Tus orbes cafeínas obtienen mi atención cada vez que nos encontramos, mi cordura amenaza con ser expandida por tus facciones delicadas y aspecto dominante, la necesidad de tenerte a mi lado inunda mis emociones provocando que un sentimiento en mi se...
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La relación de Bakugou y Uraraka causaba estragos y conmociones a quien le llegase el tema a los oídos. La mayoría de los candidatos a héroes se mantenían al tanto de la situación, la sorpresa se asomaba antes sus ojos por tratar de asimilar el relajado semblante Y para nada intimidante que mantenía el rubio con la castaña, si bien este solo se comportaba de esa forma cuando ella estaba cerca, era imposible de admitir que dos personas con personalidades totalmente contrariadas pudieran actuar tan naturalmente.
Él , tan mesquino, grotesco, egoístas y brusco.
Ella, tan dulce, amable, risueña y encantadora.
Por suerte Uraraka siempre era quien tomaba las riendas de la situación cuando Katsuki amenazaba con cabrearse y tirar todo a la mierda, por las constantes burlas de sus amigos. Algunos creian que incluso siemplemente era un absurdo rumor y un chiste barato, a excepción de Monoma quien creía que solo era otro truco para captar la atención de los demás y crear un alboroto para ser más reconocidos en su clase, por ser la primera pareja oficial, Ellos no exhibían su relación a los cuatro vientos pero tampoco era como si lo ocultansen, a ninguno le gustaba ser el centro de los constante comentarios y menos si los demás trataban de perturbarlos con preguntas, aunque ya era así.
Sus compañeros de clases eran conscientes del afecto discreto que ellos se proporcionaban con solo su mera presencia y lo felices que eran juntos, a su manera.
-¡Uraraka! Ya llegue~.. - alzaba la voz la pelirosada, juguetonamente mientras rodeaba a la pequeña Ochako por los hombros, provocando un espasmo-.
Ochako y Mina se habia vuelto más cercanas al comenzar su relación con Bakugou, La chica de piel rosada, tenía mucha admiración hacia Ochako pues no hayaba motivo alguno para que una chica tan dulce se interesara por una bestia como lo era Katsuki que no tenía nada de bueno, ni una pizca de humildad en esa mentalidad tan cerrada y retorcida, pero como ella solía decir cuando se encontraba con parejas para nada compatibles, para gustos siempre estarán los colores.
-¡Traje todo lo necesario para tu primera cita con Bakugou!-
La chica de cabellos cortos y rosados, parecía más emocionada que la mismisma Ochako y como no, la pobre no pudo pegar un ojo toda la noche por los nervios, consecuencia que había causado que debajo de sus ojos quedarán unas ojeras levemente notables, dándole un aspecto de cansancio.
Sacudió su cabeza para acabar con todo rastro de pereza y alzó los hombros para tratar de animarse y darse aliento.
Mina la observo con duda y rápidamente se acomodo en la cama de la Uravity.
-Te ves fatal, cariño mira esas ojeras- acarico el rostro de la contraria, para luego alzarse animadamente- ¡Tranquila, Deja todas las preocupaciones para mí, te verás hermosisima, más, de lo que ya eres!-.
