Capítulo 3.

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(Chic@s!! La Foto de multimedia es de Jasper Leigh )

Apenas era miércoles y yo solo deseaba que llegara el día viernes, ya quería volver a ver a Jasper, pero bueno tendría que esperar más tiempo. El día de hoy Ethan me había dejado descansar con la justificación que mi día libre me hizo trabajar por ir a la reunión, le dije más de una vez que no era necesario, pero aquí estoy disfrutando de mi día libre junto a Melanie ya que ella también estaba descansado, y habíamos quedado en ver un maratón de películas románticas.

-Vamos Kate ya cambia esa cara, ya casi es viernes-me anima Melanie.

-No es eso, simplemente estoy triste, no se desde ayer me siento algo rara –murmuro en modo de defensa.

-Debe ser porque estas cansada, mucho estrés del restaurante-sugirió ella.

-No, no es eso, me siento rara, muy triste como si hoy fuera una fecha especial que estuviera olvidando, me siento hasta cierto punto devastada y no entiendo por qué-le respondí exaltada.

-Mejor comencemos a ver la película-me respondió ella nerviosa.

-Espera un momento ¿Qué día es hoy? -pregunte nerviosa.

-Es miércoles- respondió ella nuevamente nervios.

-No, estoy hablando de la maldita fecha-grite molesta, mientras buscaba mi celular.

Ella solo me observaba con temor, como si supiera que era lo que me tenía tan exaltada, pero yo estaba más concentrada en buscar mi teléfono que en ella, solo necesitaba confirmar que hoy no era el día, no podía ser así.

-Lo sabias-grite exaltada mientras veía la fecha.

-Yo... perdón... Ethan y Marie... me pidieron... que te distrajera este día-contesto Melanie casi al borde del llanto.

-No puede ser, ahora entiendo porque el día libre-susurre mientras intentaba no llorar.

-Me pidieron que estuviera todo el día contigo-murmuro mientras intentaba acercarme.

-Tu no lo entiendes, hoy es nueve de Julio-grite mientras empezaba a tirar todo lo que se encontraba a mi paso.

-Ethan y Marie me contaron-me dijo intentando calmarme.

-Este es su cumpleaños número treinta y uno- solté en un sollozo mientras me tiraba al suelo.

-Él está bien, en algún lugar, no le gustaría que te pongas de este modo por lo que paso-me susurra Melanie mientras me abraza.

-Se suponía que siempre cuidaría de mí, que nunca me dejaría sola, él me prometió siempre estar conmigo-murmure entre sollozos. –hoy se cumplen diez años desde que se fue de la casa, este día estaríamos celebrando al máximo, desde que tengo memoria habíamos planeado que íbamos a hacer cuando el cumpliera los treinta y un años, y fue absurdo, solo teníamos que esperar a que yo cumpliera veintiuno para hacer todo lo que habíamos planeado-solloce más fuerte.

-Algún día se volverán a encontrar, solo ten fe pequeña-susurro Melanie mientras me abrazaba.

-A veces me pregunto si se fue por mi culpa y exactamente porque en su cumpleaños, todavía recuerdo ese día, me desperté un poco tarde, pero estaba tan feliz de ir a felicitarlo y cuando entré a su habitación él ya no se encontraba ahí, fui rápidamente a preguntarle a mamá si lo había visto y ella simplemente me respondió que él se había ido para nunca volver, siempre me pregunto qué será de su vida, también es inevitable pensar las razones por las que se fue, pero lo que más me pregunto es ¿Qué hubiera pasado si él se hubiera quedado? - respondí en un sollozo.

Atardecer en Venecia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora