↫ᴍɪ ᴏᴅɪᴏsᴏ ᴘᴇʀsᴏɴᴀᴊᴇ↬ ᴊᴏᴇʀɪᴄᴋ

❝ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ sɪᴇᴛᴇ❞

—Bien, ya que no haz dicho podemos irnos

Ambos nos levantamos de nuestros asientos pero la señora tomó una de mis manos y yo la miré raro. ¿Ahora que quería?

—Antes de que se vayan, tengo que advertirles que allá fuera algo pasará y tienen que tener cuidado —advirtió

—¿En serio? —preguntó Pimentel con curiosidad

—Si. Posdata ¿cuanto dan pa la propina? —preguntó la señora estendiendo su mano.

—Nada, ya le dimos 200 —le respondí soltandome de ella

—Hay que irnos —ordenó Joel y ambos salimos de ahí.

Cuando salimos nos dimos cuenta que había llovido y había un montón de charcos de agua en las calles. Estuvimos caminando por un buen rato y Joel no paraba de hablar de que esa mujer era una estafadora, sinceramente no sabía si creerle o no.

Ya que estuvimos apunto de cruzar la calle, había un charcó cerca de donde ibamos a pasar y una camioneta venía a toda velocidad. Como iba a pasar por ahí, Joel se pusó detrás de mi, la camioneta pasó por el charco y me mojó gracias a la velocidad en la que iba.

Joel se pusó a mi lado cuando la camioneta se había ido y yo estaba empapado de cabeza a los pies.

—Lo siento, pero tengo que cuidar mi bello rostro —dijo en su defensa

Yo lo miré con cara de pocos amigos. Quité un poco de agua de mi playera y crucé la calle molesto mientras Joel me perseguía.

Lo odio.

—Oye —me llamó— estás mojado

Me paré y lo miré mal. Este chico estaba acabando con mi paciencia y en cualquier momento iba a soltarle un golpe del que no me arrepentiría.

—No ¿en serio? —pregunté en sarcasmo— vamonos que se hace de noche.

Llegamos a casa después de caminar un rato, mamá estaba sirviendole la comida  a mi hermano quien estaba en la mesa bebiendo agua de limón; en cuanto me vió escupió todo y empezó a reírse

—¿Quién se meó en ti? —preguntó con carcajadas

—No es pipí, es agua —lo corregí

—Como sea te vez espantoso

—Verdad que sí —dijo Joel dandóle la razón a mi hermano

—Vete a bañar y te vienes para cenar —me ordenó mi mamá y yo asentí— Joel ¿Quieres de cenar?

—Con gusto. —se sentó en mi silla

—¡Es mi silla! —reclamé— quitate

—Ay Erick no seas egoísta —le sirvió el plato lleno de arroz con carne a Joel— hay más silla, así que no te quejes.

Molesto me di la vuelta y subí las escaleras. Entré a mi habitación y busque en mi bote de basura la hoja donde venía la imagen de Joel, pero el bote estaba vacío. Negué con la cabeza y corrí a bajar las escaleras

—¡Mamá!

—¿Otra vez tú aqui? ¡vete a bañar! —dijo mi mamá ya cansada

—Mamá ¿qué le hiciste a la basura de mi cuarto?

—¿Cuál basura? Si la unica basura de tu cuarto eres tú —comentó mi hermano y yo le aventé su plato de comida encima—¡Oye! ¿Qué te pasa estúpido? —se levantó indignado

—¡Erick! —reclamó la mujer, molesta

—¡Estoy cansado de que me trates mal! Todos tus apodos, tus comentarios ¡me tienes harto!

Erick estaba realmente molesto y Joel comía mientras observaba la escena. El hermano de Erick siempre se burlaba de él, lo trataba peor cada día y siempre lo hacía sentir mal y ya estaba harto de que lo trataran así

—¡Soy tu hermano mayor y me respetas!

—Lo dices como si tu fueras un angelito que respeta a todo mundo. ¿Ya le dijiste a mamá que acosas a chicas en la calle? —le preguntó Erick queriendolo retar, Armando hizo una seña de que se callara pero su madre ya había escuchado todo.

—¿Qué dices?. Armando, ¿eso es cierto?

—Upps ¿no lo sabías mamá? Tu hijo siempre acosa a las chicas y viene aquí a engañarte como si fuera un ángelito, un santo que no rompe ni un plato  —le soltó el chisme a su mamá y Armando quería matarlo con la mirada—. Vamos, dile a mamá que violaste a una chica en los ángeles y andas de prófugo. Por eso te viniste, no te corrieron de la universidad ¡violaste a una chica! —y recibió una cachetada de su hermano y se agarraron a golpes los 2 mientras que la mamá trataba de separarlos.

—Uy putazos —dijo Joel para sí mismo y siguió comiendo como si no pasara nada