Atardecer en Venecia

Capítulo 7.

El día de tu cumpleaños es de suma importancia, pero para mí solo es un día más en el calendario.

Mi cumpleaños, la única vez que disfrute este día fue hacer cinco años. Si cuando conocí a Jasper, porque desde hace diez años  dejo de importar, solo era un día más en el calendario.

Si, nadie de mis amigos en España saben que hoy es mi día «especial» nótese mi entusiasmo. Y si se lo preguntan Ethan me había dado el día libre, mis planes eran claros, si solo iba a ver películas mientras comía helado.
Pero Alguien en su sano juicio se atrevía a molestarme a las ocho de la mañana en mi día libre.

Cuando me dirigí a la puerta, me percate que mi vestimenta simplemente era una camiseta grande de hombre y un short súper cortos, pero con la insistencia que tenía esa persona no me importo.

- ¿Katherine Ferrer? – pregunto el repartidor.

- Sí, soy yo – respondí confundida.

- Esto es para usted – respondió, mientras me extendía un arreglo de tulipanes.

- Gracias – murmure confundida.

Él chico se fue sin ni siquiera decirme nada más. Cuando cerré la puerta fui hasta el desayunador para poner las flores en un florero y poder leer la tarjeta.

Kate preciosa feliz cumpleaños, espero que decidas pasarte por el restaurante para poder darte un abrazo o es más robarte un beso. Un tulipán eterno, por este amor eterno que tengo para ti. Cuando Tomas me dijo cuál era tu flor favorita busque su significado e igual quede enamorado de esta hermosa flor. Tu eres mi tulipán eterno mi querida Kate Ferrer.

Tu querido enamorado, Mateo.

Cuando termine de leer la nota, fue inevitable que una sonrisa no se escapara de mis labios. Sentía horrible no poder corresponderle todo ese amor a Mateo, pero primero ya había tenido un ex así y pues no se puede, segundo mi corazón ya le pertenece a mi eterno enamorado de Venecia. Podía haber seguido pensando muchas cosas tristes, pero de nuevo el timbre de mi apartamento sonó y tenía que abrir.

- ¡Pequeña feliz cumpleaños! – exclamo un emocionado Jasper cuando abrí la puerta.

- ¿Cómo todos saben de mi cumpleaños? – cuestione un poco incómoda.

- Deberías de agradecerle a Ethan y Marie – respondió mientras se acercaba a mi.

- Claro tenían que ser ellos – susurre molesta.

- Bueno tienes que alistarte, iremos a comprar tu regalo pero también alista tu maleta nuestro vuelo sale a las cinco de la tarde – hablo Jasper mientras entraba a mi apartamento.

- Mañana tengo trabajo – respondí mientras cerraba la puerta.

- Ya me encargué de eso – hablo mientras observaba con curiosidad los tulipanes.

- ¿Qué? – cuestione sorprendida.

- Hable con Ethan y regresamos el miércoles – respondió Jasper mientras buscaba impaciente alguna nota que acompañara las flores.

- Pero si hoy apenas es viernes – hable nerviosa.

- Lo se, mis hermanos nos acompañarán y unos amigos que vienen de Londres – murmuro mientras sostenía con sus manos la tarjeta que Mateo me había enviado.

- No conozco a nadie – respondí desviando mi mirada hacia otro lado.

- Tengo solucionado eso, tus amigos del restaurante irán con nosotros – me dijo mientras jugueteaba con la tarjeta.