cabello platinado hacia destacar su ojo negro a la vista.

-Hacer locuras no me hace extravagante, me hace vivir la vida al limite- La chica había dejado de ver a Duran para verme a mi- ¿Quieres saber que hay detrás de este parche?

-No puedo negarte que me intriga un poco, pero me muestres o no, me sera indiferente- Creo que fue una respuesta de lo mas fría y seca que pude dar, de esta manera quiero establecer que no quiero ningún lazo afectivo con nadie.

Solo me sonrió, e hizo su parche hacia arriba. En el se mostraba un ojo de cristal, como si fuera de muñeca.

-Me lanzaron un lápiz en este ojo a los 10 años, fue demasiado gracioso porque el lápiz era mio- Coloco nuevamente su parche en su lugar.

-Si bueno aquí todos tenemos cualidades que nos hace especiales, como puedes ver Leyla es la extrovertida, es capaz de hacer cualquier tipo de cosa. Kateh es el chico tranquilo, es muy bueno con la tecnología y por ultimo Cassey, le decimos el fuckboy, cambia mas rápido de chica que de canción-

-Y Duran, la chica linda pero fácil de manipular- Decía el chico de cabellos negros, Kateh.

-¿¡Disculpa!? yo no soy fácil de manipular-

-Duran, ¿podrías ir a la cafetería por una botella de agua para mi?, por favor- Le pedía Leyla con una sonrisa en la cara.

-¡Si claro!- Duran se dio media vuelta y camino sola hacia la cafetería. Sin darse cuenta que había caído en su propia trampa.

-Fácil de manipular pero muy tierna, le gusta hacer amigos por todas partes- Expreso Kateh mientras veía a la chica de cabellos rubios llegar a la cafetería- Pero bueno, cuéntanos de ti, ¿de donde vienes?-

-No tiene relevancia-

-¿Porque elegiste esta preparatoria?- Me pregunto Leyla.

-No me dieron la opción de escoger a donde estudiar, simplemente me metieron aquí-

-¿Qué tipo de música escuchas?- Me pregunto nuevamente Kateh.

-No es de tu incumbencia-

-¿Qué clases te asignaron?- y de nuevo Leyla. Respondía de la forma más cortante posible pero no hacia efecto en estos dos, seguían cuestionándome como si fuera un interrogatorio de una escena de crimen.

-¿Cómo porque te diría mis clases?- Note que el chico llamado Cassey solo se molestaba en mirarme. Y de una manera muy seria, me ponía algo nerviosa.

-¿Te gustan los videojuegos?- Lanzaba Kateh.

Las miradas de Cassey estaban poniéndome demasiado nerviosa. Sin mencionar que las peguntas de Leyla y Kateh no cesaban, en otras escuelas al dar esa clase de respuesta ya me mandaban al demonio, pero estos chicos continuaban una y otra vez. ¿Realmente les importaba conocerme? ¿En vedad podría tener amigos? Imaginar tener amigos mas allá que los de las redes, no, no puedo. Salí corriendo de aquel lugar hasta llegar al estacionamiento, me recargue en un auto y empece a llorar. No puedo tener amigos aunque quisiera, no puedo, apreté mis puños. Me deslice hasta el suelo donde me encogí y abrace mis piernas. 

¿Porque tuve que nacer si estaría sufriendo? No puedo ser normal, no puedo tener amigos, no puedo establecer una relación con un chico, no puedo ser yo misma.

-¿Estas bien?-

-Aléjate, Duran no soy alguien interesante- Escondí mi cara entre mis piernas.

-Todos somos interesantes-

-No lo entenderías- Realmente no lo haría.

-No pretendo entenderte, no se que sea lo que te ocurra, pero yo lo respetare-

-No soy alguien que haga amigos, tampoco me gusta hablar de mi, puedo llegar hacer muy cortante y tampoco me gusta que se preocupen por mi- 

-Bueno, no hay problema, prometo no hostigarte con preguntas y tampoco te haré preguntas personales- Su respuesta realmente me sorprendió.- Mis padres tampoco son personas cariñosas, pero son personas buenas, las personas como ellos son las mejores para confiar. Son transparentes, prefiero estar con alguien frió pero sincero que alguien empatico e hipócrita-

-Entonces, ¿No te molesta como soy?-

-Nop, estoy segura que llegaremos a ser grandes amigas- Me abrazo. Mi corazón empezaba a latir rápido, alguien que me aceptara a pesar de ser una gran perra.

-Tampoco me gustan los abrazos- Debía poner un alto antes de mostrar mi figura natural.

-¡Lo siento!- Se separo al instante.

La mire y le regale una corta sonrisa. Limpie mis lagrimas, Tal vez podría tener una amiga después de todo. No se cuanto tiempo ella pueda soportar mi comportamiento, pero espero que lo suficiente para crear lindos momentos. 

Después de ese raro y lindo momento, volvimos con los amigos de Duran. No lo niego, son agradables, Leyla y Kateh discutían por cualquier cosa, lo cual me daba gracia pero tenia que contenerme. En cambio el chico de cabellos dorados, Cassey, solo me observaba, en todo el tiempo. De hecho no había escuchado su voz en ningún momento desde que nos presentaron.  Era extraño y espeluznante a la vez pero decidí no tomar le importancia.

Claro, si hago amigos tendré que tenerlo en secreto. Mis padres no pueden enterarse, pensaran que no podre concentrarme y en cualquier momento enseñare mi forma de ser. Tengo que ser precavida. Pero ¿Esta bien tener amigos? si se enteraran que soy un Dem ¿Les daría miedo? ¿Puedo confiar en ellos? ¿Puedo ser verdaderamente Alisson? 

Estoy llena de miedo por todo lo que pueda pasar, pero a la vez, quiero ser feliz por dentro, aunque no pueda demostrarlo.