De pronto mientras ibas conmigo te toqué y se detuvo mi vida: frente a mis ojos estabas, reinándome, y reinas. Como hoguera en los bosques el fuego es tu reino.
Pablo Neruda
Vengo aquí sin expectativas, solo para profesar, ahora que estoy en libertad de hacerlo, que mi corazón es y siempre será tuyo.
Jane Austen