Cap. 4 Recuerdos... ¿malos?

235 28 27
                                    


Park Jimin

Nos quedamos un poco más de tiempo jugando en el bosque... Realmente no se lo que le pasó a Jin después de ver al venado, está como... En ¿Shock? Realmente no lo sé, es como si se hubiera ido muy lejos, como si su cuerpo estuviera aquí, pero su mente no.

Tae y yo seguimos jugando, hasta que se oscureció, nos teníamos que ir, teníamos que estar arriba, de nuevo en el aburrido lugar, en dónde el deber llama.

Subimos, no pudimos sacar a Jin de sus pensamientos pero al menos lo pudimos llevar.

- Tae Tae, ¿Sabes que le pasa a Jin hyung? - Lo voltee a ver atentamente y preocupado por el mayor.

- No - Alzó sus hombros inocente.

- C-chicos, m-me tengo que ir... - Al fin hablo el mayor, tartamudeando y aún en otro lado.

- Te llevamos Jinnie - Hable preocupado, se veía tan... no lo sé, es difícil describirlo.

-N-no, e-estoy bien c-chicos -

Tae alzó los hombros y el mayor comenzó a caminar hacia su casa, derecho... sin un paso a otro lado, estaba perdido, realmente me preocupaba esto, ¿Qué está pasando?, ¿Acaso... fue por el venado?

Kim Seokjin

¿Es verdad lo que estoy viendo?... ¿Nam? ¿Eres tú?.... Me quedé estático, en shock...

Comencé a acordarme de todo, mis pecados... Mis escapadas, todo... Pero él no era Nam, era otra persona, pero del mismo lado... Del infierno.

|- FLASHBACK|-|- 6 años antes -|-|-|

Tenía la maravillosa edad de 17 años, juventud, un poco de rebeldía, aunque no debería de ser, pero la había, era uno de los elegidos... Por Dios, para ser su mano derecha, para ser alguien de respeto y privilegios, si se puede decir así. Realmente yo no me sentía para nada bien con eso, nunca lo quise, pero... Mi madre me obligó, pero de verdad no quisiera hacerlo.

Aún nos dejaban salir, ya saben, a la tierra. Salí, jugando, paseando por el bosque, me perdí, pero no importa, igual seguiré conociendo... Vi a alguien, era apuesto, era de tez moreno claro como canela... Me acerqué.

- Disculpe - Toque sutilmente dos veces su hombro.

- ¿Dime? - Volteo y sonrió un poco de lado, haciendo que se notara uno de sus oyuelos...

WOOOW, quedé embabucado, aunque no sea gay y esas cosas del diablo, debo aceptar que es guapo, al cabo reconocer, no es malo.

- E-eh... Me puede decir como regresar al pueblo... Bueno, cerca del pueblo - Cabe mencionar que nosotros los Ángeles no podemos esconder nuestras alas, así que me sonroje por eso.

- Mmm... Veo que estas ¿disfrazado? o... ¿ERES UN ÁNGEL? - Dijo sorprendido.

- Em... Algo así - lo vi a los ojos... Esto no es normal, es... un... ¿demonio? abrí mis ojos sorprendido, comencé a dar pasos hacia atrás... No sabía lo que me podía hacer.

- ¿Pasa algo? - Dijo muy amable, si no fuera por sus ojos... no pensaría que es uno. - Oh, ya veo, te diste cuenta, ¿no? - Dejo de esconder sus alas negras... eran como rojizas a la vez.... - No soy como me pintan allá arriba.

- N-no puedo e-estar aquí, no puedo hablar contigo... - Dije muy nervioso, me tropecé con una rama - E-eh... No me hagas nada, por favor... - Empecé a suplicar sabía que me haría algo, nos lo han dicho en clases, ¿me comerá?, ¿me llevara al infierno para secuestrarme?, ¿me va a matar? ¡¡¡DIOS AYÚDAME!!! Lloré...

Angeles y demonios YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora