Cuando alguien nos ofende nuestra primera reacción es alejarnos de esa persona, pero debemos de evaluar calmadamente si vale la pena dejar morir una amistad, un hogar, una relación cualquiera a cambio de tener que vencer nuestro orgullo y tomar la iniciativa de acercarnos nuevamente.
Pero se que es difícil dar ese primer paso en busca del acercamiento que tanto deseamos. Casi siempre décimos "Si, le perdonó, pero que venga el primero a decírmelo". Son muchos los casos de separación por el orgullo, porque ninguno tuvo el valor de dar el primer paso por miedo al rechazo de la otra persona.
Seamos siempre quién de el primer paso y si después de hacerlo la otra persona sigue en la misma actitud a nosotros nos quedará la satisfacción de que hicimos lo correcto y lo necesario para arreglar las cosas, pero si al contrario es la otra persona la que se nos acerca dejemos a un lado el orgullo y brindemos el perdón, que quién busca la reconciliación no se rebaja sino por el Consejo enaltece ante Dios, ante sí mismo y ante sus semejantes.
Porqué todos merecemos una segunda oportunidad.
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Un Pensamiento Más
RomanceAquí podrás encontrar frases de todo tipo, para tu día a día, espero te gusten.