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Casi nunca pienso bien, solo imagino cómo podría ser.

Mi mente nunca me obedece, vuela por los cielos siempre, no logro concentrarme, mi mente desfallece cuando intento pensar.

Nunca logro finalizar mis proyectos, me quedo sin ideas y sin propuestas, he intentado muchas cosas para poder volver a pensar con claridad.

Pero no logro hallar la manera de volver a pisar la tierra.

No puedo pensar por mi mismo, mi mente no me va a ayudar, ya que ella solo me hace disvariar.

Y  a pesar de todo, de verdad me sorprende lo mucho que mi mente puede viajar, cuando estoy en los cielos puedo ver a lo lejos mis más grandes sueños, me sorprendo tanto con lo que mi imaginación puede lograr, puede pasar solo un minuto, pero cuando estoy en mi mundo logro materializar lo más recóndito que puedas pensar, en tan solo un minutoen el lindo real miente puede lograr alcanzar mi sueño más fugaz.

En mi mundo pasan los días, semanas, meses y años mientras que me dejó llevar por lo que mi mente me dicta imaginar, y pueden pasar miles de cosas en el trayecto, cosas que seguramente jamás llegarías a pensar que puedes lograr.

Y aún así, mi mente llega hasta ese tan alto lugar cuando en elundo real no han pasado ni dos minutos.
Esa es la mayor razón por la que quedó sorprendido, anonadado de lo alto que puedo llegar.

Y también es la mayor razón por la cual tengo mucho miedo de dejarme llevar, porque no sé que tan lejos pueda mi mente llegar, ¿Y si nunca puedo regresar? ¿Y lo que veo me deja sin aliento? ¿Y si lo que veo es un futuro dónde ya no está mi tan valorado tesoro?

¿Que pasaría conmigo si me dejó llevar hasta ese punto?

Simple, ya mi personalidad no podría regresar, se quedaría atrapada en ese lugar viendo cómo mi cuerpo prácticamente sin alma puede caminar y darle la espalda mientras vuelve a éste lugar.

Pero siendo un cuerpo inospito y sin sentimientos, sin razón para seguir existiendo.

Y tan solo pensar en eso me desvela, cada noche en vela se que valdrá la pena, porque aunque tenga miedo voy a seguir buscando esa manera.

Esa manera de lograr por fin miente alcanzar y volver juntos al lugar dónde debemos estar.

En nuestro hogar.

Y así juntos poder avanzar sin ninguna atadura, avanzar sin parar hasta ya no dejar piedra sin levantar, trabajando juntos para lograr cada uno de nuestros sueños...

Marcel.

Esclavo de mi menteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora