Octavo ~ 3:00 A.M

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"Porque el tiempo se avergüenza al no parar por siempre en ese instante"





Jungkook apretó el agarre en la cintura del mayor atrayendolo aún más cerca, si es que eso era posible a este punto.

Sus labios se separaron y el menor tomó esa oportunidad para comenzar a depositar besos en el cuello del otro, confirmando que la piel del castaño era más suave de lo que aparentaba. También dejó mordidas suaves, no iban a marcarle la piel pero sí le quitaron algunos suspiros y Jungkook estaba satisfecho con eso.

No era nada apresurado de más, eso les quitaría la oportunidad de sentir cada rose y no estaban dispuestos a pagar ese precio. Entonces sus toques eran lentos, pero con una gran intensidad, demorando lo suficiente para dejar rastros en sus pieles.

Taehyung quería tanto tener un mayor contacto con el menor, no era su intención apresurar nada pero ya que él mismo no estaba vistiendo una blusa, ¿estaría bien si le quitaba a Jungkook la suya? El menor vestía una campera y su pijama de mangas cortas, era demasiada ropa a los ojos del mayor.

Jungkook pareció haberle leído la mente porque se separó un instante para quitarse el abrigo y volvió rápidamente a depositar sus manos en el cuerpo del castaño. Ahora Tae deslizó sus propias manos dentro de la blusa del menor, admirando como éste se estremecía ante ello.

Jungkook era lindo en todas las situaciones y ahora, con los ojos cerrados y tan sensible por sus toques, era un camino directo al paraíso, esa fué la teoría final de Taehyung, eso o Jungkook era el mismo paraíso.

Descaradamente seductor, el castaño se acercó al oído del menor y con su voz, jodidamente grave, le preguntó si podía retirar su blusa. Las piernas del menor temblaron y se limitó a asentir con la cabeza. Si abría la boca estaba seguro que sonaría como un gemido. Taehyung subió su remera, hasta retirarla por completo y la dejó caer en el suelo.

Jungkook se veía increíble, su cuerpo era hermoso, realmente hermoso. Pudo apreciar como su cintura era pequeña y lo trabajado que estaba su abdomen, no se coibió al observarlo detalladamente. "Tu cuerpo es muy, muy hermoso" susurró mirándolo a los ojos. Tomó una iniciativa mayor y pasó sus manos por la espalda del azabache, desde sus omóplatos hasta el inicio de sus pantalones. Éste jadeó al notar sus intenciones.

"No quisiera que nos apresuremos demasiado, contigo es todo tan suave y, en realidad me gusta que sea así ¿Podemos esperar para seguir?" Jungkook, aún con su mirada conectada a los ojos del mayor y la voz algo rota por la sensibilidad, pronunció esas palabras. Él lo quería todo, pero no quería que nada sea apresado. Taehyung era tan especial que le gustaría tratarlo como tal.

Regulando su respiración, el castaño respondió un claro "Si, claro que sí" y sitió los labios de Jungkook sobre los suyos, en un beso más dulce que los anteriores, donde sus lenguas no se encontraron pero sus corazones lo hicieron y eso era todo lo que Taehyung deseaba.

El celular de Jungkook comenzó a sonar, sabía que era una buena idea traerlo. Lo tomó del bolsillo de su campera que, sin vergüenza había dejado caer por cualquier lugar del suelo. Atendió rápidamente al ver de quien se trataba.

"Jungkook, ¿Dónde estás? Me desperté y no estabas en tu cuarto" su madre sonaba algo preocupada y somnolienta al mismo tiempo.

"Estoy en casa de Taehyung, te explicaré luego"

"Mmhhh. Así que en casa de Taehyung a esta hora"

"Mamá por el amor de Dios"

"Bueno, está bien, ¿te quedarás toda la noche allí?"

"Yo...no se si-"

"Te quedas entonces. Genial, sigan, no lo sé, leyendo, o lo que sea que hacen las personas que se gustan según tú"

Success (Taekook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora