Lo Olvide (SuperBat)

PARTE XXVIII

Sus ojos seguían el flujo del líquido carmesí, que fluía del corte sobre su brazo. Dolor y el ardor de la piel lacerada y la sangre pérdida. Prefería sentir el escozor en su piel que en su interior. Con un suspiro de satisfacción, al saberse liberado, aunque sea un poco, de ese dolor acumulado que estaba en su interior.

Tenía apenas 8, cuando empezó a sentirse solo un objeto más de la mansión. Solo una mente inocente, que se daba cuenta que para sus padres no era nada, solo un deber más. Fueron meses en los que estuvo en la soledad de la gran casa, el lugar en el que sufría día a día el maltrato de los empleados, que iban solo para atenderlo, y sí, siquiera osaba quejarse le iba mal. Temía al hombre que le había quitado su inocencia, y le había llevado a recurrir a esos actos, temía quedarse solo, porque este iría a dañarlo. Empezó a desarrollar el pánico al contacto físico, en su mente atormentada todos querían dañarlo.

Una, dos, tres... Cuantas veces más debía soportar eso, para que sus padres notaran su sufrimiento? Cuánto debía gritar por su ayuda para que fueran en su rescaté? Cuánto debía llorar para que se fijarán en sus ojos sin brilló? En las marcas de su cuerpo...

No quería regresar a casa, ya no... Ese lugar en el que solo había dolor y soledad, dónde había demonios que le susurraban sus mayores temores.

Oíste de Batman, el volvió a salir y su compañero Robin - solo cuando escuchaba del guardián de la ciudad maldita, se permitió tener una esperanza, de que este un día lo salvaría, porque sus padres jamás lo harían, y los odio por eso, por el hecho de haberlo puesto en el mundo pero no ser lo suficientemente responsables como para hacerse cargo. Esa tarde, se planeó huir del chófer que esperaba por él y caminar por las calles, frías y sombrías, buscaría a Batman y le pediría ayuda, lamentablemente eso nunca pasó.

Poco a poco la luz e inocencia que una vez hubo en él, murió.

Fue cuando se unió a The Dark Knight  que creyó que todo terminaría, su dolor y soledad. Sí le dolió lo de sus padres?, No, dentro de él sabía que se lo merecían, un poco menos de basura en el mundo, nada que fuera una gran pérdida.

Bruce fue un gran alivio para su corazón y alma herida, el fue el padre y amigo que nunca tuvo, porque apesar de no ser tan expresivo y afectuoso, siempre le dio su atención, si era para regañarlo, corregirlo e incluso para pasar con suavidad su mano sobre su cabello. Alfred fue lo mejor para él, siendo un niño, siempre tuvo problemas para expresar su opinión, por sus anteriores experiencias, pero Alfred siempre pregunto por su parecer, por sus gustos y agradeció haber sido aceptado en un lugar así. Richard, fue el hermano que siempre deseo, lo cuidaba y protegía, se preocupaba por su bienestar. Al fin su alma herida había encontrado consuelo en ese inmenso lugar.

Y luego, como si el mundo decidiera que había vivido lo suficientemente tranquilo, decidió quitarle todo. Bruce desapareció y fue dado por muerto, Richard lo remplazo, el hermano que tanto amó,  por el mocoso que lo odiaba, Alfred solo ayudo lo suficiente como le permitía su propio luto por la partida de Bruce.

Porque el mundo era tan cruel? Porque había tenido que nacer, si era para vivir de esa manera...

Aún podía recordar la asquerosa sensación, cada vez que lo recordaba las náuseas eran insoportables que lo llevaban a vaciar su estómago. Jamás se dejaría tocar de nuevo, Jamás! Ya no era ese niño inocente y asustado. Era Red Robin, el hijo de Batman y nadie volvería a tocarlo como ese maldito hombre se atrevió hacer cuando era un niño. Así que cometió su primer asesinato, la cabeza del demonio, Ra's Al Ghul, no sabía con quién se había cruzado. Éste encontró si fin en sus manos. Solo había necesitado de eso para que Talía y sus asesinos estuvieran a su servicio. Fue allí también que se encontró con a The Arkham Knight , que resultó ser el Robin asesinado. Encontró un nuevo hermano y un compañero, que lo ayudaría a cumplir su venganza.