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Al terminar de decorar el pastel lo llevé hasta el refrigerador y me saqué el mandil de corazones, si Jeon Jungkook iba aprobar el pastel, tenía que ser el pastel más delicioso de todos. Habían pasado unas cuantas horas desde que estuvo en mi casa y aún podía sentir su olor y presencia, me siento tan feliz que podría... no sé que podría hacer pero seguramente sería algo bueno para todo el mundo.

— ¿Viste eso Canelo? ¿Realmente pasó o es solo mi imaginación? —hablé cargando a canelo y simulando bailar con él girando en mi sala— ¿Acaso eres tú mi imán de la suerte? Dios, no sabes lo mucho que deseé hablar con él. ¿Está bien Canelo? —susurré— ¿Está bien hablar con alguien que he espiado por año y medio?

Dejé a Canelo en el piso y lleve mi cabello hacia atrás con ambas manos. Fui hasta mi mesita junto a la ventana y tomé el puño de fotos regadas en ella. Jungkook comiendo, jugando, leyendo, sin camisa, vistiéndose, estirándose, mirando la TV, en su celular, durmiendo. De ninguna manera me desharía de ellas, nunca, ni en mil años. Las tomé y llevé hasta mi habitación. Una vez en mi cuarto saqué una caja mediana debajo de mi cama, era mi tesoro, está llena de fotos de Jungkook, desde la primera hasta la última, estaba casi a rebosar de fotos, pero ¿cómo dejar ir cualquier oportunidad de sacarle una foto? cada día era distinto para conseguir nuevas fotografías y yo adoraba cada una de ellas como un tesoro. También tenía algunas cosas que lograba conseguir cuando lo seguía en público, un pañuelo, un lapicero, una pulsera de tela, una botella y una dona de pelo. Sí, Jungkook a veces se arma preciosas colitas de pelo.

Debería de guardar mejor estas fotos, es una estupidez tenerlas allá afuera, con cualquier visita inesperada podría llegar a la prisión. Después de admirar por un tiempo todas las fotos, las guardé y metí debajo de la cama de nuevo. Mi corazón aún latía algo fuerte, ¿como no podría hacerlo? Había estado tan cerca de él, lo había olido, escuchado, incluso mantuvimos una conversación. Estaba completamente en las nubes. De regreso a mi sala pensé en que otra cosa podría ser peligrosa para mí si alguien entraba... Bueno no había nada que realmente me pudiera enculpar, excepto aquellas fotos pero ahora no había peligro alguno.

Me acerqué a la ventana para ver que hacía Jungkook ahora que ya había oscurecido, apenas recorrí mi cortina mi vista chocó con la mirada de Jeon, quien cerraba su ventana con sus ojos en mi dirección. Mis cejas se alzaron sorprendidas y mi corazón saltó, pretendí abrir mis cortinas para que no pareciera extraño el que estuviese viendo por la ventana. Una vez que terminé de abrir mis cortinas y cerrar mi ventana, devolví mi vista a él su rostro me regaló una sonrisa. Oh mi dios, realmente podría morir ahora mismo. Le devolví la sonrisa sintiendo mis mejillas enrojecer y regresé dentro, no sería normal mantenerme ahí por mucho tiempo. ¿Por qué estaba en la ventana? ¿Jungkook quería verme? ¿Estaba interesado en mí..? Oh vamos, tengo que dejar estos estúpidos pensamientos ilusos. No debería darle importancia a cosas tan burdas como un saludo o una sonrisa... Pero ¿Por qué vino a pedirme azúcar a mí? Bah, solo quiere un amigo, soy un imbécil.

Igual le llevaría pastel mañana, no podría incumplir algo que le dije a él, sólo no sería hoy porque... ya es tarde. Todos los amigos normales se llevan comida, no es algo anormal, está todo perfecto y él no sospecha nada, no podría haber visto las fotos y si así fuera no creo que se hubiera quedado callado, ni que me hubiese sonreído hace unos pocos minutos. Nadie le sonríe a alguien que le toma fotos sin su consentimiento.

Pero antes de darle pastel, tenía que probarlo yo, no le podía dar algo mal hecho o con mal sabor, sería lo peor que podría hacer. Caminé hasta mi cocina y saqué el pastel, normalmente veía una película en mi cama durante la noche antes de dormir cuando horneaba pastel, así lo disfrutaba más. Puse el pastel en mi mesa y tomé un cuchillo, partí un gran pedazo y lo llevé a mi plato para después lamer el cubierto y mis dedos manchados de chocolate, tenía que probar el relleno, era delicioso, como siempre a decir verdad soy un grandioso repostero. Guardé de nuevo el pastel en mi refrigerador y caminé hasta mi cuarto con la rebanada en mano.

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⏰ Última actualización: Jul 05, 2020 ⏰

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He's Perfect || KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora