Las alas de un ángel... Deseo Impuro © [EN EMISIÓN]

capítulo 2

Pov Ángel

—Eso sería todo por hoy, nos vemos mañana; si quedo alguna duda pueden acercarse y hablarlo conmigo.

Dijo Metatrón mientras daba por cerrada la reunió de esa tarde, luego tres de mis hermanos expandieron sus alas y abandonaron el lugar, mientras los otros dos se acercaron a él para seguir discutiendo algunos asuntos celestiales, por otro lado yo solamente me levanté de mi asiento y me fui del lugar; la verdad era que no tenía razón para participar en esas reuniones, pero por órdenes de nuestro padre debía escuchar y estar presente en cada una de ellas.
Un tiempo después ya dentro del Eden solo me dispuse a sentarme frente al árbol de la vida, tan majestuoso como siempre, de igual forma contemplaba el río que circulaba debajo de este, proveniente de las cataratas de la abundancia; luego de unos minutos solo deje caer lentamente mi cuerpo en el pasto y seguido cerrar mis ojos listo para tomar una siesta, mientras sentía una ligera brisa de viento mover mis cabellos rubios.

Pov Giovanni

Ya como es de saber, desde siempre a existido una gran rivalidad entre el Reino Celestial y el Inframundo, y es debido a esto que no es de sorprender el hecho de que una vez más nos encontráramos en la misión de secuestrar al "príncipe de Dios", mejor conocido como Miguel, quien constantemente con sus tropas atacaba nuestro territorio; luego de pasar semanas intentando crear el plan perfecto descubrí que en el Eden se ocultaba un tesoro, al parecer era algo tan valioso para "el supremo" que puso a custodiar siete querubines con el único fin de no dejar que nadie se lo llevara, claramente si nos acercabamos a ese tesoro Miguel lucharía para evitar que nos lo robaramos y podríamos raptarlo en ese momento.

—Giovanni, ya hemos esperado mucho, ¿cuando planeas atacar? —se quejo uno de mi colegas mientras observabamos desde lo lejos.

—Debes ser más paciente, Erian —. Dije algo fastidiado debido a su comportamiento infantil— En cuanto los querubines bajen la guardia empezará el plan, hasta entonces esperaremos lo que haga falta.

No pasó mucho hasta que se dio la oportunidad de meternos entre las nubes ingresando al Eden, silenciosamente caminamos más hacia el interior encontrando un ambiente pacífico, intenté no desconcentrarme del motivo principal por el que fuimos ahí empezando ambos a buscar aquel supuesto gran tesoro, luego de escabar y revisar dentro de cada hueco en los árboles no comprendiamos donde estaba escondido este, Erian llegó a meterse debajo de las cascadas con tal de encontrar algo, mientras por otro lado yo me acerqué al árbol de la vida cuando noté un pequeño angel, a simple vista se notaba que no era un querubín; me agaché para ver mejor su rostro, no aparentaba ser muy fuerte que digamos, ¿Qué clase de guardián toma una siesta cuando debería estar cuidando un tesoro?, decidí ignorarlo y solo me levanté para seguir buscando, pero un paso en falso me hizo romper una ramita en el suelo lo que despertó al "bello durmiente", este abrió sus ojos algo sorprendido para luego plasmar el terror en su rostro.