"Fué una coincidencia..."

CAPITULO 17

CAPITULO 17: hasta pronto.

Un día como cualquier otro, fue cuando mikaela geales se fue de japón para no volver dentro de mucho tiempo, no se sabia cuanto permanecería en Rusia, toda la familia se iría al país natal donde la mayoría de esa familia estaba. Pero antes, debía haber una despedida...

Era tarde cuando los geales dejaron vacía la mansión, todo estaba por ser transportado, algunas pertenencias de uso diario se irían en jet privado, el cual se irían ellos. Estos días el cielo daba señales de que llovería fuerte, pero no fue hasta ahora que caería un mar de gotas.

Mikaela estaba derrotado, había llorado, había hecho berrinches, se había intentado lanzar por la ventana, de todo para salir de aquel cuarto esperando a reunirse con su chico favorito. Pero ya estaba dándose vencido, sus manos eran fuertes, pero su corazón también era débil como cualquiera, aun que quisiese pelear, sabia que solo era un adolescente perdiendo la batalla con sus padres. Se odiaba por ser tan débil, alguna vez prometió hacerse fuerte y ganar las batallas,en algún momento lo fue, hasta que se enamoro de aquel muchacho de ojos brillantes, yuu.

"No quiero irme sin verlo una vez mas, por favor" miro arriba y solo se encontró con los arboles tapando el carente resplandor del sol. Se hizo mas tarde y los preparativos estaban hechos, pero mikaela no se iría sin ver a yuu, se escapó y perdió de vista a sus padres, burló a algunos guardias y corrió las frías calles sin importarle nada, hasta que no pudiera mas y jadeando continuo. ¡Bingo! dio con la residencia Ichinose, las luces del lugar parecían lamparas gigantes ante sus ojos. Halló una manera de saltar el muro de delimitaba la casona. Cuando aterrizo y parecía que lo único que sentía era el inmenso dolor en la rodilla por haber caído desde tan alto, apareció lo que había buscado. El cuarto de yuu, realmente estaba viendo la ventana del segundo piso abierta, pero sabia que era de yuu meramente por que alcanzaba a ver unas cuantas cosas del azabache.

Ahora la pregunta era... ¿como trepar hasta ahí arriba? bueno, se vio interrumpido por que mientras miraba la ventana alguien se acerco a cerrarla, apenas la persona miro abajo para ver, la acción se suspendió, ¡era yuu! estaba ahí, mirándolo incrédulo y con las palabras atragantadas, con los ojos hinchados y el viento moviendo su brilloso cabello ¡era el!

Solo Dios sabe cuanto tiempo se paro su corazón y cuanto tardo en que su sangre llegara a las mejillas. Solo el sabe como mikaela alcanzo a llegar hasta su ventana buscando verle mas de cerca cual romeo, si que esto parece una novela de esos tiempos.

— ¡Mika! ¡que haces aquí...!—lo tomo del brazo y le ayudo a subir—pensé que...no te vería nunca mas—lo abrazo fuerte y lloro en su espalda.

—yuu-chan...—lo apego mas a el—estoy aquí para verte.

—pero tus padres deben estar buscándote, ¡guren te vera y...!

—no puedo irme sin verte, yuu-chan.

Dijo su nombre una vez mas y a continuación, el azabache lo siguió abrazando como si no fuera suficiente el espacio, siguieron unos segundos así hasta que se calmaron un poco.

—yuu-chan, realmente no quiero irme...

—Yo tampoco quiero que te vayas, incluso me encerraron aquí para que no pudiera verte! ese idiota de Guren...

Mikaela rió un poco y se limpio unas lagrimas, también paso su dedo para quitar algunas gotas en los ojos de yuichiro. El gesto le pareció vergonzoso, pero tierno.

—A mi también me hicieron eso, pero me escape para verte antes de irme.

—te iras...