Capitulo 1

31 3 0
                                    

Blanco, blanco es lo primero que veo cuando me despierto, ya que el techo de mi habitación es de ese color. Me pregunto que sentirá un ciego diariamente al despertar y no poder observar algo tan simple cómo el color blanco.

Después de salir de mi viaje astral mientras despertaba, salgo de la cama y entró al baño que conecta con mi habitación. Me detengo en el espejo y veo que tengo el pelo revuelto por dormir, mi pecho y mi cara tienen marcas rojisas de las sábanas ya que me gusta dormir sin camiseta mayormente. Me baño y me visto con unos jeans oscuros, una camiseta de Ramones negra, mis vans negros y me revuelvo un poco el pelo. Tomo mi mochila y salgo de mi habitación.

Mientras bajo las escaleras, llega hasta mi un delicioso olor a tocino recién hecho. Mi madre está de espaldas vestida con uno de sus trajes habituales de saco y falda negra, con el pelo recojido ya que está friendo el tocino. Aprovecho al pasar mi mano por su vientre y beso su cabeza.

-Buenos días hermosa.- me aparto y puedo ver cómo me sonríe al voltearse hacia mi.
No
- Buenos días Alister.- viene hacia mi con un plato con tocino, huevos, pan y un vaso de jugo.

-Si sigues diciéndome hermosa me lo voy a creer.

- ¿Cómo quieres que no lo haga si eres la mujer más bella que hay?.

Y es verdad. A penas tienes 39 años y se ve muy  hermosa, me atrevo a decir que igual que en las fotos de su juventud, aunque no es precisamente por eso que lo dice. Tiene una pequeña marca en la mejilla izquierda, por una vez que la asaltaron apenas en su adolescencia. Pero para mi, esa marca sólo la hace ver más preciosa aún

-No sé que hice para merecerte-dice ella mientras se sienta a comer.

- Lo sé Raquel, tu hijo es perfecto.-digo yo para sacarle una sonrisa.

- y algo fanfarrón también.- nos reímos y charlamos de cosas triviales mientras terminamos de comer.

-Ya me voy-digo mientras me levanto de la mesa.

-Te dejaré comida en el micro para que la calientes. Trabajo hasta tarde hoy, tengo un caso interesante.

Mientras entro a mi ford mustang de 1964, lo observo;Es mi orgullo. Trabajé para comprarlo, a pesar de que económicamente a mi y a mi madre nos va bien, puesto que ella es abogada y gana bien, además que yo desde los catorce años me las he ingeniado para conseguir trabajos de medio tiempo. Sigo pagando un pequeño préstamo que tomé para completar con el pago del auto.

****
Llego a la escuela en unos pocos minutos, salgo del auto y al primero que veo en mi estacionamiento es mi amigo Sack, se hacerca a mi y me saluda:

-¿Que hay Ali?

- Te dije que no me llames Ali.

-Como digas Ali. Te fuiste temprano de la fiesta el sábado.

-Si, me aburrí y me fuí ya que cierta persona me dejó por un lindo trasero.

-Oww estás celoso, no te pongas así que sigues siendo mi castaño favorito.

-Ya sé que te mueres por mí, pero no te humilles tanto- digo sacándole una risa burlona, mientras caminamos por el pasillo.

Entramos al salón y Sack se detuvo a hablar con una chica.

-Rubios!- suspiré y me senté en el último lugar cómo siempre para observar todo y no ser observado.
El profesor Charles entró al salón con su maletín y los demás chicos se sentaron.

-Buenos días estudiantes, es un nuevo año, su último de hecho. Espero y den todo de si mismos. Empecemos la class....

No terminó, porque sonaron unos toques en la puerta.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 03, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Secretos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora