Capítulo 1: Pensamientos

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-Ah, hola, cómo están?- Dijo un chico peliblanco que vestía la legendaria trusa de la victoria, mirando hacia el lector.

-No los vi entrar- Dijo mientras se ponía una camiseta naranja.

-A comer hijo!- Gritó el padre desde la cocina, indicando que el desayuna estaba listo.

Rápidamente Lincoln bajó las escaleras, no quería quedarse sin comer como la semana pasada, pero resbalo y cayó de cara a las escaleras.

-Otra vez esas malditas escaleras nuevas?!!- Dijo en su mente.

-Al parecer tienes muchas ganas de comer hermanito!!- Dijo Luan mientras se carcajeaba de la caída de su hermano, mientras Charles Jr. le lamía la cara.

Exacto Charles Jr., es lo que tienen los seres vivos, nacen crecen y mueren, pero en el lecho de muerte de Charles Lisa lo tomó en brazos y lo llevó a su laboratorio, regresó con el pequeño cuerpo de Charles en sus manos, y con un pequeño cachorro detrás de ella, nadie sabía exactamente que había pasado ahí dentro, pero de igual manera recibió el mejor funeral que Lucy hubiese podido hacer.

-Guau guaf- Dijo Charles Jr.

Lucy lo veía desde la oscura esquina de la habitación, tratando de aguantar las risas que se le hubieran salido.

-Hola Lucy- Dijo Lincoln esbozando una sonrisa, pero cuando dejó de hablar Lucy ya había desaparecido, como de costumbre.

Así que Lincoln tomó asiento para desayunar e ir a la escuela, como todos las mañanas pensaba en amada, ya que al día siguente la visitaría en la ciudad, aunque en su interior sentía que Ronnie Anne ya estaba cansada de él, él no perdía por nada la fé y al mismo tiempo se hacía ilusiones de su futuro con ella.

En la escuela

Lincoln caminaba alegremente a su salón y saludaba a sus mejores amigos Clyde, Zach, Rusty y Stella, Liam había tenido que dejar sus estudios para cuidar la granja familiar, pero aún mantenían el contacto con él.

-¿Qué pasó?- Preguntó Clyde al mismo tiempo que las chocaba con su amigo.

-Mañana por fin podré ver a Ronnie Anne!!- Dijo Lincoln emocionado por su cita con ella.

 -Ah... sobre eso quería hablar contigo Lincoln- Dijo Clyde con un tono algo nervioso.

-Ahora no Clyde ya van a empezar las clases, lo que me tengas que decir tendrá que esperar- le dijo el peliblanco con una sonrisa a su mejor amigo.

-Bueno...- Clyde se sentía triste por la confesión que tenía que hacerle a su amigo pero, era necesario que lo supiera.

De regreso en casa

Lincoln había regresado de la escuela y como no tenía nada que hacer se sentó junto a su gótica hermana, le gustaba oír sus hermosos poenmas, aunque algunos hablaban sobre cosas oscuras o tristes, y a Lucy también le agradaba la compañía de Lincoln mientras realizaba sus escritos, le daban mayor inspiración que cuando él no se encontraba cerca.

-¿Qué escribes Lucy?- Preguntó con interés el chico, mientras se sentaba al lado de su hermana debajo de la sombra del árbol.

Lucy alegre de que su hermano se interesase por su trabajo, pensaba en sus sentimientos por él, pero de una forma diferente a la habitual, ella estaba plenamente segura de que amaba a su hermano, pero eso siempre había sido cierto, era su familia, como no lo iba a amar, los pensamientos de Lucy se revolvían y no podía concentrarse, sobre todo con Lincoln cerca, tendría que pensar en sus emociones, jamás había sentido algo como eso, pero tampoco había tenido ninguna relación con un chico que no fuese su hermano, excepto Rocky, pero Lucy no quería pensar en eso ahora, estaba lo suficientemente inspirada como para continuar con sus versos.

Corazones Distintos (Lucycoln)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora