Girls/Girls/Boys ┊¿Bombwin?

Capítulo dos.

Le habían asignado limpiar el salones en vez de llevarlo a detención. No tenía sentido, hubiera preferido la detención, ni que fuera un jodido criado.

Había terminado, teniendo que volver a su salón, dónde había olvidado su mochila, porque, si, nadie se había dignado a esperarlo, nisiquiera su amigo, Matías, con la excusa de que "tenía que llegar a ver su novela". El castaño era un total idiota.

Abrió la puerta, distraído, hasta que miró al salón y sorprendió a Carrie y Darwie besándose... Era un beso húmedo, lo notó porque sus lenguas se separaban después del beso.

Una sonrisa socarrona se formó en su rostro, la ironía recorría su cuerpo. Vaya que la princesita no dejaba de ser sorprendente, era una caja de Pandora.

Las chicas sentían vergüenza de haber Sido descubiertas, ambas estaban rojas. Aunque, ¿Por qué de todas las personas en Elmore debía encontrarlas Julius? Y por supuesto que el peligris no desaprovecharía esa oportunidad, tendría a la chica de rizos comiendo de su mano.

—¿Interrumpo algo?— preguntó irónico.

—No te metas en esto.— se defendió Carrie.

—Cierra la maldita boca. No es contigo con quién quiero hablar. Si me dejas hablar con tu novia, no hablaré...Por ahora.— amenazó.

—Carrie...— pero la más alta se había ido, cerrando la puerta tras ella. Dejaría que el chico de mal carácter y su novia resolvieran sus asuntos.

—Vaya, Darwie, no sabía que pateabas para el otro lado. ¿De verdad me rechazaste por ella? ¿Por una mujer?— preguntó, frustrado y enojado, pero disfrutando la situación cómo no se imaginan, por fin era el que no sufría en la situación.

—Julius, no puedes decirle a nadie de esto.— pidió la muchacha. —Ella es importante para mí.

—Oh, ¿En serio? Porque hace unas semanas era yo quién te gustaba.— dijo  Julius, acercándose a ella tomándola del mentón. —¿Quién te crees que eres?

—Yo... Lo lamento, había peleado con Carrie y estaba confundida, en serio lo siento.

Se separó de ella. —¿Y crees que todo se va a pasar con jodido "lo siento"? Prefiero verte sola que con una jodida lesbiana.— reclamó furioso, no planeaba ser suave con ella solo por ser una chica.

—J-Julius, no iniciemos una pelea, o nos enviarán a detención.

—Tu jodida detención me la paso por las pelotas. ¿Crees que me importa ir a detención una vez más? ¿Pero qué hay de ti, princesa, realmente quieres entrar a ese lugar? Porque con la mierda que eres engañando a la gente, mereces estar allí.

Esas palabras se clavaron profundo en el corazón de la chica. Nunca pensó que Julius fuera tan intenso a la hora de amar, pues tenía otros objetivos y no pensó que se centraría en el amor, se había equivocado.

Julius simplemente tomó su mochila y se fue de allí. La de tez pálida al ver que la figura masculina se marchaba de allí, simplemente entró al salón, pues sabía lo frágil que podía llegar a ser su chica. La morena había estallado en llanto, llena de culpa.

Carrie la conocía bien, no ese estúpido de Julius.

; Escribir a un Julius hijo de puta es divertido