Tras haber tenido un largo día de entrenamiento sus piernas temblaban, su agotamiento físico era tal que acabo rendido en el suelo, observando aquellas estrellas que iluminaban la noche y hacían sus ojos brillar como dos grandes luceros, esos ojos color azul cielo, cerrando sus ojos y disfrutando aquella brisa- Nee, Naruto, sería más cómodo si durmieras en tu casa, no?-aquellas palabras lo hicieron formar una gran sonrisa- Sí, Kakashi-sensei, pero prefiero observar la luna, esta hermosa junto a sus estrellas también- esbozo aquel rubio muy sonriente- ¿Le gustaría acompañarme?- palmeando la zona a su costado, a lo que el mayor no pudo negarse, aquel ser de luz que tanto le gustaba, pronto una dulce voz llamándolo lo hizo salir de sus pensamientos- kakashi-sensei, sé que ahora con el puesto de Hokage debe estar muy ocupado y debe traer mil cosas en la cabeza, pero justo ahora y aquí me gustaría... Más bien tengo que confesarle este gran amor que siento por usted, se que ha de decirse que estoy loco o confundido pero esto que siento es real, va más allá de nuestra relación alumno-maestro..- de pronto fue callado por un dulce beso, kakashi sostenía sutilmente la sonrojada cara de un Naruto, el rubio no se esperaba que tal cosa llegase a pasar o bien fue así hasta que escucho la alarma.
En un inútil intento de alcanzar aquel horroroso despertador el ojiazul se estampo contra el piso, su cuerpo aún somnoliento le había jugado una mala pasada y eso lo sabia su cara tras el impacto- Ah, Naruto, con que así inicias este bello día, que lindo te ves así pequeño- un sonrojo junto con un tremendo recuerdo acompañaron a Naruto, Ayer habían consumado el profundo amor que se sentían ambos, en un intento por tapar sus cueros un Kakashi lo miraba muy sonriente y entre medio de carcajadas-Narutooo, que te avergüenza si ayer pude contemplar ese hermoso cuerpo, ahora mi paraíso- el ojinegro se levanto de la cama con una gran sonrisa y cargo a Naruto dejándolo plácidamente sobre la cama, al parecer alguien había amanecido de muy buen humor- Yo... Pues.. Kashi, te amo- Un rubio muy sonrojado se encontraba entre las sábanas siendo aprisionado por unos cálidos brazos, mientras sus labios libraban una batalla endulzante de besos con amor agregado.
A pesar de tener un año de novios Naruto seguía siendo el mismo, y eso a Kakashi le encantaba, después de todo él es su rayo de luz.
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