.I.

78 2 2
                                    

ANTES


SAMANTHA

Siempre había pensado que el amor era algo complicado de entender, como dos trenes descarrilando en el mismo arcén a punto de colapsar, como el hecho de juntar dos sabores tan diferentes como la pizza con la piña, o como las dos piezas de un mismo puzle que no encajan entre sí por muchas vueltas que les des en la mano. Así me sentí yo innumerables veces cuando estaba a su lado. En ese momento sólo éramos Nathaniel y yo, yo y Nathaniel, sumidos en un conjunto de auténtico caos que podría explotar en cualquier momento. Y es que, en aquellos días sólo éramos mi mal humor y sus risas, mis lágrimas y sus sonrisas, mi helado de chocolate y su dulce de leche, mi corazón partido en mil pedazos y él, dispuesto a arreglarlo. Dicen que hay amores que de alguna forma u otra te cambian la vida, y desde luego tú, Nathaniel, cambiaste la mía. Lo único que no pude llegar a comprender es el por qué decidiste coger el coche cuando ibas completamente borracho. Lo siento Nathaniel, pero esta vez me has roto el corazón.

Cuento las gotas de agua que resbalan lentamente por la ventana mientras espero que la estúpida máquina haga caso a mis peticiones y desenrosque el maldito sándwich de pavo. La boca se me hace agua cuando pruebo un inadvertido bocado y vuelvo a sentarme en la silla blanca, destartalada y gastada del hospital.

- ¿Un mal día? me sonríe una anciana de pelo nevado aparentemente minusválida de visión.

- Solo un poco- contesto fugazmente mientras me llevo otro pedazo de pan a la boca, como si pudiera juzgarme. Aquí, sentada en una insignificante silla de un puto hospital me doy cuenta de la gravedad de la situación.<< ¿Por qué lo hiciste Nathaniel?>> << ¿Por qué jugaste con tu vida de esa manera?>> << ¿Acaso te pareció divertido?>> - lloro en silencio mientras observo con atención las pequeñas mordeduras que ahora hay en el sándwich. - ¡Joder! - chillo al mismo tiempo que lo tiro en la jodida papelera, a estas alturas ya nada me entra por la boca.

- ¿Familiares del señor Collins? – inquiere una voz suave y melódica que me saca de la ensoñación como el trinar de los pájaros.

Cuando la doctora llamó a los familiares de Nathaniel para que entrasen a verle, el alma se me cayó a los pies. Aun habiendo sufrido un accidente parecía ser que su familia seguía sin querer verle. Ahora que me detenía a pensarlo, tampoco me sorprendía, tanto a sus padres como a los míos nunca les hemos importando una mierda, supongo que es lo que tenía vivir dependiendo únicamente de la droga y el alcohol.


La doctora me acompaña a su habitación cuando le veo. Tiene toda la cara magullada, moratones bastante feos que se curarán en un par días, y la peor de todas, un traumatismo craneoencefálico que le obligará a empezar una nueva vida. Cuando despierte no se acordará de mí, ni de la historia de amor que casi empezamos. Será como empezar una historia desde cero, una nueva página en blanco. Siento como las lágrimas caen a trompicones de mis pupilas bañándome de agua toda la mejilla.

-Lo siento muchísimo Nathaniel-siento como las palabras se me retienen en la garganta impidiéndome seguir. - ¡Te quiero! - chilla mi subconsciente que es incapaz de pronunciar esas palabras que durante tanto tiempo me había costado admitir. No digo nada, por el contrario, deslizo su piel sobre la mía y me despido besándole los labios una última vez más.

Me levanto y retrocedo, me dirijo a la puerta con la cabeza cabizbaja y la mirada perdida. Respiro hondo, hincho de aire los pulmones y giro el pestillo.

- ¿Samantha? – escucho escrutar a una voz masculina que hace que se me hiele el corazón. 

-------------------------------------

¡Holaa de nuevoo! ¿Qué os ha parecido este primer capítulo?  Contadme vuestras sensaciones en la caja de comentarios :)

De ahora en adelante nos veremos todos los domingos con nueva actualización de capítulo. Preparaos porque Samantha y Nathaniel están dispuestos a ganarse el corazón de sus lectores.

Os leo entre líneas❤️

Judith.


SI NOS VOLVIÉRAMOS A CONOCERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora