Shoot's y Drabbles Marvel.

IronWidow

ADVERTENCIA: CONTENIDO +18 DESPUÉS NO DIGAN QUE NO LES ADVERTÍ

Los gemidos se escuchaban por la habitación, mientras que dos cuerpos se comenzaban a conocer.

Él abajo, ella montada sobre él, sus caderas se movían sin parar mientras que Anthony recorría con las yemas de sus dedos la piel desnudo de las piernas de Natasha.

—Me haces sentir una mujer peligrosa
—Lo eres, preciosa.

Sus besos bajaron por el cuello de la chica hasta llegar al pecho de Nat, sus senos eran perfecto, redondos tenían el tamaño perfecto para que pudiesen acomodarse en la palma de su mano, su boca buscó el pezón de la chica para empezar a juguetear con él, sentía como Natasha lentamente comenzaba mojarse.

—Tony, Tony.
—Sigue gimiendo así preciosa.

Murmuró el castaño cuando se separó de su pezón el cual ahora estaba rosado en hinchado, lamió su labio inferior para dejar un beso en aquel botón.

Su mano bajo para acariciar sobre la pantaleta aquel punto heterogéneo de Nat, la chica se movió contra su mano buscando algún roce.

—Si lo vas hacer, hazlo ahora.
—Tranquila, araña, tenemos toda la noche.

Dos dedos se metieron dentro de aquel sagrado lugar, Tony gimió de gusto, Nat estaba lubricandose en aquel momento.

—¿Te gusta? -preguntó
—Me gustaría hacer otra cosa.

La pelirroja bajó besando cada rincón del pecho del castaño hasta llegar al lugar que quería, su boxer apretaba y se podía fijar que por el borde ya se mostraba un poco de aquella cabeza rosada, su boca se hizo agua.

—Ve a buscarlo, te quiere tener
—Y me tendrá

Con sus dientes Nat bajó aquellos boxers negros y sonrió cuando el miembro de Tony rebotó un poco al ser sacado de su encierro, con su boca acarició la piel de aquel falo sin meterlo aún en su boca, Tony gimió.

—Oh pequeña traviesa
—Ssh, jefe, yo estoy haciendo solo mi trabajo

Tomó con la diestra el miembro para empezar a masturbarlo lentamente mientras miraba a Anthony.

El genio estaba con los ojos un poco más oscuros por la excitación mientras miraba a Nat quien ahora ya comenzaba hacerle una exquisita mamada.

En la habitación solo se escuchaban los gruñidos y los sonidos obscenos que Nat hacia al chupar el miembro de Tony, como si para ella fuese una paleta más.

El castaño al no querer correrse en la bonita boca de la risa la separó de su miembro y en instantes la tuvo nuevamente ahorcadas sobre él, subió su falda, corrió la pantaleta que Nat tenía y sonrió

—Uso pastillas, no uses condón.
—Entendido, mi sexy secretaria.

Era una faena lujuriosa, gemidos, gruñidos, pequeños gritos de placer salían de aquel cuarto, Nat descubrió porque Tony Stark era llamado Playboy cuando la hizo correrse en un delicioso sexo oral.

Tony Stark entendió porque aquella araña era peligrosa cuando lo hizo tocar el cielo en aquellas penetraciones duras.

Mientras que Natasha tenía rojas sus nalgas por los apretones y nalgadas que le dió el castaño, el propio Tony tenía la espalda rasguñada.

Era como si dos animales hubiesen tenido sexo en su celo.

Los dos respiraban agitadamente mientras intentaba delucir lo que pasaba. La oficina se encontraba hecha un desastre, los papeles habían sido regados por el suelo al igual que el teléfono de comunicaciones.

—¿A que hora tienes tú cita con Pepper?
—A las 21:00
—Son las 19:00

Tony asintió para colocarse nuevamente sobre la chica

—Ni se te ocurra
—La última ronda
—Tony, la última vez casi no llegas a tu cita con Potts.

Pero Anthony ya no la escuchaba puesto que ahora se encontraba abriendo las piernas de la chica, su semen aún salía de la vagina de Nat.

—Dios... Que imagen

Y sin escuchar los reclamos de la agente su lengua acarició el clitoris de la pelirroja la cual tembló.

Tony sonrió para empezar a lamer los labios de su chica mientras que dos dedos se metieron dentro para buscar ese delicioso punto de placer que tenía Nat, la cual ya gemía sobre el escritorio

—¡Oh Tony! ¡Oh, si!

Anthony lamia, chupaba, mordía lo que más podía, sus dedos se movían en forma de tijera, entrando, saliendo, círculo, tijera nuevamente causando un placentero pero doloroso sentimiento en Nat que aún no se recuperaba de su anterior orgasmo.

Tony se separó, beso y mordió los muslos de Nat quién acariciaba sus propios pechos buscando una indulgencia a su pecado. Tony sonrió, nuevamente volvió a chupar el clitoris de Nat la cual tembló, la sintió moverse e intentar agarrarse de algo, sabía su orgasmo próximo y aquello lo volvió loco, su esencia mezclada con la de Nat lo volvía como un animal.

Por ello comenzó a mover sus dedos más rápidos y a lamer con más detalle aquel punto de Nat, ya no eran gemidos ahora gritos de la chica hasta que Tony rozó el punto G y saco sus dedos rápidamente puesto que Natasha había alcanzado su propio orgasmo nuevamente.

Dios, aquello era tan espectacular, ver a la propia viuda negra desparramada sobre su escritorio en su segundo orgasmo y aún abierta de piernas solo para él

Natasha lo miraba con una sonrisa lasciva de satisfacción. Habían pasado cerca de 7 años desde que se conocieron y aún seguían en aquello.

Y a pesar de que Tony pronto se casarían con Pepper y que ella era pudo ser una fugitiva de la ley aquello no iba a terminar tan pronto.

Porque en 7 años nadie había descubierto su gran secreto y sabían que tampoco lo descubrirían, por fuera podían ser los peores enemigos, pero dentro de 4 paredes eran dos animales intentando satisfacer su deseo sexual.