I'm a Demond

#3

Habían pasado aproximadamente dos semanas desde que entre a la Preparatoria, todo iba bien, creo que uno de los mejores momento que tuve en estas dos semanas fue conocer a Duran, eso y que el profesor Jefferson de la clase de filosofía, haya felicitado mi ensayo de "porque somos malos por naturaleza".

++FlashBack++

-Alisson, tengo que reconocer que tu ensayo fue esplendido. Lo hiciste  desde un enfoque que ninguno de tus compañeros hubiera realizado, es magnifico, ¿Te basaste en el relato del demonio de la clase pasada?-

-Algo así...- Me base en mi misma.

-"Realmente cuando nacemos, de la forma en que sea, siendo humanos o criaturas provenientes de seres malignos, somos nada, como una caja vacía que vamos llenando con el transcurso del tiempo. La maldad no nace con nosotros, la maldad se va tornando conforme las acciones van pasando, conforme vamos teniendo una consciencia, el saber que algo esta mal o prohibido y surge la necesidad de sobrepasarlo para sentirnos superiores"- Cito una de las partes de mi ensayo- "Podemos ser todos demonios vestidos de humanos, pero unos sienten mas la necesidad de realizar actos malvados, mientras que otros que no sentimos esa necesidad, tenemos que soportar los pecados de aquellos que si los cometen" Realmente estoy fascinado con tu ensayo-

-Gracias-

-Anteriormente, ¿En que escuela estabas?-

-The Liberty Shcool-

-Una muy buen colegio, de los mejores en mi opinión, ¿Porque te transfirieron a Smart School?-

-Ascendieron a mi padre en su trabajo, por lo cual tuvimos que mudarnos-

-Ya veo, Alisson ¿Has pensado unirte al taller de literatura?-

-No-

-Deberías de hacerlo, le mostrare tu ensayo al profesor Galel. Le dire que te considere, eres muy buena escribiendo-

-Muchas gracias- Por dentro intentaba reprimir mi sentimientos de alegría, creo que nunca antes me había costado tanto trabajo el  evitar emocionarme.

++Fin FlashBack++

-Me pregunto en que es lo que piensas cada vez que te quedas mirando hacia la nada- Decía Leyla mientras chasqueaba sus dedos frente a mi nariz. Resulta que compartía clase con ella en Biología, era mi compañera de laboratorio.

-Que te de igual-

-Seguro que piensas en como te esta dando duro alguien ¿Verdad?-

-¿¡Eh!?- Me empezaba a poner roja pero rápidamente olvide esa idea.

-Lo sabia- Se burlo

-Cerda- Le dije y rodé los ojos.

Compartía una clase con cada amigo de Duran, Biología con Leyla, Tecnología con Kateh e Historia con Cassey. Duran la veía en clase de matemáticas, si algo no entendía yo le ayudaba. Con respecto a Cassey, no era de muchas palabras y se sentaba en otra mesa distinta a la mía siempre, presiento que no le agrado, solo hemos intercambiado como tres palabras y siempre me intimidaba con su mirada. Sin necesidad de mirarlo puedo sentir sus ojos clavados en mi espalda.

Leyla y yo después de la clase de Biología fuimos al jardín a almorzar.

-Iremos al boliche después de que salga Duran de su clase ¿Vienes?- Me pregunto mientras pelaba su manzana con una navaja de bolsillo.

-No puedo, tengo planes- Realmente tenia planes, no era solo por lo de mis padres que no me permiten tener amigos. Debía acompañar a mi padre a su oficina, aveces le ayudaba como su secretaria en organizar unos bauchers de estados de cuentas. A cambio me pagaba, era justo, yo mostraba madurez y responsabilidad y el me pagaba como si en verdad fuera secretaria.

-Tu, te lo pierdes-

-Que tragedia, me perderé de la diversión por lanzar una bola de seis kilos para tumbar unos conos. Es una pena- Dije sin verla y revisar en mi celular las solicitudes de amistad de mi Facebook. Que irónico que mis padres me prohíben hacer amigos en persona, pero por redes sociales podía ser cualquiera, como si eso no fuera un peligro,  después de todo nadie puede ver mi forma de Dem a través de una pantalla. Al igual que yo no puedo ver la forma verdadera de las personas con las que hablo.

-¿Donde esta el estúpido de Kateh?- Leyla le marcaba una y otra vez a su celular pero este no contestaba.

-Déjalo respirar aunque sea un minuto- Saco uno de mis libros de mi mochila "El viejo y el mar". Una gran novela que amo leer una y otra vez.

-Lo dejare respirar por ahora, pero deja que lo vea y meteré su cabeza en el retrete. ¿Porque carajos tienen un celular si no contestan las llamadas?-

-Tal vez contesta las de cualquiera menos las tuyas- Dijo Cassey, acababa de llegar de su clase.

Mi celular había vibrado, era un mensaje de mi papá. Llegaba en 5 minutos por mi. No me había permitido ni leer una pagina de mi libro por lo cual tuve que guardarlo nuevamente. 

-Me tengo que ir, los veré mañana, diviértanse en los bolos-

-Te acompaño- Soltó Cassey, en verdad se me hizo muy raro por lo cual solo lo mire.

-No te lo pedí, así que no es necesario-

-Y yo no te pregunte, dije claramente "Te acompaño"-

-Incomodo...- Susurro Leyla.

Decidí en vez de pelear con el, ignorarlo e irme. Este me empezó a seguir, a lo cual apresure mi paso para llegar a la entrada. Este pisaba mis tobillos y una vez que llegue a la entrada vi el Mercedez de mi papá, pensé que Cassey se daría media vuelta y se iría, pero no fue así, me siguió hasta que me subí al carro.

-Nos vemos Alisson- Dijo y se marcho, no sin antes ver a mi papá y sonreirle.

Mi padre prendió el carro y no me dirigió la mirada. Sentía venir los problemas.

-¿Quién era él?- pregunto mi padre sin despegar los ojos de la carretera.

-No es nadie-

-Alisson-

-Es solo un compañero, me acompaño, eso fue todo-

-Sabes perfectamente que tu..-

-"Tu no puedes tener amigos humanos" lose papá, no es un amigo y nunca lo será- Lo interrumpí haciendo que me viera brevemente.

-No quiero verte cerca de ese chico de nuevo, ¿Entendido?-

-Más claro que el agua-

El camino a su trabajo fue algo silencioso y la tensión se sentía en el aire. Al llegar al edificio, estaciono el carro, se bajo el primero y después abrió mi puerta. Lo seguí en silencio. Mi padre puede ser el más tierno del mundo, pero cuando algo no le parece, me castiga con su silencio.