Poema 4.

25 0 0
                                    

Aquel chico de mirada oscura,
oscura como la noche triste,
me miraba fijamente,
trataba de comprenderme.

Me invitó una copa
y un par de besos,
yo no podía
negarme a eso.

Alejándose lentamente,
me proponía algo indecente,
aunque muy caliente.

Y en el medio de su cama,
después de tanto drama,
sus ojos brillan,
como una gran daga.

-silvanabello03

Tardes de té y poesíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora