Destinados [Sprousehart]

Capitulo 5

Pasamos la noche riendo y bailado.

Termino la fiesta, y me fui a mi casa. Sinceramente, no se lo que Cole hizo después.

No supe nada más de el, pasaron 2 semanas y no me lo había encontrado, tampoco me había escrito.

Hasta que lo hizo, me llamo.

Era temprano ese horario para mí, ya que había vuelto a las 5am y no había dormido casi nada.

—Si?

—veo que recién despiertas, lo siento.

—No pasa nada, dime—me levanté de la cama, y me pare frente a mi armario para decidir que ponerme.

—Te quería preguntar si querías cuidar a mi hija... Ser su niñera.

—Me vendría bien, no tengo trabajo, necesito dinero para la renta de mi departamento.— le respondí.

—¿No vives con tus padres?

—Luego te explico.

—Bueno, genial. Empiezas mañana.

—¿Cuánto sería el sueldo?

—Reinhart, eso te lo digo cuando vengas a mi casa.

—Esta bien.

—Te espero en 15 minutos.

—¿Que? ¿No era que empezaba mañana?— pregunté.

—Princesa, solo ven.

—Esta bien...

—No tengas miedo— río.

—Claro que no tenga miedo.

—Como digas.

El río y colgó. Yo me preparé para ir a su casa.

Hice mi rutina diaria, fui al baño, me lave las manos, la cara, y los dientes.

Baje a desayunar, y apenas terminé, subí al baño para bañarme.

Terminé y me fui directo a la casa de Cole.

Me abrió la puerta, me miró de pies a cabeza.

—Hola Co-

Fui interrumpida por este, debido a que me beso lujuriosamente.

—He tenido ganas de hacer esto desde que te vi en el auto.

—que romántico, pero eres muy rápido.

—oh princesa, espere 5 meses para esto, ¿Y me dices rápido?

—Yo apenas te conozco.

—me habías dicho que escuchabas todo.

—buen punto— dije para luego poner mis manos detrás de su cuello, y volver a besarlo.

—Sabia que no te resistirias— sonrió victorioso.

Yo reí, y seguí besándolo.

Me cargó al sillón que había en su living. Comenzó a besar mi cuello, íbamos a seguir pero fuimos interrumpidos por el timbre.

—¡Carajo! — se quejo el, furioso.

Yo acomodé mi ropa, el igual, y se dirigió a la puerta.

—Tu hija está llorando, quiere estar contigo— hablo una morocha, lindo cuerpo, sonrisa perfecta, toda una modelito, jamás llegaría a ser como ella.

—oh, princesa. —dijo Cole para luego cargar a su hija. —¿Se queda conmigo?

—Al menos un rato, quiere pasar unas horas contigo.

—Entiendo, ven a buscarla a las 6.

—Excelente.

Ella se fue.

—¿Papi quién es ella?— pregunto su hija.

—Es...

—soy tu ¡Nueva niñera!

—Eres linda— dijo la niña, mientras tocaba mi cabello.

—gracias, tu también eres linda.— le sonreí.

—Bueno, cariño, ¿Quieres ir a tu habitación?

—si papi.

Pilar subió a su habitación dando saltitos mientras sostenía a una muñeca.

—pense que eras mi novia— me replanteo.

—No me lo has propuesto.

—Quieres que lo haga?

—eso queda en tus manos.

—me pensé que ya lo éramos.

—no...

—¡Pero casi tenemos sexo!

—¡Tu boca, Cole! Esta tu hija.

—carajo.

—bueno, supongo que te veo mañana.

En ese momento la niña bajo, tiro del buzo de su padre para que el se agache.

—papi esa es tu novia? —susurró.

—proximamente.

Ella sonrió.

—hacen linda pareja— me dijo.

—eres muy tierna e inteligente como para tener 4 años.

— lo sé.

Yo reí.

—asi que somos pareja? —me pregunto cuando Pilar ya se había alejado.

—lo dije solo por la niña.

—creo que tendré que rendirme.

—oh, no te rindas Sprouse. Vengo mañana.

—si, ven a las 2 de la tarde.

—genial, adiós— dije para luego besarlo y reírme.

—¿Me parece a mí o juegas con mis sentimientos— me gritó cuando ya me había alejado.

—te parece a ti.