Like Rabbits And Dogs [JiKook]

🐰Cap: 10🐶

Su cola se movía de un lado para otro, su cabeza la inclino hacia aun lado mientras se mantenía viendo al castaño frente a él fijamente, cansado de estar sentado decidió acostarse, dejó caer la mitad de su cuerpo al piso y su cabeza la coloco entre sus patas delanteras aún si quitar la vista de su precioso castaño que de mantenía durmiendo plácidamente y profundamente. Tal vez para muchos era algo totalmente extraño estar viendo a una persona mientras duerme, pues este no es el caso de JiMin ya que si fuera por el se quedaría viendo toda una eternidad la tierna carita de conejo durmiendo, se vía tan lindo que provoca tan solo comerlo a besos y decirle lo mucho que lo quería pero como sabe que recibirá una patada en su hocico mejor es mejor prevenir que lamentar

-Es muy lindo ¿No?-dijo el pelimorado estando en unos de los sillones individuales y el cual miraba aquella escena

JiMin tan solo respondió con un pequeño ladrido, no tal alto como para despertar a JungKook. Sus ojos azules oscuro miraban todo el rostro de su hermoso conejito, cada detalle, cada lunar que podía ver en su precioso rostro, aún se preguntaba cómo es que ese conejo tan gruñón logro enamorarlo en tan poco tiempo, esperaba que en algún futuro JungKook dejara de tratarlo tan mal y se dejará dar besitos por el e hijos, sabía que era muy apresurado pero esa lo que más deseaba con su corazón

-Es demasiado hermoso, me lo quiero comer-Siguió hablando el pelimorado a la vez que se relamía los labios

Un gruñido furioso por las palabras dichas de NamJoon, nadie más que el podía comerse a su conejito

-Le llegas a tocar un solo pelo a MI hermoso cachorro y te hago sopa de lagartija-ladro en dirección al morado, quien sin inmutarse se alzó de hombros y se fue en busca de comida en el refrigerador

JiMin al verlo irse, dirigió otra vez su vista a JungKook, encontrándose así a tan solo una bolita de pelos blancos acurrucado entre un montón de ropa negra. JungKook en su forma de conejo siempre sería la cosa más bonito que los perrunos ojos de JiMin alguna vez haya visto en su vida

Con cuidado de no despertar a su tierno conejito, salto hacia el sofá y con la mayor delicadeza que pudo se acostó detrás del más pequeño colocando su cabeza aún lado de la del menor, le dio un pequeño empujón a la cabecita del castaño haciendo que este se moviera ligeramente y sin hacer más nada se dedicó a dormir junto a JungKook sin importarle una mierda que después de eso el castaño le diera un golpe así que se encargaría de disfrutar con todas su fuerzas el pequeño momento que tenía con su bebé precioso

—Ains miralos, son tan lindos juntos—hablo YoonGi quien estaba entre los brazos del peliazul como koala aferrado a un árbol

TaeHyung tan solo hizo un afirmación de estar de acuerdo con lo que dijo el rubio mientras acercaba su nariz a la de YoonGi para darle un beso esquimal y seguir su camino el cual era el segundo piso y encerrarse en su cuarto para estar en su nido de amor sin que nadie lo interrumpiera. Desde hace días aquel ha estado así de cariñoso, a su alrededor de ellos saltaban corazoncitos y muchos arcoiris, algo un poco inusual, ya sabian de más que tanto YoonGi y TaeHyung tenían una relación como amantes y todo, pero el que lo demostraran así  frente a todos era muy raro, además de eso se le juntaba que el olor de YoonGi había aumentado estos últimos días, tan solo esperaban que no sea lo que todos están pasando, ya que teniendo tres alfas en la casa se armaría tremenda guerra

Estando a punto de caer en su quinto sueño, JiMin pudo sentir como algo se interponían entre el suave cuerpecito de JungKook y el, soltando un gruñido en lo bajo por tal intromisión, abrió sus ojos para ver aquella cosa azulada metiéndose entre su bebé y el. con la furia llenando cada partícula de su ser, un gruñido brotó de pequeño, sus ojos azules mataban al reptil que se encontraba enrollado en su esponjoso conejito blanco y sin poder evitarlo empezó a gritar, nadie toca lo que es suyo y menos si eso era JungKook

—¡MALDITA LAGARTIJA AZULADA!—grito JiMin con fuego lanzando desde sus ojos

NamJoon asustado por el grito que había lanzado JiMin se levantó sobresaltado y igual que el JungKook también se despertó asustado, sin saber que pasaba a su alrededor empezó a mirar por todas partes encontrándose así con el perro que miraba de forma amenazadora al reptil azul que estaba enrollado en su espalda

—¿NamJoonie?—y con ese apodo, el cual desde hace semanas lo tenía hasta la coronilla, se abalanzó hacia el híbrido serpiente que en modo de defensa siseo y le mostró los dos colmillos que sobresalían

NamJoon ni lo se dejaría intimidar lo un estúpido perro de tercera clase, si tenía que atacar atacaría sin importarle nada, de todos modos le está retando a un pelea (o eso creía él). JiMin viendo como mostraba aquellos filosos colmillos los cuales parecían navajas brillantes, decidió retroceder con la cola metida entre las piernas. Patético, si lo sabía y su animal le estaba reclamando por tal acción, se supone que es un Alfa, debe pelear, defender lo suyo, eso es lo que decía su perro quien trataba de empujarlo para que peleará con NamJoon pero el pelirosa se negaba rotundamente, no estaba tan loco para que un serpiente le muerda y muera por su culpa, no señor

—¡¿Que carajos te pasa a ti?!—exclamo NamJoon ya más calmado

—¡Lo que me pasa es que este tocando lo mío! ¡Aléjate de JungKook es mío! ¡Yo e estado aquí seis meses tu aquí una semana!—ladro y gruño en cada palabra que expresaba hacia el pelimorado

—¡Yo no soy de nadie, mierda! ¡Cuantas veces se lo debo de decir!—grito más que molesto el menor quien se convirtió en humano nuevamente

JiMin viendo la expresión tan sombría del castaño bajo la cabeza y metió más su cola entre sus patas, claro si es que eso era posible, se sentía tan pequeño ante la mirada del menor, no quería que lo viera de esa, como de en verdad lo fuera a matar, su conejito no debía tener ese celo fruncido entre su cejas, no claro que no

—Lo siento—se disculpo con un sonido lastimero y se acercó poco a poco al menor, para colocar su cabeza en el regazo de este y alzar su mirada y mirarlos con los ojitos de gato con botas

El interior del menor se hizo un huracán enorme por los ojos azulados que lo miraban con mucho arrepentimiento. Aparentando sus dientes por todo aquello que se estaba acumulando poco a poco en su interior, con un refunfuñó quito al pelirosa de su regazo y se levantó con fuego quemando en su interior por todo los que le estaba pasando con respecto al perro

—Ire a mi habitación y ni se les ocurra entrar por le parto la cara—dice estando al pie de la escalera y mira a los dos chicos que estaban en el sofá con dagas inviable saliendo de sus ojos, para luego darse la vuelta y empezar a subir—Carajo antes podía dormir tranquilamente en esta casa ahora tengo un montón de putos interrumpiendo mi madriguera, debo hablar seriamente con la negra aquella

Perdiéndose por las escaleras JungKook no se había dado cuenta o no le tomó tanta importancia el que NamJoon le estuviera viendo más de lo que debería, cosa que no paso desapercibido por cierto híbrido quien con casi espuma brotando de sus dientes, volvió a su forma humana para lanzarles amenazas a aquella serpiente que le quería robar a su preciado bebé

—No quiero que lo vuelvas ver, a tocar o siquiera a hablar con MI JungKook, por de ser así te cortaré, te triturare y te comeré si le llegas a tocar aunque sea su pelaje—gruño antes de irse y dejar al pelimorado petrificado por las palabras que expulsó

Saliendo de su ensoñación, después de que proceso todas aquellas palabras que había lanzando el pelirosa, una sonrisa ladina se había formado en sus labios. NamJoon nunca se le había pasado por su cabeza el estar con conejito además de una amistad, no buscaba ni siquiera un polvo con el ya que el castaño no era su tipo de persona también está la otra cosa que le gustaba más afeminados, pero eso no significa que no podía ver su trasero, debía admitir que JungKook se traía una hermosa cintura que pedía a gritos ser sujetada por unas manos y un culo demasiado hermoso para azotar, pero no, NamJoon no están interesado en el, es muy pequeño, a él le gusta maduros y mayores, no cascarrabias y mimados

Así que cuando el pelirosa le dijo aquellas palabras, no le importo ni una mínima posibilidad de quemarse con el fuego, pues que decirles, le gusta lo peligroso, ver el mundo arder pero no arder en el, así era NamJoon

—Si que me la voy a pasar bien en este nuevo lugar

Dentro de poco público otro cap