Seo Youngho estaba en su despacho rodeado de numerosos papeles.
Como jefe de una de las empresas más importantes de Seúl, tenía una cantidad de papeleo impresionante, prácticamente vivía para poder completar todo ese trabajo.
Tenía poco tiempo para descasar y cuando llegaba el momento no podía ni hacerlo bien, la presión y ansiedad llegaba a consumirle de una manera que casi no lograba concebir el sueño.
El sonido de unos tacones acercándose activó sus sensores. Era su secretaria, Seo Dongsook.
—Señor —tocó y dejó ver su hermoso rostro adornado con gafas.
—Pase —dijo risueño.
La mujer se acercó y se sentó en frente.
—¿Qué pasa?
—Vengo a darle varios avisos —abrió su libreta y empezó a enumerar—. El señor Seoman a solicitado una cita con usted para cerrar el trato, lo hemos acordado para el viernes de la siguiente semana teniendo en cuenta lo demás. Acuérdese que el lunes hay una reunión con los jefes para el nuevo proyecto; el martes hay otra reunión para una colaboración; el miércoles a parte de la cena de empresarios, es la fecha límite para entregar todo el papeleo; el jueves ha-
Las palabras de la joven fueron interrumpidas por el grito del peli negro.
—Calla, calla, ¡he dicho que te calles! —cogió bruscamente el diario y lo golpeó fuertemente contra la estantería de al lado.
—John... —se levantó e intentó acercarse pero este se lo impidió.
—¡Déjame en paz! Lo único que quiero es descansar, no escuchar tu irritante voz diciéndome todo lo que tengo que hacer para la siguiente semana.
—Perdón por hacer mi trabajo —la castaña se puso en jarras con el ceño fruncido.
—¿Trabajo? —sonrió sarcástico—. No tienes ni puta idea de lo que es trabajar. Solo eres una simple secretaria.
Una golpe seco se oyó, dejando en silencio la habitación.
Dongsook había dado una torta a su jefe.
—No me digas que no se qué es trabajar cuando todos los días vengo y trabajo todas mis horas. No por ser una secretaria tengo menos mérito, hago casi el mismo papeleo que tú y también voy a tus reuniones; acuerdo tus citas; en muchas ocasiones he sido tu representante; y mucho más. Ahora dime, ¿tengo idea de lo que es trabajar? —el alto no abrió la boca, ni si quiera la miró—. Eso pensaba.
Sin decir más recogió su libreta y salió del despacho.
Youngho se dejó caer en el escritorio y se tiró de los pelos frustrado.
—La he cagado pero bien... Sofá, prepárate porque dormiré contigo por dos años.
...
Nada más acabar su turno, Dongsook fue al despacho de su jefe para coger todas sus pertenencias.
—Sook...
—No te equivoques, vengo a por mis cosas —se dirigió hacia el perchero pero el mayor le cogió de la mano para girarle y pegarla a su pecho—. ¿Qué haces?
—Perdóname, Sook. Lo que te he dicho no lo decía enserio. Es que estoy muy estresado, este trabajo me está matando y estoy muy cansado —abrazó a la pequeña para apoyarse en la curvatura de su cuello—. Yo te quiero mucho, y sé que trabajas mucho, perdón. Eres la mejor secretaria que podría pedir—la otra solo sonrió por su disculpa y le sujetó las mejillas para darle un tierno beso.
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Mi secretaria [Johnhyuck]
RomansaLa secretaria del señor Seo le ayuda con su estrés. .One-shot .Smut .Trans!Haechan