Unos segundos más tarde sentí un peso en mi hombro hecho por un empujón de una persona. No me había dado cuenta que en el ascensor ingreso otra persona aparte de mi, tal vez de tanto pensar se me nublo la vista y no lo, o la logre ver.
- ¿Bajas acá? - Escuche que me preguntó .
Su voz era algo ronca pero no tanto como para distinguir que no era una mujer. Me recordó a alguien de mi adolescencia. ¿Se acuerdan qué dije que tenia una ex mejor amiga? bueno, exactamente me recordaba a ella, lo cual saque de mis pensamientos el que podría ser ella, ya que según me dijo en su momento, tenia planeado viajar a los estados unidos y estudiar lo que desea allí.
Durante esa época mi meta también era la misma pero debido a lo sucedido no lo pude cumplir.
De igual manera no era mi "GRAN SUEÑO" de hecho yo solo accedí a ir con ella, porque me insistió y nuestro lazo de amistad era bastante fuerte que digamos, o al menos para mi.
- De acuerdo, voy a bajar primera- Volvió a hablar.
Nuevamente me había sumergido en mis pensamientos. Ella se encontraba atrás mio, y era algo lógico que dijera lo que dijo porque le cerraba el paso.
- Si si, perdón, pasa - Formule sin quitar mi vista del frente moviéndome hacia un costado.
Luego solo escuche una risita, no logre descifrarla pero parecía burlona.
El piso en el que estaba era el tercero, de modo que me faltaba solo un piso para llegar a mi destino.
La joven salio del ascensor, de pronto su cabellera pelirroja llamo mi atención y no podía creer que fuera la persona que menos espere que lo fuera.
- ¿Vos? - Dije boquiabierta.
Como mencione anteriormente, no podía creer, mas me negaba a creerlo.
La chica pelirroja dio media vuelta a fuera del ascensor y miro hacia donde me encontraba yo, su cara radiaba serenidad pura como lo recordaba, tenia pecas que la hacian ver demasiado bella, con rizos lo cual le daba un toque mas juvenil.
Me regalo una sonrisa el cual devolví e hizo movimientos con su mano en forma de saludo.
- También te extrañe - Escuche antes de que se cerraran las puertas del ascensor.
Estaba tan sorprendida.
Mi corazón latió a mil por minutos, o menos, por segundos, es muy loco esto.
Si antes estaba un poquitito nerviosa no se dan una idea de lo que estoy ahora, sinceramente estoy considerando volver a mi casa sin intentar hacer la entrevista.
Pero me puse a pensar.. y no, no quiero que mi padre se decepcione de mi, o sea, no mas decepciones para el.
No querría ver su cara al decirle que ni siquiera lo intente, el siempre me enseño que debía intentar siempre que podía, sin rendirme.
¿Le gustará saber que no intente obtener el puesto de trabajo? Lo dudo.
¿Y saber que me rendí a dos pasos de llegar a la entrevista literalmente? Lo dudo el doble.
Unos minutos después se volvieron a abrir las puertas del ascensor, di un gran suspiro y salí de ella.
Me dirigí a la oficina en donde me harían la respectiva entrevista, en realidad.. tendría que esperar afuera de esta, me parece de muy mala educación avisar que llegue a esta hora.
Una y nueve de la tarde.
Al llegar al lugar vi a dos chicos de mi edad, supongo, sentados en las sillas que yacían enfrente de la oficina. Parecían aterrados, por como les temblaba el labio mientras estudiaba lo que diría uno, y las manos al otro chico.
Me acerque al que más de dio confianza, y pregunte si este era el lugar donde debería esperar a la entrevista. Me respondió que si, y que ya había empezado.
- Hay una persona que esta a dentro- Dijo.
Me decepciono a mi misma escuchar eso, yo quería ser la primera que hiciera la entrevista.
- oh, y.. ¿no sabes a que hora empezó la entrevista?- Pregunte curiosa.
Si iba a esperar al menos quería saber cuanto duraría el estar allí dentro.
- Hace dos minutos solamente- Respondió.
No puede ser, pensé.
La persona que hubiera estado allí dentro podía ser yo.
Sentí enojo en el momento pero recordé que no seria bueno ya que la mayoría de veces que siento enojo no se me da el poder hablar.
Tranquilizándome me senté en una de las bancas que quedaba libre.
Empece a hojear algunas hojas del portafolio y como era de esperarse no necesitaba demasiado que repasar, tengo muy buena memoria, por algo me recibí tan joven.
Espere unos minutos y saque de mi bolso la botella de agua que me ofreció el taxista. Bebí completamente sin dejar una gota en esta sintiéndome mas fresca.
Pasaron diez minutos más, y todavía no salia la persona. Supongo que es así..
Dije tratando de no despertar mi impaciencia.
Luego de un par de minutos la puerta de la oficina se abrió..
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No cometas el mismo error |✔
RandomCailin Cullen, una chica que va en dirección a su primer entrevista de trabajo, parecía de lo más tranquila. Ansiosa de ser admitida no sabe lo que descubrirá sobre su vida al obtener un trabajo peculiar. ¿Habrá sido todo una mentira? ¿Las personas...