unica parte

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↔22:25↔

-Mariana, no creo que sea buena idea que vayas a ese bar- decía mi madre mientras yo me ponía los zapatos- ya sabes que Orlando en estos momentos no es muy seguro.

-Ay basta mamá, no es como si un loco fuese a entrar súper armado y me fuese a matar- solté una pequeña risa- voy a estar bien- tomé su mano.

Creo que la entiendo un poco porque días antes habían asesinado a una cantante aquí mismo en Orlando, pero yo de verdad quería ir al bar.

Mi mamá me miraba con preocupación, yo sólo le sonreía para que no se preocupara más.

Unos minutos después, alguien tocó el timbre; era Calle, daniela.

-Uh, te ves muy bien- me halagó. Le di un golpe en el hombro- bueno si me pegaste porque dije que te ves muy bien, no me quiero imaginar la golpiza que me hubieras dado si te hubiese dicho lo contrario- reí.

-Eres una tonta, ¿sabes?- acerqué mi mano para apoyarla en su hombro pero ella se alejó.

-No, ya no confío en ti- entrecerró los ojos.

-Hey mamá, quita esa cara. En serio vamos a estar bien- apreté sus mejillas, ella sonrió- ¿lo ves? Sonriendo te ves mucho más bonita.

Me abrazó muy fuerte.

Esto se siente raro, es como si me estuviese despidiendo de ella para siempre, como si nunca más la fuese a ver pero realmente voy a regresar en unas horas. No le dije mi presentimiento a Calle para que no se sintiera en "alerta" todo el tiempo.

-Igual vas a ir aunque te diga que no puedes- dijo en un suspiro.

-Te propongo algo- aún no la soltaba- teníamos pensado regresar hasta que el bar cerrara pero podemos hacerlo a las 2 am, ¿aceptas?- ahora sí me separé, yo elevé mi ceja para convencerla. Asintió pero claramente no quería hacerlo.

-Cuídate mucho, Mariana- puso una mano en mi mejilla- también tú, Calle- volteó hacia mi amiga.

-Por supuesto, señora Hinojosa - sonrió ampliamente, había emoción en ella- prometemos regresar a las 2 am pero no prometemos regresar sobrias- mi mamá rió levemente.

-Me conformo con que estén vivas y a salvo- se acercó a ambas e hicimos abrazo grupal.

-Te amo, mamá- susurré.

-Yo también te amo, Mariana.

-Te amo, Calle- fruncí el ceño al escuchar a Dinah hablando sola- yo también te amo, Calle.

-¿Te encuentras bien?- pregunté entre risas.

-Oh claro pero como nadie me decía te amo, pues me lo dije a mí misma- se encogió de hombros.

-Te amo, Calle- dije sonriendo.

-Gracias, Mariana- guiñó un ojo.

-Bueno chicas, abríguense por lo menos ya que no me van a hacer caso- dijo mi mamá.

-Sip. Adiós- besé su mejilla, tomé la mano de Calle y salimos casi corriendo de casa.

↔23:18↔

-¡Mistica, voy al baño, ya regreso!- Calle gritó porque la música del bar estaba muy alta.

-¡De acuerdo!- también grité.

Bien quizás debí acompañarla porque ahora estoy sola sentada en la barra con un vaso de alcohol en la mano estando muy incómoda.

-Hey- una chica saludó mientras se sentaba a un lado mío.

orlando - fercha y mariana Donde viven las historias. Descúbrelo ahora