CAPITULO 1

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Hoy lo veré en el parque de siempre, cumplimos 6 meses de estar juntos, aun no lo puedo creer, no puedo creer que él se haya fijado en mí.

Ahí esta tan atractivo como siempre, esperándome como él me dijo, me acerco a él con mi sonrisa más grande que nunca, ya lo quería ver, pero él no es el mismo, su cara seria, sus ojos ya no mostraban ese brillo que me encantaba mirar el mismo brillo que tienen los míos, ahora solo eran de un gris seco sin nada de brillo, sin el brillo del amor.

Aun así no me importo y me acerque, lo que fuera que pasara los dos lo afrontaríamos juntos.

-   ¿Qué pasa amor? Le dije levantando mi mano para acariciar su mejilla, caricia que el rechazo al correr su cara para que mi mano ni siquiera lo rosara.

-   ¿En verdad me estas preguntado eso? Tú no eres nada idiota como para no saberlo, más bien aquí el idiota fui yo.

-   Alex no sé de qué hablas en verdad explícate, yo vine aquí por nuestro aniversario de 6 meses. Dije confundida por el comportamiento de Alex él nunca me había hablado así. El solo sonrió con ironía y me vio directamente a los ojos.

-   Mira que conmovedor 6 meses, pero la verdad yo no tengo nada que celebrar, gracias a dios ya no habrá más meses que celebrar.

-   ¿Qué quieres decir con eso? mis ojos estaban empezando a llenarse de lágrimas, él no se podía referir a lo que yo había entendido.

-   Me refiero a que se terminó no hay ni habrá nunca más un nosotros, un juntos y mucho menos un juntos para siempre, a eso me refiero ¿te quedo claro ahora? Me miro desesperado.

-   ¿Qué? No puedes hablar enserio, nosotros nos amamos Alex. Ya no pude aguantar más y mis lágrimas salieron rodando sin control por mis mejillas. El me vio con tal desprecio que no lo pude creer, donde quedo todo ese amor de antes, esos por siempre.

-   ¿Enamorados, enserio? No puedo creer que seas tan cínica, pero sabes que no quiero saber nada, lo hago más fácil, yo nunca amaría a una extranjera estúpida y cualquiera como tú, seamos realistas no eres lo mejor que puedo tener.

No podía creer que él, el amor de mi vida me hubiera dicho todo eso, ahí con esas palabras me di cuenta que me habían dolido más que nada pero no se lo iba a demostrar. Limpie mis lágrimas con enojo y lo mire a los ojos y estaba segura que ahora teníamos algo en común, en ninguna estaba ese brillo, yo no iba a amar a alguien así.

-  ¿sabes? Le dije con una sonrisa de lado. - Sea lo que haya pasado me alegro, me alegro haber conocido al verdadero Alexander, porque como tu dijiste no soy una idiota y yo nunca andaría con alguien como tú, con el verdadero tú que ya has mostrado.

Di media vuelta con la idea de salir de su vida para siempre y con el deseo de nunca más volvérmelo a encontrar, pero antes de poder alejarme lo suficiente el hablo. 

– No te hagas la fuerte, pero bueno no me importa nada sobre ti, solo recuerda que ahora estas sola aunque no creo que por mucho ya que me imagino que te buscaras a alguien monetariamente beneficiado como es tu costumbre, eso si te digo que no te quiero cerca de mi familia.

-   Lo que menos quiero es estar cerca de gente o algo que tenga que ver contigo, y no sé qué tenga que ver eso de monetariamente pero tu mentalidad ya no me puede sorprender más. Dije con un enojo sorprendente, no sabía que le pasaba y menos sobre del dinero yo nunca le pedí ni un centavo.

 Iba a darme la vuelta para ahora si definitivamente salir de su vida pero recordé el collar que él me había regalado el primer mes era un corazón con nuestra iniciales talladas, recuerdo que cuando lo vi no lo quise aceptar pero el insistió tanto que lo acepte con la condición que nunca más me regalara cosas tan caras. Así que hice lo que tenía que hacer.

-   Antes de que se me olvide esto es tuyo. Dije tomando el collar y jalándolo de mi cuello. – Has con él lo que quieras. Camine unos pasos y se lo puse en la palma de su mano, levante la cara para mirarlo por última vez y di media vuelta.

-   Ahora si adiós para siempre Alexander. Dije sin voltear a verlo.

Desperté dando un salto de la cama odiaba tener ese sueño, ya había pasado un poco más de dos años ¿porque mi subconsciente tenía que repetir ese recuerdo tanto? No era para nada divertido recordar ese día, recuerdo que llegue a mi apartamento y me tumbe a llorar, saque toda la frustración y tristeza que traía llorando como una niña pequeña, me quede todo el día viendo fotos de los dos y recordando cómo nos conocimos. Yo llegué aquí a Londres gracias a una beca de intercambio que gane con todo mi esfuerzo, siempre quise viajar y lo cumplí. Cuando llegue al colegio por primera vez me quede maravillada con el hermoso edificio, recuerdo que ahí lo conocí, ahí estaba el rodeado de gente en especial chicas fue ahí cuando nuestras miradas conectaron por primera vez y así paso el día sintiendo su mirada, cruzando una que otra mirada con el hasta que en la salida él se acercó a mí y se presentó con su perfecto acento.

-   Hola, yo soy Alexander pero puedes decirme Alex.

-   Hola, yo soy kiara. Dije tímidamente mientras yo quedaba encantada en todos los sentidos desde su profunda voz, su cabello negro que resaltaba con su tono blanco de piel y no pude pasar por alto sus hermosos ojos grises.

 Y así paso, yo supe que él tenía 19 años y que estaba estudiando derecho, así fue como me entere que la preparatoria en la cual yo estudiaría mi último año era el edificio A ya que también tenían universidad el cual era el B donde él estaba, así pasaron las horas hablando, yo le conté que tenía 17 y que venía de intercambio lo cual él ya se había dado cuenta por mi acento y así pasaron los días, las semanas hasta que él me pidió que fuera su novia y yo...

BUENO ESTE ES EL PRIMER CAPITULO ESPERO QUE LES GUSTE, Y ME ENCANTARÍA QUE COMENTARAN, QUIERO SABER QUE OPINAN DE LA NOVELA, GRACIAS!  

Nothing is EasyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora