CALL YOU MINE ━━ timothée chalamet

35 | ❛MEMORIES❜ |

¿Preocupada? Quizás.
¿Miedosa? Lo más probable.
¿Estupidez pura? Ella diría que es más un acto de amor a otro. Solo que sin que este lo sepa.

Porque, ¿Qué sería de uno si no esta totalmente convencido de sus planes en situaciones como esta? Tal como le pasaba a Debby quien soltó toda la verdad de una sin esperar acción previa de su acompañante.

─Sé que te gusta Timothée.

Debby empezó a jugar un tanto nerviosa con los dijes de su brazalete. Tarareaba en voz baja una canción en lo que sus zapatillas tamborileaban contra el piso de la cafetería.

Su mente daba vueltas y viajaba a planos astrales de los que ni siquiera ella era capaz de visualizar con determinación. Traía ropa cómoda puesta, todo en combinación salvo por el buzo gris (Que habría de extrañarte por estarlo usando esos días de calor).

La verdad es que la castaña no era capaz de admitir en voz alta lo que estaba pasando con ella realmente. El hecho de que no podía admitir que estaba usando su ropa porque creía tener su aroma impregnado en él.

Debería haberselo devuelto hace un buen tiempo. Incluso el castaño le había preguntado por días después de que decidieron tomar distancia.

─ ¿Qué? ─Preguntó la rubia sentada en frente suyo. Soltó una pequeña risa y luego frunció el entrecejo. ─Perdona, Deb. Pero no entiendo mucho lo que intentas de decirme.

Estaban sentadas en frente un sillón cómodo del negocio. El aroma a cafe expreso y leche recién calentada llenaba sus fosas nasales en lo que esperaban que les trajeran sus ordenes. Era un lugar de estilo ambiguo y rústico, casi como un bar country; pero que a su vez conservaba su bello encanto.

Era uno de los lugares favoritos de Debby en la ciudad. Ahí es donde su madre solía llevarla siempre que se reunían cerca, ahí fue donde hizo el primer encuentro con Lance como su hermano biológico y es donde había conocido a Becka antes incluso de que iniciaran una amistad.

Lo consideraba un lugar sano y tranquilo, donde finalmente podía ser ella misma y respirar en calma. Restaurantes de comida rápida como su querido "Central Perk" eran lugares a donde acudía cuando estaba en plena libertad y florecientes sentimientos. Donde ella podía ir en compañía de sus amigos más cercanos y pasar un buen rato a las risas. Pero, cuando no sentía que estaba en paz, Debby prefería ir a esa cafetería del centro. Muy poco concurrida por estar en los barrios más bajos de la ciudad y de espacio pequeño, pero que era perfecto para ella.