༄Con el pasar de los años, muchos creían asegurar que el amor solo existía entre los seres humanos y que en el planeta no podía existe ninguna especie que fuera semejante a ellos pero con cualidades peculiares. Que equivocados estaban.
「 ¡Bienvenid...
El océano es una extensión de agua salada que llega a todos los continentes del mundo, dominando las tres cuartas partes del mundo, es tan grande que conocerlo todo es sumamente difícil, en especial en aquellas aguas turbias y las profundidades de esta donde hay seres que ni siquiera conocemos que existen, un sinfín de probabilidades y lugares extensos a lo largo y profundo que está llena de misterios y maravillas.
En las millones de islas que se crean por diversas razones, hay seres únicos no descubiertos o singulares del lugar que no puede existir en otro ambiente. Otras no son visitadas por el temor a criaturas hostiles, por sus aguas turbias, por los climas nada confortables para el ser humano o escases de recursos para una vida digna, por lo tanto, estaban deshabitadas.
Sin embargo, en una de esas islas vivía un muchacho, había una pequeña casa en medio de la isla, demasiado simple, con algo en el suelo y cosas que parecían ser sacadas solamente del mar, por estar oxidadas o llenas de plantas marinas secas.
Los que iban a investigar no soportaban estar demasiado tiempo ahí pues las aguas eran muy turbias y no había más que rocas, un poco de pasto y arena con cangrejos y animales poco amigables para los visitantes puesto que parecía que estaban acostumbrados a la presencia del chico.
Este muchacho tampoco hablaba mucho y solo decía que recordaba vivir ahí desde muy pequeño. Muchos intentaron convencerlo de llevarlo a la ciudad en Seúl ya que Corea del Sur era lo más cercano a la isla, o más bien estaba dentro del territorio de esta.
El chico se negaba con mucha constancia y decía que estaba bien donde estaba, que allá no tendría un lugar y no se acomodaría a una vida tan ajetreada lleno de encierro.
Muchos dudaban de como sobrevivía en ese lugar, pero él les decía que comía algas y demás "frutas" del mar. Era todo un misterio que no lograban descifrar, algunos le dejaban como que era solo un muchacho loco que había quedado varado en esa isla por coincidencia tras algún accidente naval y había perdido la memoria.
Pero podían preguntarle su nombre y él respondía con mucha seguridad "HoSeok", entonces creían que quizá eran los padres de este los que habrían quedado varados ahí y él había nacido ahí.
Preguntaron por sus padres y él respondió en el fondo del mar, haciéndoles creer que se refería a que estaban muertos y así lo dejaron.
