Despúes de mi error, todos me veian como el malo de la historia, no volví a ser aceptado en ningún equipo del salón, y sinceramente, no queria volver a jugar, tanto que me encerré en mi mundo, pensando que si jugaba de nuevo, el mismo error llegaria a mi mente, perdí valor para mirarlos a la cara, porque se burlaban y no me aceptaban en ningún grupo.
En mi quinto grado 2 nuevos estudiantes ingresaron: Kevin y Camilo. Kevin era delgado pero fuerte, a la vez grosero y altanero, Camilo era obeso, alto y burlón. Todos los del salón les habian contado de mi error y a mí me daba verguenza, pero la verdad, no me importaba, me estaba acostumbrando a su crueldad e indiferencia, hasta que llegó el día que empezaron las muestras de violencia.
Camilo empezaba a robarse mis boligrafos, arrancar cosas de mi cuaderno y escribir cosas desagradables en el mismo, como insultar a mi madre, me estaba cansando de eso, cuando supe que era el, lo acusé con nuestra profesora, pensaba que no lo volveria a hacer, pero como dicen popularmente, lo prohibido es tentación, y parece que a el lo tentó seguir molestando mi integridad; hasta que un día exploté, -tu madre es una gorda estupida y fea- grité con rabia. también dije palabras que nunca creí que nunca saldrian de mi boca, no se las mencionaré pero les digo que son las conocidas y populares -malas palabras- hasta le arrojé mis boligrafos en la cara, más una cachetada. El era más grande y tenia más fuerza, se levantó de su asiento, y me empujó; recuerdo el dolor de la caida, caí entre muchas sillas. - ¡IDIOTA IDIOTA IDIOTA! -Exclamaron todos con risas en su rostro.
Camilo en menos de un año, habia hecho más amigos que yo en cinco, me cuestionaba a cerca de eso y llegué a la conclusión que ellos querian algo de que burlarse, en ese caso, yo fuí el objetivo de sus burlas; no volví a responder con violencia, no era mi modo de resolver las cosas, intentaba hablar con el, yo sé que sí;pero solo se burlaba, me sentia mal, sin ganas de mirarlo a los ojos, fuí sometido por su fuerza, tanto que hablé con mis padres y pusieron una queja, pero solo empeoró las cosas, ya no era solo camino, si no muchos más empezaron a burlarse y a golpearme, empujarme y otras acciones que afectaban mi integridad fisica y emocional.
Pasaron 2 años, en septimo grado todo era igual, nada cambiaba, excepto que los golpes eran más fuertes.... mis calificaciones empezaron a bajar drasticamente, lo unico que tenia en común con algunas personas, eran las malas notas, pero ni eso hacia que nos entendiesemos, para sentarme a comer tranquilo debia irme a otro patio mientras ellos jugaban entre sí. Si yo intentaba unirmeles, me decian que pelease con cualquiera para que me dejaran, yo por querer sentirme bien conmigo mismo y hacerles ver que si podia ser buen amigo, accedia a pelear, pero siempre perdía y terminaba raspado, sucio y sudado. La violencia se habia convertido..... en mi borde del abismo.
ESTÁS LEYENDO
EL ABISMO
Teen FictionSoy Naffer, un joven de actualmente 19 años de edad de Barranquilla, Colombia que ha vivido una diferente clase de sucesos que han forjado una forma de pensar, actuar y sentir. Lo que haré en este escrito es redactar mi historia de vida y muchos d...