Tal vez no eran las circunstancias más comunes de conocer al posible amor de tu vida, pero de lo que estaba segura era de que estaría dispuesta a salvar y proteger mil veces más si era necesario a aquella pelirroja de mirada felina.
Historia origina...
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Gold Coast,
Brisbane, Australia.
"...Exactamente, se estima que en las próximas 24 horas estará llegando a la región metropolitana de Brisbane la tormenta a la cual nuestros meteorólogos han nombrado "TormentaPark", en honor a la encargada en descubrir y traernos noticias acerca de este acontecimiento natural, la meteoróloga Park Jihyo, la cual nos asegura que tendrá magnitudes similares a las de un huracán. Se garantizan intensas corrientes de aire y un clima un tanto mojado, además de que podrán presenciarse en nuestras costas de GoldCoast olas masivas de hasta 3.5 metros de altura un fenómeno nunca antes visto en Brisbane. En otras noticias se oficializa como medida de seguridad el cierre de las playas, una lástima para nuestros amantes de las costas. Se aconseja no salir a manera de cotidianidad y resguardarse en sus hogares, nunca se sabe cómo la madre naturaleza pueda reaccionar, por lo tanto estar precavidos ante todo. Muchas gracias esto fue to..."
"Olas masivas de hasta 3.5 metros". Chaeyoung sólo repetía en su cabeza la misma frase mientras observaba la pantalla frente a sus ojos con una gran sonrisa. El mundo se había paralizado, ahora eran solo ella y su nuevo anhelo por surfear aquellas grandes olas, no sabía cómo lo haría pero estaba totalmente confiada en que surfearía olas de 3.5 metros.
— ¡Yoo Chaeyoung!
Mierda
— ¿Sí, mami? — Preguntó inocentemente la pelirroja.
— ¡¿Qué te dije acerca de tu habitación!? ¡Parece un basurero! — Gritó su madre Jeongyeon.
— ¡De acuerdo, de acuerdo! ¡La ordenaré! — Le respondió en el mismo tono.
— ¡Ah no, señorita! ¡Nadie usa ese tono conmigo!
— ¡Yoo Jeongyeon! — Otra voz hizo presencia en la sala.
— Mierda — Masculló la mayor de las dos provocando una leve carcajada en su hija. — ¿Sí, mi amor?
— ¡¿Qué te dije acerca de los pañales para Ryujin?! ¡¿Esperas a que se compren solos!? — Y esa fue su otra madre, Nayeon. Regañando como siempre a su esposa.
— ¡En seguida voy, cariño! — Respondió poniéndose firmemente cual soldado ante la orden de su superior y yendo enseguida a comprar más pañales para su hija más pequeña.
Chaeyoung se quedó contemplando con una mirada divertida a su otra progenitora.
— ¿Te parece muy gracioso? Esa habitación tampoco se limpiará sola. Andando, señorita. — Dijo mientras miraba a su primogénita subiendo las escaleras luego de haber acatado sus órdenes de la misma forma en la que su esposa lo hizo.
