Vanitas, ¡¿un héroe?!

Capítulo IV

Tal y como les dijo el rubio esquelético, al día siguiente fueron al lugar donde Izuku haría su entrenamiento. Al llegar se encontraron una playa llena de chatarra hasta donde alcanza la vista.

El héroe herido llegó unos diez minutos después y le explicó a Izuku que debía recoger toda esa basura hasta dentro de diez meses, que era cuando se realizaría el examen de ingreso a la UA.

- All Might, ¿por qué no me hereda su quirk ahora?- le preguntó.

- Si te lo diese ahora mismo, tu cuerpo se destrozaría por culpa de la gran cantidad de poder que tiene- le explicó.

Y así, el peliverde temiendo por su vida, empezó a entrenar.

Timeskip de 10 meses

Si alguien le pregunta a Midoriya Izuku sobre su entrenamiento, nadie se creería lo que pasó. Tuvo que recoger chatarra por seis meses. Vanitas también estaba allí y le ayudó en esa tarea. Pero cuando recibió el one for all (ofa), lo probó dando un puñetazo a un montón de chatarra. La rompió en mil pedazos a cambio de que su brazo se rompiera y se pusiera morado y sangrara. Tuvo suerte de que el pelinegro supiera el hechizo cura, porque si no a ver quién le explica a su madre como se lo había roto y que quedara en ese estado.

Ahora con la playa limpia, lo que hacían era pelear entre ellos. Esto le permitió a Vanitas a recuperar viejas habilidades como aprender nuevas habilidades mientras que el peliverde practicaba sin su quirk.

Y así, los tres meses que quedaban se les pasó y era el día del examen.

Un momento, escritora. ¿Solo pasó eso, recoger chatarra y entrenar? ¿Nada más?

- Ah. Sobre eso digamos Izuku ahora si se sabe el dicho "las apariencias engañan".

¿Solo eso?

- Sí y a tenerle miedo a los nescientes y a Vanitas cuando se pone serio.

¿Y no nos puedes decir algún detalle más?

- ¿Por qué parece un interrogatorio?- pregunté con una mirada seria.

M-mejor prosigamos.

Llendo de camino al examen iban hablando de un tema en específico.

- En serio, aún no me creo que lo hicieras- dijo el pelinegro recordando el día en que a Izuku recibió el afo-. ¿A que sabía?

- Pues sabía a laca. Creo que comérmelo le quitó lo épico.

- Ya, pero la cara que pusiste cuando lo tuviste que hacer fue buenísima- reía-. Tenía que haberte sacado una foto.

Llegaron a la entrada y entraron. Bueno, Vanitas entró. El peliverde se tropezó y casi se golpea contra el suelo sino fuera por una chica cuyo peinado castaño, según Vanitas, recordaba a la forma de una seta.

- Disculpa por haber usado mi quirk en tí- habló la chica- pero creo que sería mala suerte si te caes el día del examen- el peliverde estaba estático pues nunca había hablado con mujeres a parte de su madre-. Bueno, adiós y suerte.

Después de eso y de un pelinegro que se reía por el pobre de ojos verdes porque era su primera vez que hablaba con una chica, rectifico, que una chica le hablaba, entraron al enorme edificio, haciendo que se preguntara el de ojos dorados cuanto se gastaron para la construcción.

A la hora del examen teórico, a Izuku no le costó mucho mientras que a Vanitas le costó pero estaba seguro de que lo había aprobado.

Para recibir las instrucciones sobre el práctico estaban en un enorme auditorio.