La Vida de Linka Loud.

Un Nuevo Comienzo

UN NUEVO COMIENZO

Linka llegaba a la cuidad de Beaver ton, bajo del autobús y camino junto con León bien arropado, además de que estaba bien dormido en los brazos de su hermana. Camino unas cuadras durante unos minutos hasta que encontró un hotel del todo aceptable, aunque no uno como los de clase alta, pero para estar un tiempo no estaba nada mal por lo que entro a este.

“¿En que puedo servirte?” Pregunto la recepcionista.

“Tendrá un cuarto disponible por favor.” Dijo Linka.

“Si, pero no eres muy joven como para rentar un cuarto” Dijo la recepcionista al ver que una niña quería un cuarto.

“Lo sé, sin embargo, es para poder cuidar a mi hermanito, por favor no tengo a donde ir.” Dijo Linka.

La recepcionista la vio triste y sintió empatía por ella, quizá se metería en problemas, pero para poder ayudarla, así que acepto.

“Esta bien pequeña, dime tu nombre y te daré el costo.” Dijo la recepcionista.

“Muchas gracias. Mi nombre es Linka Loud.” Dijo Linka de manera alegre.

“Bien, tu habitación será la 18, será un costo de 500 dólares.” Dijo la recepcionista y le entrega la llave a Linka y esta le entrega el dinero.

“Cualquier cosa que necesites avísame.” Dijo La recepcionista.

“Claro, muchas gracias.” Agradeció Linka y se fue a su nuevo cuarto de hotel.
Ya entrando se dio cuenta que León se estaba despertando y lo puso en su cama.

“Parece que mi pequeño dormilón se esta despertando.” Dijo Linka.

León dio un pequeño bostezo y miro a su alrededor y vio que no estaba en su antigua casa, cosa que lo confundió y aterro ya que el no sabia que era lo que estaba pasando como todos los bebes, rápidamente se tranquilizo al ver a su hermana.

“Bueno León, este será nuestro nuevo hogar por ahora, solo necesitare un poco más de tiempo para poder encontrar un lugar donde quedarnos y que sea lejos de aquí. No me voy a arriesgar que ellos nos encuentren, el ver que te dejaron solo, me dejo en claro que tu eras el siguiente.” Dijo Linka.

“Bien León, iremos al supermercado por algunas cosas que necesitas y por llenar la despensa, todavía tengo que encontrar un trabajo para poder mantenerlos a los dos y a mí.” Dijo Linka y partieron al supermercado.

Ya estando ahí Linka y León iban de pasillo en pasillo por lo que podían necesitar.

“Inka.” Balbuceo el infante.

“¿Que pasa León?” Pregunto Linka.

“Emanos y mama y papa.” Balbuceo León.

“León, se que los extrañas, pero lo mejor será que estemos fuera.” Dijo Linka.
Luego de hacer las compras, los dos regresaron al departamento. Linka puso a León en la sillita.

“Haber León es hora de que te de comer.” Dijo Linka y saco una papilla para darle a su hermano.

“Muy bien León aquí viene el avioncito.” Dijo Linka y fue dándole de bocados.

Luego de almorzar Linka le cambio el pañal, aunque de alguna manera no se desmayo cuando el olor trataba de penetrarla. La albina empezó a arrullarlo para que pudiera dormir después del día tan largo que tuvieron.

Pasaron unos minutos y León se quedo dormido, aunque también Linka estaba cansada y esta se quedo dormida.

Mientras esto pasaba, nos remontamos al hospital de Royal Woods donde una joven de 17 años estaba a lado de un joven de 17 acostado en una cama y estar vendado de las piernas y del brazo derecho.

“Me pregunto cómo estará Linka, se que puedo confiar en ella, pero aun así no puedo evitar preocuparme por ella. Y mas con lo que me conto a Loki de la mala suerte las cosas no pueden ser mas tensas.” Dijo Bibi.

Loki empezaba a despertarse y vio a su alrededor y vio a Bibi lo que le provoco una sonrisa.

“Hola Bibi.” Dijo Loki.

“Loki, gracias a Dios que despertaste, estaba preocupada por ti.” Dijo Bibi.

“Tranquila cariño, no sería capaz de dejarte sola.” Dijo Loki.

“Loki dime recuerdas algo de lo que paso antes de la tragedia.” Pregunto Bibi a su novio.

“La verdad no lo recuerdo, lo único que recuerdo es que tuvimos una cita y te había llevado a un departamento. De ahí no recuerdo nada más.” Dijo Loki.

“Veras Loki, fuiste atropellado porque salvaste a tu hermana cuando los demás estaban persiguiéndola para hacerles daño. Ella está bien, pero tuvo que irse para que ellos no le hicieran daño.” Mintió Bibi.

“Ella siempre trato de protegerlos ante todas las cosas, pero sucedió algo malo que llevo a que se tuviera que ir. Me pidió que te cuidara, no me dijo donde estaba, pero que volvería.” Dijo Bibi.

Loki estaba sorprendido por la historia que le conto su novia, no se esperaba que su hermana la estuviera pasando tan mal.

“En cuanto me recupere, iremos a buscar a Linka.” Dijo Loki.

“Claro, sin embargo, tus hermanos no están del todo contentos con ella, por lo que a lo que ellos te digan de ella tu solo sigue la corriente, las cosas que ellos dicen no son verdad. Además, Loki, te propongo que te mudes conmigo a la gran cuidad cuando termines la preparatoria.” Dijo Bibi.

“Claro Bibi.” Dijo Loki.

“(Bien Linka, donde quieras que estés, espero que te encuentres bien y quiero desearte lo mejor para ti y con quien quiera que estés y estoy segura de que nos volveremos a ver.)” Pensó Bibi.

Devuelta con Linka, ella estaba durmiendo todavía con León en brazos. Estaban durmiendo cómodamente y la peliblanca empezó a entrar al mundo de las sueños.

Ella estaba en la cocina preparando la cena, pero esta Linka ya era una adulta y dos niños bajaron de las escaleras uno era León de 8 años y la otra era una niña de la misma edad y con el cabello blanco y vestía de un vestido naranja y zapatos negros.

“Bien mis niños, es hora de cenar.” Dijo Linka.

“Ya bajamos mama.” Dijo la pequeña.
Linka llevo todo a la mesa para que pudieran cenar.

“Muy bien chicos, como les fue hoy.” Pregunto Linka a los chicos.

“Estuvo bien mama, hoy participe en una competencia de atletismo y logre quedar entre los mejores para entrar al equipo.” Dijo León.

“Te felicito León, estoy segura de que ganaras. Y tu hija ¿Cómo estuvo tu día?” Dijo Linka.

“Pues estuvo bien ya que participe un concurso de deletreo y gane por unos puntos.” Dijo la pequeña.

“Muy bien hija, los dos me siguen demostrando que ustedes son muy talentosos, estoy orgullosa de ustedes.” Dijo Linka.

“Gracias mama. Oye te puedo preguntar algo.” Dijo la pequeña.

“¿Qué es hija?” Pregunto Linka.

“¿Quiénes son los Louds? ¿Tenemos más familia?” Pregunto la pequeña.
Linka se quedó petrificada ya que no sabia que responder.