Capítulo cuatro.

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La mañana de hoy fue completamente igual. Camino a la escuela me topé con Dahyun, así que decidimos caminar juntas hasta la escuela. O eso planeábamos, hasta que Momo se nos unió y todo se volvió muy incómodo. No sabía que problema tenían estas dos pero tampoco quería saberlo.

Nos pusimos a hablar sobre Hockey, Momo y yo, Dahyun parecía estar confundida pero igualmente dio una opinión sobre cambiar las posiciones del equipo, mala idea.

—No opines, porras.—Creo que fue un poco dura con ella. Dahyun es tan dulce y Momo es tan... ruda.

—Perdona, solo quería unirme a su...—Y Momo la cortó. Esto era realmente incómodo para mi.

—No sabes sobre lo que hablamos, preocúpate de tus pompones.—Dahyun no dijo nada más y tan solo se adelantó a nosotras.

—Creó que fuiste un poco dura con ella.

—¡Bah! Todas son pesadas.—Una mueca de molestia apareció en su rostro.

—Ella es diferente.—Hablé defendiendo a Dahyun, ¡esa chica es realmente dulce y tierna!

—Hoy tenemos entrenamiento, no lo olvides.—Cambio de tema cuando llegamos a la escuela.

Fuimos a nuestra aula y nos sentamos en nuestros bancos, ya que llegamos puntuales a la clase.

Transcurrida la clase de Química, fui a dejar algo a mi casillero. Momo me tocó el hombro y me avisó que iría al baño.

Solo teníamos una sola clase antes de el entrenamiento de Hockey. Momo no parecía venir pronto, así que me adelante y fui al salón.

Se me olvidó por completo que tenía que ir al gimnasio para la clase de Educación Física, por poco pensé que me tocaba Física, creí ver que decía "Física" en mi horario. Fui rápidamente hacia el Gimnasio para poder estar antes que todos allí.

Llegue y vi como las porristas aún no terminaban su entrenamiento. ¡Tonterías! Ni siquiera estaban entrenando. Me acerqué por debajo de las gradas para poder escuchar sobre qué hablaban.

—¡Eres tan inútil!—Soojin parecía gritarle a Dahyun.—¡Es una coreografía simple! ¡Pero tú no puedes hacerla!

Iba a salir de mi escondite para defender a la pobre chica cuando vi que Soojin levantó la mano para abofetearla. Pero alguien se me adelantó.

—¡Hey!, detente ahí o te arrepentirás.—Momo avanzó rápidamente hacia donde estaba el grupo de chicas reunidas. La pobre Dahyun ya estaba hecha un mar de lágrimas. ¡Esperen! ¿Momo defendiendo a Dahyun? ¿En que tipo de mundo paralelo existiría eso?

—Oh, ¿en serio? No lo creo.—Hablo Soojin mirando desafiante a Momo, grave error, Soojin, grave error.

—Escúchame, porras, porque no practicas como vas a adorarme en el partido y me dejas en paz a la chica.—Momo sonrió satisfactoriamente y saco a Dahyun del gimnasio.

¡Que drama!

Salí de ahí cuando ya no había nadie, aún faltaban algunos minutos para que comenzara la clase, me siento mal por no haber defendido a Dahyun, pero me siento bien porque gracias a que no lo hice Momo la ayudo y pueden hacerse amigas. Bien, me estoy armando un cuento qué tal vez nunca pasará.

Decidí ir a buscar a Momo y a Dahyun para que entraran a clases. Las busqué prácticamente por toda la escuela y las encontré en el pasillo del tercer piso. Me escondí detrás de un casillero, podrán decir que soy algo metiche, pero ustedes harían lo mismo.

—¿Por qué permites que te traten así, eh?—Momo hablo molesta.

—N-no lo se, creó que... es porque no quiero que me excluyan del equipo.—Hablo cabizbaja, creo, solo creo, que a Momo se le salió una sonrisita poco duradera.

—Debes detenerlo ahora o se pondrá peor.—Dicho esto, Momo se disponía a irse de ahí, pero Dahyun tomó su chaqueta. ¡Muero de ternura por esa niña!

—¿Que sucede? Suelta.—Momo volteo a ver confundida a la más pequeña.

—Mm... podemos hablar... ¡sobre Hockey! Si, quiero aprender...—Dahyun se mostró insegura al decir esto, podría ver esta clase de Dorama todos los días.

—Estas mintiendo, dime la verdad y te dejare seguirme.—Se cruzo de brazos mirando a la pálida y bajita de Dahyun.

—No quiero volver ahí, me van a molestar—Volvió a hablar cabizbaja. ¡Bingo! Esta vez la sonrisa de Momo fue notoria. Y Dahyun también la vio cuando levantó la cabeza.

—¿Sonreíste? ¡Si, sonreíste!—Oh por Dios, que ternura de niña.

—No, no lo hice. Ahora vamos, comeremos algo juntas.—Dahyun camino adelante de Momo y Momo volvió a una soltar una sonrisita. ¡Ow! Primera vez que veo a mi capitana sonreír.

Salí de mi escondite por segunda vez en lo que se lleva de hora. ¡La clase de Educación Física!

Corrí lo más rápido que pude hacia el Gimnasio y entre lo más discreta que pude, logré pasar desapercibido cuando Jongsuk estaba dando un descanso.

Me senté fingiendo estar cansada, sin darme cuenta de quien se estaba sentando a mi lado. Kim Taehyung.

—H-hola Hyun, mmm... yo quería explicarte s-sobre lo que ocurrió ayer...—Rascó su nunca nervioso y sentí como mis mejillas se pusieron rojas.

—No te preocupes, lo entiendo todo.—Intente hablar lo más tranquila que pude.

—Oh, entendiste todo... Espera, ¿Que entendiste?—Ese cambio de expresiones de Taehyung causó algo extraño en mi estomago. Debe ser algo que me cayo mal.

—Tranquilo, no soy de las personas que juzgan, no te preocupes, si no lo deseas no lo diré a nadie.—Guiñe un ojo y Taehyung paso saliva.

—No te estoy entendiendo, Hyun.—Volvió a hablar nerviosamente. Bien, esto es incómodo.

—Ya sabes, sobre tu condición.—Me fije que nadie estuviera mirándonos y me acerque a su odio para susurrarle algo. Claramente él tuvo que agacharse para estar a mi altura, es un poste a mi lado.—Sobre que eres... tomboy.

Taehyung se exaltó y se separó de mi mirándome sorprendido.

—¡¿Que?! ¡No! Las toallas femeninas eran para mi hermana menor.—Explicó rápidamente.

Bien, ahora yo estoy avergonzada. Escuchamos una pequeña risa detrás de nosotros. ¡No inventes! Kevin había escuchado nuestra conversación. Tierra trágame y te pagaré todo lo que tengo.

In Love On Ice » Kim Taehyung.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora