Seis

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Los días pasaron, llevando una semana en total después de que Rubius y Willy decidieron irse de Karmaland, durante esos días fuera, Rubius aprendió varias cosas sobre Willy, que este se levantaba muy temprano a hacer ejercicio, cocinaba muy bien y que tenia escondido un cuerpaso de Dios, propias palabras de Rubius. Willy también conoció algunas cosas sobre su hermano oscuro, como el que, se ve muy adorable dormido, adora lo dulce, sus orejitas de oso son sensibles al frio, aun siendo un Héroe, o ex héroe ahora, odia el ejercicio. Les fue difícil los primeros días el acostumbrarse a que ambos compartirían una casa, pero después se complementaron de tal manera que hasta podrían jurar que no querían que esos días se acabaran, y eso que solo llevaban una semana.

En ocasiones recibían llamadas de sus otros compañeros, principalmente de Fargan y Alexby. Fargan les reclamaba que ahora no tenia con quien hacer maldades mientras los otros dos reían. En algunas de las llamadas de Luzu a Rubius, este le trato de persuadir para que le dijeran la verdad de porque se fueron, a lo que Willy interrumpió quitándole el celular al osito, despedirse rápidamente y colgar sin dejar hablar a Luzu, Rubius le agradeció eso, puesto que sabe que él es incapaz de mentirle a Luzu.

Ese día Lunes ambos chicos decidieron participar de las actividades que hacían comúnmente  en el pueblo, preparar vino, hacer pasteles para un banquete en la tarde, jugar con los niños, entre otras cosas.

El atardecer llegó y con ello un banquete bajo la luz de la luna en el centro del pequeño pueblito, adornaban los lugares con velitas mientras algunos guardias resguardaban que ningún monstruo molestara la tranquilidad de la cena.

— vas a parecer embarazada cuando termines — se burlo Willy al ver a su compañeros comer como si no hubiera un mañana —

— tengo hambre macho, ¿crees que es fácil atrapar a los mocosos? — respondió con la boca llena, Willy de igual forma le entendió y se comenzó a reír, era verdad, los únicos niños de ese pueblito que con suerte eran 6 o 7, eran muy escurridizos y difíciles de atrapar — a Mangel le hubiese agradado este lugar — soltó de repente a lo que Willy dejo de reír — a veces los extraño, a todos — El Albino poso su mano sobre el hombro del Osito —

— ¿A todos? — Rubius asintió, pero dudoso de su respuesta, si extrañaba Karmaland, pero eso no significaba que estaba listo para volver, para volver a ver a Vegetta —

— Aunque estoy seguro que cuando volvamos nuestras casas van a estar casi destruidas — dijo divertido volviendo a su misión de comer todo posible de la mesa antes de que los niños se le adelanten —

Willy quedó pensativo ante lo dicho por Rubius, no por de la casa, estaba seguro que si era así se vengaría de cada uno de sus compañeros, si no en lo de extrañar Karmaland, a los habitantes, a una persona en específico. El albino no quería preguntarle si extrañaba al loco de la isla flotante específicamente. algo le dolía de tan solo pensar en eso, lo que duró el banquete hasta la hora de ir a sus casas Willy quedo observando las estrellas concentrado en sus pensamientos, cuando iban caminó a "casa" Rubius decidió hablar.

— pareces idiota viendo la estrellas de esa manera, no te les vas a coger — dijo Rubius riéndose de su propio chiste, Willy soltó una pequeña risa antes de fijar su vista en el de orejas de oso — creo que estar mucho tiempo fuera de Karmaland te ha hecho mas gilipollas de lo normal —Willy levantó los hombros sin darle mucha importancia a lo dicho —

— ¿Alguna ves has pensado en que seríamos sin Karmaland? — pregunto el Albino al osito —

— ¿a que viene esa pregunta? — Willy rio —

— es de mala educación responder una pregunta con otra — Rubius hizo un puchero, acaso no podría estar sin un día que le corrijan algo —

— pues, personas normales, tu posiblemente serias el líder de alguna secta satánica, por algo eres o eras la mente maestra de la hermandad, ¿Fargan? pues.. un policía y yo pues, no se, la verdad no se — dijo sin darle mucha importancia a la pregunta — 

— ¿no as pensado en formar una familia? — volvió a preguntar el albino mientas miraba las estrellas —

— seria algo lindo, pero no me veo cuidando de un bebé la verdad macho — Willy río al imaginarse  a su compañero con un bebé en brazos, solo que este no dejaba de llorar y Rubius no sabía como calmarlo —

— ¿si tuvieras la oportunidad de tener algo lindo, una familia, una esposa — soltó un pequeño suspiro antes de seguir — o esposo, te instalarías en Karmaland? — Ambos detuvieron su andar —

— Esto parece un interrogatorio Willy — El Albino sonrió y el Híbrido siguió hablando — Pues la verdad, yo diría que un sí, me instalaría en Karmaland — Willy iba a hablar, pero Rubius continuó — y no me preguntes porqué

Después de esa pequeña charla se formó un silencio entre ambos, no era incómodo ni nada por el estilo, solo, no era necesario seguir hablando. Cuando llegaron a la casa los dos atinaron a ir a su respectiva cama y dormir, solo dijeron un "buenas noches" y apagaron las luces de la habitación para caer dormidos.

Mientras esto sucedía con la pareja de "desaparecidos", por otro lado en Karmaland, Nieves miraba las estrellas desde la una de los balcones de la solitaria casa que compartía con el Medio Oso, sabía por Fargan y Lanita que ambos estaban bien, podía ver la soledad de Fargan en sus ojos cuando se encontraban por el pueblo, y bueno, Lanita decía lo mismo de Nieves cuando ambas practicaban arquería a las afueras del pueblo. Siendo solo una semana, si hacían falta esos momento con ambos héroes fuera de Karmaland. Nieves había visto una que otra vez al loco de isla paseando por los alrededores, posiblemente buscando alguna pista de donde se fue el Osito, pero esta, ni le dirigía la mirada ni ningún tipo de palabra.

Las noches pasó y con ello la luz del sol se hizo presente en ambos pueblos. Por un lado, Willy se levantaba con el sol dejando dormir un poco más al híbrido, y por el otro Vegetta despertaba por la explosión de su puerta, aun con dos locos fuera, seguían otros dos dentro del pueblo.

Como de costumbre el amante del morado llamó al policía de "confianza" Alexby, este hizo acto de presencia a los poco minutos y dijo lo de siempre "si no hay evidencias que culpen a algún integrante de Karmaland no puedo hacer mucho" a lo poco minutos Alexby recibió una llamada mientras Vegetta seguía alegando sobre la puerta.

— ¿Rubius? — con solo escuchar decir su "nombre" Vegetta se quedo callado — sí, sí, no hay mucho que decir — Alexby se dio cuenta de la mirada fulminante de su compañero — en realidad estoy de servicio ahora así que no puedo hablar mucho y ... — El de pantalones morados le quito el teléfono de las manos — ¡¡HEY!!!

— Osito, por favor vuelve! — fue lo único que pudo decir Vegetta antes de recibir un golpe en lo huevos, Cortesía del policía 

— No toques! — dijo agarrando su teléfono de las manos contrarias — perdón, ¿decía? —por suerte para Vegetta, Rubius seguía en la llamada, si no, posiblemente Alexby le hubiera puesto un par de horas en la cárcel —






— "necesito de un favor tuyo Leli"

— ¿de que tipo de favor estamos hablando?




(1281 palabras)

Todo por tu Sonrisa (Rubirex)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora