Un Chico Extrañamente Palido

[17] Reacciones inesperadas y "contacto" con el asesino

Capitulo #17: Reacciones inesperadas y "contacto" con el asesino.

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Lo único que nos hizo separarnos fué el sonido de la puerta principal cerrarse y el de la voz de Justine, la madre de Zac, quejándose.

Si fuera una situación normal, iría a preguntarle que le pasaba, pero claramente lo que estaba pasando no era una situación normal.

Sinceramente, no me sorprendí al notar que había sido yo la que, en teoría, lo había besado a el, y lo que si no me sorpendió fué que el lo siguió al beso como si ya hubiera habido otros anteriores.

Cuando nos separamos, noté que Zac estaba sonriéndome, lo que me hizo querer besarlo por segunda vez y parecía que Zac tenía el mismo pensamiento que yo.

Era un momento para recordar, un momento que te daba diabetes de solo imaginarlo, lastima que se escucha de la planta baja un "Zac? Estas ahí? Ya estoy en casa hijo" por parte de la madre de él, lo que nos obliga a bajar y romper con tanta dulzura.

En cuanto miro a Zac de nuevo, veo que ya no me esta sonriendo, parecía que estaba mas bien enojado, por lo que asumí que seria con su madre. Se limita a responderme con un 'Vamos' mientras comienza a bajar del techo, seguido por mi obviamente, mas confundida de lo que esperaba.

En cuanto bajamos, vemos a Justine cargando bolsas de supermercado en cada mano, y se podía notar a larga distancia que estaba enojada.

- Ahí estabas hijo, llame a la casa mas de dos veces, ¿por que no respondias?- en cuanto ve que atrás de su hijo estaba yo, cambia de expresión y agrega- Ah, bueno, perdonado solo por esta vez. Mara, hace tanto que no te veo, ¿como estas?- Y diciendo lo último entabla una conversación conmigo.

No me malinterpreten, no es que no quería hablar con la madre de Zac, pero me importaba muy poco que el super de los chinos no le permita canjear todos los puntos que tenía acumulados.

La verdad me sorprendía que haya un supermercado chino en un pueblo como Covington.

Ya es un hecho, los chinos van a dominar el mundo algún día.

Pero tenía problemas mas importantes que la dominación del mundo por parte de los chinos, y era Zac; ya que en todo momento no me miró ni una vez desde que bajamos. ¿que le pasaba? pensaba mientras la madre de él me contaba sus problemas. Yo si lo miraba, estaba confundida y si, también estaba triste. ¿Acaso se arrepintió de lo que había sucedido entre nosotros? ¿Acaso fue un error que nos hayamos besado?

Vuelvo a la realidad cuando Justine le decía a su hijo que me acompañe a mi casa, ya que ya eran las tres de la madrugada.

¿Por qué Justine fué al supermercado chino a las tres de la mañana? Solo Dios sabe.

Zac asintió al pedido de su madre y luego de mirarme por un segundo como esperando a que lo siga, cruzo el living principal seguido por mi, mientras saliamos a la calle y caminábamos a la madrugada como si fuéramos dos fantasmas solitarios.

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En cuanto llegamos a la puerta de mi casa, miro a Zac enojada. Ya no estaba ni triste ni confundida (bueno, si estaba de lo último) pero estaba enojada con el. Y mucho.

No entendía porque reaccionó así, primero creí que se había enojado con su madre por habernos interrumpido, pero cuando me dí cuenta que no era esa la razón, la única explicación que le pude encontrar a su repentina reacción fué que se arrepiente de nuestro beso.