W.H.I.T.E

1K 121 43
                                    

Soy solo una silueta sobre la pared, la veo alargada entre el pasillo por donde camino con maleta en mano.
-¿Con que eso es todo?- el hombre de largo cabello se encontraba estorbando la salida- Ya te dije que sí- lo mire con odio y reciprocidad-, ahora dejame salir antes de que cambie de opinión. - dio un paso atrás para darme paso, sentía su mirada sobre mi espalda y deje la maleta en la cajuela del auto blanco, mi mano se aferrada a esa última maleta, era lo último, lo último que podía sentir de él - Dejalo de una vez- oi su voz sin emoción- recuerda que haces lo correcto, es la vida de Killua la que esta juego de todas formas- deje la maleta y cerré la puerta del auto, mi aliento se veía por el frío que aunque el sol estuviera acompañadonos no se sentía su calor- Recuerda lo que harás y no falles o papá no dudará un segundo- el de cabellera larga se apartó de mi vista subiendo al automóvil y así como llegó esa mañana se fue hoy al medio día.

Yo me pare frente a la puerta de entrada viendo a su interior tan oscuro, frío y vacío como se encontraba mi alma, recorrí los pasillos de la pequeña casa, ido por lo que tendría que hacer dentro de unas horas llegue a la recámara. Sentado en la cama, aun pude ver algunas manchas de sangre en el alfombrado suelo, sus ropas y pertenencias que llenaban la casa ya no se encontraban, el armario aun abierto dejaba ver la ausencia de las prendas que entregue a su hermano mayor. Era lo correcto ¿verdad? Es lo correcto, me repetía al guardar mis cosas en cajas y maletas, mientras las subía a la camioneta, pronto debía abandonar la casa "Es lo correcto" Repetía mi cabeza, yo ya estando encima del auto con todas mis cosas guardadas dentro, veía por el parabrisas la pequeña casa de madera que ambos rentamos en primavera, ahora cubierta de nieve. Mis manos apretaban con fuerza el volante y mis ojos con dolor querían soltar a llorar de frustración pero las lágrimas no salían porque ya no valían la pena seguir lamentado la situación. Arranque el auto y me dirigí a mi tumba.

Conducía despacio pero seguro al hospital. Estacione el auto y camine hasta la entrada saltando al personal del hospital, solo cuidando me de que Leorio no me viera, tenia exactamente 30 minutos para acabar con todo y salir huyendo como el cobarde que soy.
Con la respiración agitada me encontraba frente a su puerta, lo sé porque podía ver su cuerpo extendido en la cama durmiendo, tome la manija y empuje suavemente la puerta y con la misma suaviza cerré detrás de mí.

Apriete mis dientes al verlo tan tranquilo, no quería despertarlo pero debía hacerlo- Killua- mí voz salió rasposa en susurro pero tenia que despertar- Killua- alce mí voz y lo tome de sus mejillas- despierta necesito que despiertes.- poco a poco ví sus ojos abrirse- ¿Gon?- miro mis ojos y sonrió alegre como me partía el corazón, no deseaba apartar mí mirada de sus ojos azules pero debía apurarme, aparte mí vista y mí tacto de su rostro dejándolo confundido- ¿Ocurrio algo Gon? - mordió mí labio aparte mí vista al suelo para tomar el valor que me hacia falta - Se acabó- soñe lo más frío que pude-, ya no te soportó- no quería verlo, en serio no quería- ¿Qué? ¿A que te refieres?- su voz sonaba burlona pero se notaba esa quebrar en momentos- Ya lo dije, me aburres, estoy arto. Eres débil, una simple muñeca que se rompe con facilidad. Yo necesito a alguien que me siga el ritmo no un pedazo de porcelana blanco.
-¿QUE MIERDAS TE PASA? TU ERES ÉL QUE ENLOQUECE CADA VEZ QUE TENEMOS SEXO POR TU CULPA ESTOY AQUÍ
-ASÍ PUES YO NO SOY ÉL QUE SE EXITA Y PIDE MÁS
-¿ACASO QUIERES TERMINAR? ¿ESO ES LO QUE QUIERES?
-SIII, TÚ ME FASTIDIAS DESDE HACE MUCHO PERO NO TE LO HABÍA DICHO PORQUE SÍ NO TE SUICIDARÍAS
- ¿POR TI? NUNCA. ASÍ QUE VETE MUCHO A LA MIERDA
-BIEN ME LARGO
-VETE AL DIABLO IDIOTA

Azote la puerta del dormitorio y afuera pude ver a los padres de killua, como me dijo Illumi ellos oirán la discusión y nuestra ruptura, dando a entender que killua volvería a hacer él de antes, mientras tanto puede oir pequeños sollozos dentro de la habitación, mis ganas de correr y abrazarlo se apoderaban de mí pero debía seguir él plan y ordene a mis piernas correr lejos de allí dejando solos a los padres de killua sin una explicación aunque no hacia falta una.

Cuando llegue al auto y subí en él, golpee mí frente contra el volante apretando el colapso, estuve unos momentos así antes arrancar e irme "Maldito idiota" Me repetía todo el camino.

Abusó (GonkilluGon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora